martes, 8 de abril de 2008

ROBANDO PARA LA KORONA

Otro que roba 'para la corona'
EL PRIMO DEL PRESIDENTE
Néstor Kirchner, como casi todo el mundo, tiene primos. Pero uno de ellos, de nombre Carlos Santiago, con el mismo apellido del Presidente, tiene sus particularidades. Casi desconocido por el público, ocupaba un puesto clave en el gobierno: subsecretario de Coordinación de Obra Pública. Ese cargo, dicho sea al pasar, fue creado especialmente para él.
No se trata de una función menor. Dependiente directo del "cajero" Julio De Vido, el "primo" era encargado de entregar el dinero de la obra pública a todos los municipios de la provincia de Buenos Aires. En otros términos: cumplía un papel de primera importancia en la "borocotización" de los intendentes.
Un funcionario de ese organismo que no reveló su nombre, declaró a LaPolíticaOnLine (23/7): "Más allá de los anuncios rimbombantes, la obra pública es el efecto de presión más grande de la Argentina. Es lo que determina, entre muchas otras cosas, que muchos se callen y no digan lo que piensan del Presidente". Sobre los anuncios estentóreos de Kirchner (el jefe del Ejecutivo, no el primo) acerca de "nuevas obras", el mismo infidente dijo: "Es una payasada, repiten anuncios cuatro veces. Dicen que van a construir cosas que ya se lanzaron hace cinco años. Lo que hacen es prometer e ir bajando la guita de a poco, así presionan y presionan".
Ahora bien: al primito se le fue la mano. Según el medio citado, su trato con los punteros municipales era peor que áspero y, además, les hizo multitud de promesas jamás cumplidas. Por eso, como siempre ocurre con estas mafias, los intendentes fueron acumulando información sobre Carlos Kirchner hasta confeccionar un prontuario, y amenazaron con entregarlo a la prensa.
Consecuencia: el primo se tomó una licencia por "razones de salud". Sucede que, salvo el Presidente, su mujer y su hermana, de toda la banda corrompida de la camarilla gobernante éste es el único que lleva el apellido Kirchner, lo cual, en este caso, lo hace particularmente vulnerable.
De todos modos, al muchacho le encontrarán un nuevo puesto. Ya fue jefe de Estudios y Proyectos de la Municipalidad de Río Gallegos cuando su primo era intendente de esa ciudad. Durante los dos primeros años de la presidencia Kirchner, dirigió el Instituto de Desarrollo Urbano y Vivienda en Santa Cruz, hasta que De Vido lo incorporó a su gavilla. Ahora, veremos dónde aterriza, y que quienes queden bajo su órbita vayan agarrándose los bolsillos.



Alejandro Guerrero

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