jueves, 22 de enero de 2009

KKS EN 2009

El kirchnerismo al comenzar 2009POR ROSENDO FRAGA
Al comenzar el año, el kirchnerismo busca al peronismo como alternativa electoral y como estructura de poder.
CIUDAD DE BUENOS AIRES (NuevaMayoría). Al comenzar el año, el kirchnerismo busca al peronismo como alternativa electoral y como estructura de poder. Los sondeos muestran que el consenso del Gobierno sigue bajo y sólo uno de cada cuatro tiene imagen positiva del mismo. Pero en términos electorales mantiene un tercio de los votos, aunque sean 12 puntos menos que en la elección presidencial y 7 por debajo de la legislativa de 2005. Si la oposición se mantiene dividida y en la provincia de Buenos Aires no se articula un frente anti-kirchnerista, el oficialismo puede eludir la derrota en octubre de 2009 -aunque pierda votos y legisladores- y un triunfo en estas condiciones no garantice ganar la elección presidencial siguiente. En lo inmediato, Kirchner trata de mostrar un peronismo mucho más unido de lo que está. La insinuación de la candidatura de Carlos Reutemann ha sido elocuente. Habiendo asumido públicas posiciones como legislador contra el gobierno nacional en el Senado, el kirchnerismo trató de mostrarlo como un hombre propio, algo que no es. La actitud asumida por el gobernador de Buenos Aires Daniel Scioli en apoyo del reclamo del campo, junto con sus colegas de Santa Fe (Binner) y Córdoba (Schiaretti), muestran ya al iniciar el año que no están dispuestos a mantener una posición dócil frente al gobierno nacional. La respuesta del Gobierno frente a ello es hacer de la "caja" un instrumento aún más poderoso para disciplinar gobernadores e intendentes, sobre todo en un año de inevitable ajuste económico, en el cual además se realizarán elecciones legislativas. En este marco, los gobernadores pueden ser un nuevo frente de conflicto para el oficialismo durante el año que se inicia.

En el primer mes del año, el campo volvió a ser un protagonista político. La combinación de baja en los precios internacionales por la crisis global, la sequía y políticas oficiales que son insuficientes e incluso contraproducentes para el sector, han vuelto a crear un clima propicio para la protesta del campo. La Comisión de Enlace cometió el error de suspenderla hasta marzo, en vez de poner en marcha acciones que, sin llegar a los cortes de ruta, canalizaran el clima de descontento existente. Entidades como CARBAP, la FAA y la Sociedad Rural de San Pedro han comenzado con asambleas, movilizaciones y protestas, que en algunos casos ya han incluido cortes parciales de ruta. En el caso de Santa Fe, la pérdida de puestos de trabajo en la industria metalúrgica llevó a una protesta en conjunto de la combativa seccional del gremio metalúrgico de San Nicolás y la FAA. Pero comienzan a surgir otros focos de conflicto con impacto social importante. Uno de ellos es el abastecimiento de combustible, donde los expendedores (estaciones de servicio) y el sindicato del sector en diciembre suspendieron la venta durante un día, generando múltiples dificultades, lo que puede repetirse y por un plazo aun más largo. A ello se agrega que dirigentes rurales populares como Buzzi y De Angeli asumen la posibilidad de ser candidatos, lógicamente en las filas opositoras.

En cuanto a la economía, al comenzar el año es claro que no será favorable al Gobierno, ya se trate de sólo una desaceleración, una recesión o una estanflación, y por ello las tensiones sociales van en aumento. Los trabajadores formales de empresas medianas y grandes -que son los efectivamente representados por la CGT-, a través de dirigentes como el mismo Hugo Moyano han comenzado a plantear el porcentaje de aumento salarial del año por encima de la pauta del Gobierno, que es la inflación oficial prevista. Mientras tanto suspensiones y despidos van en aumento, no sólo en la industria de la construcción y el sector de fabricantes de máquinas y herramientas sino también en empresas de primera línea como es el caso del grupo Techint. Las cifras de desempleo todavía no registran la perdida de puestos de trabajo en la economía informal en la cual trabajan aproximadamente 2 de cada 5 trabajadores, ni el ajuste de ingresos que sufren quienes están empleados en las Pymes, que es otro cada 5. Es decir que 3 de cada 5 ya están sufriendo el ajuste. La CGT mantiene por ahora el apoyo al Gobierno pero, al igual que los gobernadores justicialistas, manteniendo márgenes de maniobra para tomar distancia cuando lo crean conveniente. Sin duda la conflictividad social será un dato relevante en el año que se inicia y ello no jugará a favor del Gobierno en términos electorales.

En cuanto a la política exterior, que Cristina Kirchner visite Cuba al mismo tiempo que Obama asume en los EEUU confirma que carece de estrategia. El nuevo presidente de los EEUU tiene imagen positiva para 4 de cada 5 personas en el mundo y lo mismo sucede en la Argentina. Con Bush, el acercamiento a Washington restaba y no sumaba en la opinión pública local. Pero ahora el acercamiento con un Presidente afro-americano muy popular en el país suma en la opinión pública argentina, en un año de elecciones legislativas. Obama tiene en la Argentina más del doble de imagen positiva que los Kirchner y la política exterior de las ultimas dos administraciones -que siempre ha estado muy atenta a los sondeos- no parece registrarlo. El cambio de actitud del oficialismo frente a los cortes por las papeleras responde a dos razones: los sondeos muestran que hoy son impopulares incluso dentro de la provincia de Entre Ríos, y suspenderlo podría ser una situación que permitiera a la Argentina algún tipo de negociación con Uruguay para levantar el veto planteado en UNASUR a la candidatura del ex presidente Kirchner para ejercer su representación permanente.


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