martes, 30 de noviembre de 2010

REYES DE LA COIMA


La muerte de Kirchner dejó al descubierto el sistema de coimas oficial
Por Marcelo López Masia

www.notiar.com.ar




El kirchnerismo creyó haber descubierto la forma ideal para cobrar "estímulos" sin dejar rastros. Hasta se vanagloriaban del "know how" inventado.

Luego del traspié por el caso Skanska, donde quedó develada la forma de trabajar de las usinas de facturas truchas, muy bien explicadas en el libro “El Club K de la obra pública”, del periodista Pablo Abiad, los pingüinos cambiaron su estrategia.

“Todo Cash”, sería la fórmula, según también explicó con lujo de detalles el escritor Jorge Asis en su obra sobre “la marroquinería política”.

Este sistema de corrupción centralizado en la figura de “El dueño” tenía múltiples tabicamientos, pero sólo “él”, (como lo llama la presidenta) sabía cuáles eran los arreglos con las mineras, las petroleras, las concesionarias de servicios públicos, el transporte vial, hídrico y férreo, la pesca, la publicidad oficial, el juego y cuánto negocio por derecha o izquierda usted quiera imaginar.

El método era sencillo. Cómo los K tenían y tienen pavor de las cámaras ocultas, el “marroquinero” privado concurría al despacho de los funcionarios estatales y pedía permiso para ir al baño. En el sanitario dejaba el contenido de su portafolio, sin que nadie se lo reciba.

No había posibilidad alguna de que el agente público quedara escrachado.

Claro, salvo que algún ministro se olvidara la bolsa en el botiquín, como ocurrió con la inimputable Felisa Miceli.

Otra “viveza” santacruceña (lugar frío si los hay), era la concurrencia a baños sauna y turcos, para charlar cara a cara, a “calzón quitado”, literalmente, con los interlocutores que podían ser sospechados de llevar alguna grabadora indiscreta.

Al mejor estilo de la mafia internacional, los spa se hicieron más importantes que los cafés donde tradicionalmente se armaba la rosca.

Con los amigos venezolanos, no hacía falta más que viajar cuatro o cinco horas en avión y arreglar todo “cara a cara”, sin documentos o contradocumentos, como osó “practicar” el molesto embajador Eduardo Sadous, quién recibió un sonoro “shot de cul” cuando tuvo la peregrina idea de redactar un mail acusatorio y distribuirlo por la red diplomática argentina.

Claro, acá también las cosas podían fallar si una imprevisible aduanera como Luján Telpuk decidía abrir las valijas llenas de alegrías bolivarianas o si un asustadizo Guido Antonini Wilson marchaba a Miami para romper todos los códigos de la corrupción y, en combinación con el FBI norteamericano, mandar presos a los propios "cumpas"..

El problema eran los europeos. "Gente jodida esa", pensaban los pícaros funcionarios K.

“No se pueden inventar viajes a España, Francia o Alemania todos los meses”, maldecían los muchachos de la orga.

Aquí no se podía aplicar el sistema de “me da permiso para pasar al baño, señor ministro” o “por qué no nos vemos en el baño finlandés, señor secretario. Hasta el juez federal va a estar presente”.

Lo lógico hubiera sido dejar esas geografías tan estructuradas libres del diezmo real, pero la voracidad de los sureños no tenía limites y, como suelen preguntarse estos chicos malos: “te lo vas a perder?”.

Fue entonces que llegó el principio del fin del kirchnerismo, sin vueltas.

¿Cuánto tuvo que ver con la muerte de Néstor la noticia de que miles y miles de mails de un verdadero impresentable como Manuel Vázquez iban a ser publicados en forma inminente por los dos principales diarios argentinos?

El periodista Roberto García lo había vaticinado al menos tres veces desde su editorial inicial en el programa que tiene en Canal 26, varias semanas antes del desenlace fatal de El Calafate.

El ex Ambito Financiero contó con lujo de detalles cómo sería el calvario K cuando se comenzaran a exhibir a la luz pública cifras de comisiones, lugares de encuentros, fechas de pago y todo lo que constituía una impensable pesadilla para los “vivos” de la Patagonia.

Los alemanes, con su rígida mentalidad prusiana, suelen decir que “la fortaleza de una cadena queda establecida por la poca resistencia que ofrezca el eslabón más débil”.

Vázquez creyó que borrando los miles de mails que envió a diestra y siniestra durante sus años de gloria junto a Ricardo Jaime había solucionado su problema y, por añadidura, los de sus amigos y ex jefes.

El hombre tiene su edad (casi sesenta años) y se ve que conoce muy poco sobre las nuevas tecnologías.

En el otro extremo se ubica el ex presidente norteamericano Bill Clinton quién, como primer mandatario de la potencia más grande del planeta envió sólo dos mails durante sus ocho años de gestión- Ambos envíos solo decían “testing, testing”.

Difícilmente el marido de la actual Secretaria de Estado hubiera caído presa de WikiLeak, la web de Julian Assange que publicó más de 75.000 documentos secretos sobre la Guerra de Afganistán.y otros 400.000 informes sobre el conflicto en Irak, donde se detallaban los casos de tortura por parte de militares estadounidenses.

“Es el disco rígido, estúpido”, le diría a sus sucesores republicanos y a los pingüinos vernáculos quienes no pueden creer como pasaron de “la gloria a Devoto” en tan pocas horas.

Marcelo López Masia
marceloraullopez@yahoo.com.ar

Fuente: Tribuna de Periodistas

EL SINIESTRO


SI ALGUNO TIENE EL MAIL DE HILLARY, MANDENLE ESTE EDITORIAL DE LA NUEVA PROVINCIA DEL 23 DE MARZO DE 2006.

EDITORIAL
Asesinos

El viernes 4 de julio de 1975 una bomba estalló en el céntrico bar porteño El Ibérico. La finalidad del atentado fue asesinar a un oficial naval. Murieron dos parroquianos. Un mozo y una mujer en la puerta del baño; varios resultaron heridos.
Poco días más tarde fueron detenidos Jorge Enrique Taiana, cofundador de Descamisados, y su esposa, Graciela Iturraspe, alias "Inés". Ella fue conducida a la cárcel de Devoto (por tener dos hijos menores) y él, a La Plata.
Más tarde, Jorge Taiana fue trasladado al penal de Rawson en el que eligió prestar tareas en la panadería, hasta salir en "libertad vigilada".
Taiana, que hace treinta años se dedicaba a poner bombas y matar gente, ayer como canciller de la Argentina se llenó la boca con la defensa de los derechos humanos. Hay hipocresías siniestras.

GILADA


GILADA MADE IN USA



¡Que mal que anda la diplomacia Norteamericana! ¡Qué escaso nivel, mi Dios...! ¿Para qué buscar información supuestamente privilegiada o calificada de forma tan dificil? ¿No era más fácil hablar con los medios graficos, televisivos o simplemente con cualquier ciudadano común, para saber el estado mental de la presidente? ¡Cómo complican las cosas! Vean, Yanquis, si yo tengo una cosa que camina como pato, hace cua cua como pato y tiene pico de pato, no duden: es un pato y nada más. De la misma manera, si te miento en las cifras oficiales, me compro carteras de 30.000 euros en medio de la hambruna general, o digo que las vacas son escondidas en los campos y por eso no hay vacas o califico a la principal fuente de ingreso, como un yuyo miserable o creo que la pobreza ha bajado; no duden es un pato. Churchill solía decir que Alemania perdió la primera guerra mundial porque el alto mando germano terminó creyendo sus propios comunicados, que eran, por cierto, todas mentiras o actos delirantes sin igual. Del mismo modo, las vacas no se consumieron, sino que esperan escondidas detrás de los árboles o subidas en ellos o hay que comprar podadoras para liquidar al yuyo infame y bue... lo que se les ocurra.

Díganme qué les costaba trazar un paralelismo entre la canción de los locos Adams y la familia reinante, en vez de hacer semejantes papelones.

Noel Ciorán

tinoki26@hotmail.com

TILINGA PIRADA


¡SEÑORA!, EN WASHINGTON ESTÁN PREOCUPADOS POR SU SALUD MENTAL… ¿Y A MÍ QUÉ?



¡Como se lo digo, señora!; es más, hablan de “bipolaridad”. El trastorno bipolar, es una psicosis maníaco-depresiva, que se caracteriza por la alternancia de períodos de euforia y excitabilidad, manía, y períodos de depresión, donde el paso de un estado a otro puede ser abrupto.

Le digo que la cosa es para no inquietarse demasiado. Santiago Kovadloff, ensayista, traductor, poeta y antólogo argentino. El personaje, cuenta con un bagaje de títulos y honores que me relegan a la condición de “microbio”, y actualmente se desempeña como profesor de filosofía y conferencista. Y en más de una oportunidad ha hecho un minucioso repaso sobre su patología y la de quien en vida fuera su esposo, siendo mucho más cruel en sus argumentos.

Por otra parte, la bipolaridad, es un trastorno que a “ojo de buen cubero”, debe padecer no menos del 60 o 70% de nuestra población. A modo de ejemplo, le puedo citar dos casos, uno de los cuales le rozará más que íntimamente. La muerte de su esposo… ¿está muerto verdad?, a quien en vida eran pocos los que no le reputeaban, y a quien luego de su muerte, confío en que así sea, esos mismos callan quizá por una simple cuestión de respeto, o le confieren la calidad de “prócer”. La otra cita ya es más vulgar y hasta cotidiana; hasta hace unas tres fechas atrás, los jugadores de Quilmes -le estoy hablando de “Fulbo”-, prácticamente quisieron ser linchados por algunos “simpatizantes”, debido a los magros resultados obtenidos. Debieron soportar importantes daños en sus vehículos particulares y frentes de sus casas. Bastó con que ganaran dos partidos para que la cosa se revirtiera y ahora prácticamente se les considere “héroes nacionales o cuando menos quilmeños”, ¿se da cuenta señora? Y con esto le quiero decir que la “bipolaridad” es como que “casi nos pertenece”, y entonces, Ud., nos representa cabalmente.

Así la cosa no venga a cuento, señora, me permito preguntarle si los restos de quien en vida fuera su esposo, fueron cremados, o descansan en alguna bóveda familiar, tierra o nicho. Y le hago la pregunta, porque algunas malas lenguas andan sugiriendo la posibilidad que esté vivo, ¡Dios no lo permita! Y digo Dios no lo permita, porque se trataría del fraude más grande que registre la historia Universal , y modestamente creo que deberíamos procurar pasar un poco más desapercibidos, cuando menos respecto a hechos más que avergonzantes y descalificadores. Por otra parte, Ud. sabe perfectamente bien como funciona “la chusma”, -gente soez y vulgar- que se entretiene haciendo circular cuanta dañina fantasía se les ocurra, de la que luego se hace “eco”, otra gente no tan soez ni vulgar, en este caso, debido a esa famosa frase: “ver para creer”.

Ricardo Jorge Pareja

parejaricardo@hotmail.com

MARIONETA


LA MARIONETA SIN EL TITIRITERO Y EL PROBABLE RUMBO DEL PAÍS
El fallecimiento de Néstor Kirchner produjo un verdadero terremoto, no solo en el mundo político, sino también en el grueso de la ciudadanía. Si bien estaba la posibilidad de su muerte, nadie pensaba en la probabilidad que ocurriera tan sorpresiva y prontamente.
Néstor había dirigido la política nacional con un personalismo tan cerrado y un autoritarismo más propio de un dictador que de un hombre de la democracia, durante casi siete años. Ninguna decisión gubernamental de importancia se ponía en vigencia sin su previa aprobación. Concentraba absolutamente toda la suma del poder
Primero como titular del poder Ejecutivo y luego en un teórico segundo plano cuando impuso a su mujer como presidente de los argentinos.
No es el caso de un “monje gris” que gobierna detrás de bambalinas. Néstor Kirchner nunca ocultó que él es el que gobernaba. Lo hacía abierta y descaradamente, sin tapujos, usando todos los medios y facilidades del Estado que necesita para ello sin tener cargo oficial alguno.
Esa situación totalmente anómala, verdadera burla al sistema democrático, fue bautizada como “doble comando”.
El ex presidente convertido en un titiritero y la presidente sin ningún margen de maniobra propia, en una marioneta manipulada por el marido.
Cristina en algunas oportunidades intentó rebelarse a esta triste situación de quedar públicamente convertida en una figurita de cartón pintado, pero por lo menos en una oportunidad recibió una feroz golpiza de su marido.
Con el correr del tiempo en la gestión de la presidente esta extraña relación de gobierno fue quedando aceptada por la ciudadanía ¡¡!! y la presidente se ocupaba de la comunicación de la acción oficial, mientras su consorte maquinaba las decisiones gubernamentales más importantes y disciplinaba a sus seguidores mediante el ya conocido procedimiento kirchnerista de la amenaza, la presión, la compra de voluntades y conciencias y la extorsión.
Pero imprevistamente Néstor falleció descolocando totalmente el tablero político.
Su muerte y sus exequias, como casi todo de lo relacionado con la pareja real, deja un manto de dudas por la falta de transparencia, de información creíble y de procederes dudosos. Desde un ataque cardíaco, una profunda depresión y suicidio, un asesinato, un tiro accidental, hasta la simulación y su fuga a un país extranjero.
Como siempre, la situación daba lugar a cualquier especulación y fantasía popular.
Néstor Kirchner, el titiritero, había muerto y Cristina, la marioneta, quedaba sin quien la manipulase y dirigiese en el irracional rumbo que hace años tomó la política argentina.
La gran totalidad del país pensó que al desaparecer definitivamente el factor que envileció y degrado la política hasta extremos pocas veces visto y tomó el camino inverso al desarrollo que el país exigía, la situación debería normalizarse.
Cristina podría usar los factores favorables de la economía mundial, desaprovechados hasta el momento durante casi siete años, y finalmente cumplir lo que prometió más de una vez en la campaña presidencial, en su discurso en el Teatro Argentino de la ciudad de La Plata y en varias oportunidades posteriores al comienzo de su mandato.
También dejar atrás el estilo confrontativo y prepotente de su conjugue. Dejar de lado el estilo engañoso, llenos de trampas y chicanas de mala fe y los truculentos métodos usados por el ex presidente que caracterizó a la mal llamada democracia de estos últimos años.
Un conocido dicho del refranero popular dice que “muerto el perro se acabó la rabia”.
Pero lamentablemente desde las mismas exequias de Kirchner las actitudes de Cristina no fueron muy alentadoras en lo esperado.
El funeral fue convertido en un espectáculo mediático. Cientos de micros estacionados en la Av. 9 de Julio transportaron desde lugares muy alejados a miles de ciudadanos para dar marco popular al suceso. La mayoría conminados compulsivamente o por una dádiva oficial. Cristina ordenó el funeral en la Casa Rosada y no en el lugar en donde todos los argentinos están representados, el Congreso Nacional.
No permitió que líderes de la oposición le presentaran las condolencias y simplemente no los recibió. Lo mismo hizo con el resto de aquellos que se acercaron a presentar sus pésames, pero que no comulgaban con el kirchnerismo. Si en cambio a personajes polémicos y discutidos, algunos sencillamente impresentables, aliados al oficialismo. El desfile frente el ataúd se convirtió en un verdadero espectáculo casi teatral en donde había de todo, excepto la solemnidad que la circunstancia requería.
Las primeras decisiones de Cristina, seguramente llevadas por el dolor, el desconsuelo y desorientación inicial, fueron verdaderamente lamentables. Probablemente la que más impactó es que “… hay que profundizar el modelo…”.
Con el correr de los días se evidenció más claramente que la presidente se cerraba tozudamente en aquellos aspectos que llevaron al fracaso las gestiones de la dinastía Kirchner y que habían dividido el país en dos bandos antagónicos.
“…Al presupuesto que no se le cambie una coma…” ordenó tozudamente a la banca oficialista en el Congreso. Y así varias otras evidencias más, que señalaban que nuevamente se tomaba el camino erróneo.
Pero también a los pocos días unos pocos chispazos de racionalidad, por ejemplo el disimulado arreglo con el FMI para permitir sus controles en el país, la búsqueda de consenso con los empresarios industriales y bancarios y otros aspectos casi inimaginables durante la vida de Néstor.
Seguramente la presidente, fuera de los tejes y manejes del titiritero, fuera de la influencia perversa, maléfica e irracional de su consorte fallecido, pudo dejar de ser la marioneta de cartón pintado, ser ella misma y obrar libremente, adoptando decisiones que a todas luces y desde cualquier ángulo que se lo mire, se imponían casi por su propio peso.
Paralelamente el oficialismo se percató que se podía explotar políticamente el sentimentalismo de los argentinos mediante el nuevo perfil que mostraba la presidente en sus mermadas apariciones públicas. Perfil marcado por la desgracia de la desaparición del compañero de su vida y la infinita tristeza de ese hecho: el negro del luto, su desconocida moderación, sus gestos sin su soberbia y agresividad característica, sus mohines y su desconsolado llanto presente en casi cada uno de sus discursos.
Con un poco de sobreactuación, asumió el rol de víctima de un cruel y triste destino.
En solamente en menos de un mes la imagen positiva de Cristina subió del orden de 30 puntos y su intensión de voto trepó a un 46 %.
De ser ahora las elecciones presidenciales Cristina ganaría seguramente en la primera vuelta.
Pero seguramente en los próximos meses y hasta las elecciones presidenciales la actual fotografía de la situación política cambiará sustancialmente.
Este apoyo popular, dolido por la situación, es circunstancial y pasajero, producto del sorpresivo fallecimiento de su conyugue. Es simplemente una cuestión emocional. El sentimentalismo “tanguero” de los argentinos. Todos conocemos la voluble y cambiante postura de los argentinos. Pasamos de un extremo a otro. La pendularidad caracteriza nuestra historia.
Analizando muy someramente la situación podemos colegir que Cristina es absolutamente incapaz de mantener la cohesión de la “tropa” que Néstor reclutó tan coercitivamente a los largo de los siete años y que ya en vida comenzaban a desertar del oficialismo.
Por otro lado también sabemos que la presidente no tiene, y así lo hemos visto durante su fallida gestión, capacidad para ello. Su función, recordemos, era sencillamente la de comunicar. Todo lo demás lo hacía su esposo. Una muestra de su manifiesta incapacidad es el verdadero aquelarre y desorden del reciente tratamiento del presupuesto en el Congreso.
A ello le debemos agregar que las bombas que el ex presidente preparaba, postergando para el futuro soluciones para los problemas que exigía el país y que aparecieron durante su gestión, comenzaron a explotar en las manos de su esposa.
Por otro lado empezó a aflorar con toda su crudeza la trama y el verdadero esquema delictivo que Néstor había montado en su desmedida ambición de poder y dinero.
La investigación que actualmente se lleva a cabo contra el ex Secretario de Transportes; Ricardo Jaime, revela, sin dejar lugar a ninguna duda, las perversas y delictivas relaciones entre este personaje y la cima del poder.
La marioneta se ha quedado sin el titiritero.
No podrá mediante su conocida cháchara, con la pesada, demasiado pesada y maloliente mochila, que le dejó el ex presidente. El ocaso de Cristina es casi inminente. De nada le valdrán sus cuantiosos bienes para esquivar la Justicia y también su segura detención de por vida en alguna unidad carcelaria.
Y el futuro del país, lamentablemente, es gris e incierto

Dr. ALFREDO RAÚL WEINSTABL
alfredo@weinstabl.com.ar

MOTOR DE LA TIRANÍA KIRCHNERISTA


EL ODIO CONTRA LA ARGENTINA ES EL MOTOR DE ESTA TIRANÍA

Por Cosme Beccar Varela

En su discurso de homenaje a la batalla de la Vuelta de Obligado, la viuda de Kirchner dijo: "Hoy es necesario despojar nuestras cabezas de las cadenas culturales, más invisibles, pero más dañinas que los cañones" ("La Nación" 21/11/2010, pag. 12).

Está claro que para esta militante de izquierda es más importante destruir lo que resta de la cultura católica y tradicional en las almas de los argentinos que haber destruido las FFAA. Esto no fue sino un primer paso, lo mismo que todos los demás actos de tiranía, corrupción administrativa, confiscaciones y usurpación de poder cometidos desde que los Kirchner se encaramaron al poder en el 2003.

El hecho de que la viuda use su dinero mal habido para comprarse carteras, vestidos, fincas, departamentos y otros lujos, pasear por EEUU y Europa, no es incompatible con el odio visceral que tiene, como militante de izquierda, contra nuestra religión, nuestra moral y nuestra cultura.

Los lujos del mundo siempre han sido gozados por los tiranos usando para adquirirlos el poder que usurpan y la plata que roban. Que puedan disfrutar más o menos de esos placeres depende del grado de cultura que el tirano tenga. Entre los de izquierda, Trotzky, hombre culto e inteligente, era capaz de gozar más que Marx, que era una especie de salvaje intelectualizado o que Lenin, que era un burócrata en rebelión contra las clases altas.

En cuanto a la Sra. Kirchner , como puede colegirse con sólo mirarle la cara y verla actuar, es obvio que su capacidad de gozo de los refinamientos del mundo es ínfima, tal es su vulgaridad innata. Ella sólo puede sentir el placer de tener todo lo que el dinero puede comprar, pero eso no modifica un ápíce su odio por toda forma de superioridad espiritual, intelectual, psicológica, cultural y tradicional, por encima de todo lo cual y dando sustento a esa jerarquía legítima, está Dios Nuestro Señor, objeto máximo de odio para esta clase de gente. Y en ese odio consiste la izquierda.

De esa estofa está hecha la muñeca que usurpa la presidencia y toda la "dirigencia" corrupta e inepta cuyo conjunto, más los cerebros neo-marxistas que por detrás de las bambalinas planean y mueven la máquina, han montado la peor tiranía de nuestra Historia.

Mientras quede un solo argentino que crea que Nuestro Señor Jesucristo es Dios, que existe una Moral objetiva que prohibe el aborto, la fornicación, las prácticas homosexuales, el adulterio, la blasfemia, el robo, el abuso de poder, la agitación y el resentimiento sociales, el igualitarismo insolente, la tiranía, la privación de la libertad sin causa legítima, la mentira, la traición, el fraude, la corrupción de la niñez y de los adolescentes, la enseñanza de falsedades a la que llaman "educación" y la persecución de la Iglesia Católica , la izquierda querrá destruirlo o corromperlo.

Mientras haya un argentino que reconozca que esa Moral además de prohibir lo dicho y muchas otras cosas, ordena rendir culto a Dios según lo manda la Santa Iglesia Católica , venerar a la Santísima Virgen y a los santos , ser casto, generoso, valiente, laborioso, sincero, caballero, respetuoso, honrado, bondadoso, paciente y que protege la familia, la izquierda querrá destruirlo o corromperlo.

Mientras haya un argentino que crea que su alma es inmortal y que esta vida no es la Vida sino que estamos destinados a una vida eterna en el Cielo o en el infierno, la izquierda querrá destruirlo o corromperlo.

Mientras haya un argentino que rechace las mentiras del materialismo histórico, las opiniones "politically correct" y esté decidido a reconocer la verdadera Historia de la Cristiandad de la que formamos parte y a admirar a sus héroes y execrar a los asesinos de la revolución francesa, de la revolución bolchevique, de la guerra civil española, de la persecución masónica de los "cristeros" mejicanos, del terrorismo del siglo XX y de este siglo, toda forma de injusticia cometida con o sin guante blanco, y a llamar herejes a los herejes y cismáticos a los cismáticos, la izquierda querrá destruirlo o corromperlo.

Mientras todo eso esté firmemente en la cabeza de alguien, la agitadora viperina y llena de odio que usurpa la presidencia no descansará, ni ella ni sus mandantes y cómplices hasta no erradicarlo. Lo dijo claramente en el discurso que cito al comienzo de ese artículo.

Para eso ya en el 2005 el usurpador Kirchner dictó el decreto 1086 aprobando el Documento titulado "Hacia un Plan Nacional contra la discriminación. La discriminación en la Argentina", de casi 160 páginas, en el cual se exponen minuciosamente qué ideas y qué costumbres deben ser destruidas, por qué otras deben ser reemplazadas y la estrategia a seguir para lograrlo desde el poder. Trataré de transcribirlo (con la ayuda de un experto porque yo no sé cómo se hace) íntegramente en la Sección "Documentos" de este periódico para quien quiera leerlo, aunque desde ya advierto que su redacción es deliberadamente farragosa y confusa, pero las ideas destructivas están todas allí, inclusive un fuerte indigenismo que intenta destruir las raíces hispánicas de nuestra tradición, y si se presta atención se verá que el proyecto está en pleno curso de ejecución.

No les basta que sus arcas estén llenas hasta el tope con el oro mal habido que les permite gozar la vida hasta las heces, ni tener todos los resortes del poder en la manos. Ellos quieren las almas. Ellos quieren poder decirle a su amo, satanás: "Aquí tienes una nación verdaderamente corrompida. Lo hemos logrado. Es toda tuya."

Contra la tiranía que intenta esa maldita entrega deben luchar todos los argentinos de bien, hasta conseguir derrotarlo y substituirla por una Autoridad nacional que defienda lo que aún no cayó y restablezca la Argentina perdida. Si eso no se intenta, todas las demás formas de oposición, por loables que sean sus objetivos, están condenadas al fracaso porque dejan en pié el poder de la tiranía que es la causa de todos los males.

JUGANDO A LAS BARAJAS


EMPIEZAN LOS REALINEAMIENTOS EN EL KIRCHNERISMO

El eje Aníbal F-Massa-Randazzo intenta desplazar a Scioli

Por el Dr. Carlos Tórtora (*)

El vacío de conducción política generado por la desaparición de Néstor Kirchner es una realidad que el marketing presidencial apenas logra disimular. En este desierto, Aníbal Fernández empieza a darse ciertos lujos que en vida del ex presidente jamás hubiera soñado. No sin trabajo habría logrado una tregua con su rival en el gabinete, Florencio Randazzo, y ambos convergen ahora en un mismo plan para la provincia de Buenos Aires. El mismo consiste en impulsar la candidatura a gobernador del ubicuo Sergio Massa, que ya hizo trascender que lanzaría su candidatura a más tardar en marzo, con el apoyo del grupo de los ocho intendentes díscolos. El eje Aníbal F-Randazzo no piensa que Massa vaya a estar en condiciones de ganarle una interna del PJ a Daniel Scioli. Su cálculo es otro. Una vez que el tigrense se posicione mejor en las encuestas, tratarían de convencer a CFK de lo siguiente: el gobierno debe apostar todas sus fichas a ganar la elección presidencial en la primera vuelta y para eso lo ideal es que Scioli refuerce la fórmula siendo nuevamente candidato a vicepresidente. Para mantener el caudal de votos peronistas en Buenos Aires, Massa sería entonces más que suficiente. Esta maniobra tiene un punto extra a favor. La presidente tiene afecto por Massita desde que éste fuera su Jefe de Gabinete. Fue su fallecido esposo el que lo acusó de traidor, no ella. Y poniendo a los dos candidatos en la balanza de la confianza, Cristina confía sin duda mucho más en el intendente que en el gobernador, cuyas ambiciones presidenciales se disimulan apenas. Disimulo que tampoco tuvo Randazzo días atrás al presentarse en Tigre para darle oxígeno a Massa, como parte de lo planeado. Aníbal F. estaría actuando en interés propio, porque Massa carece de estructura política y él podría plantearse entonces ser el próximo gobernador en el 2015. El único obstáculo importante para este plan hubiera sido Hugo Moyano. Pero la propia CFK, Scioli y los intendentes se ocuparon de ponerle freno. Moyano ya habría entendido que, si intenta digitar el año que viene las listas de candidatos del PJ, puede terminar esposado como Juan José Zanola, si es que tal cosa no ocurre antes.

El gobernador se defiende como puede

Acostumbrado a salir del paso con paciencia y sin hacer ruido, Scioli empieza a tomar contramedidas para evitar que le arrebaten su poder territorial y lo envíen otra vez a tocar la campanita del Senado. Para el 6 de diciembre está preparando el lanzamiento de la candidatura a vicegobernador de su nuevo hombre de confianza, el Ministro de Acción Social de Buenos Aires y caudillo de Avellaneda, Baldomero Cacho Álvarez. Éste creció recientemente, entre otras cosas, porque es uno de los pocos intendentes que se entiende con la presidente. A Álvarez le tocaría reorganizar el apoyo de los intendentes a la figura de Scioli y frenar la ofensiva del eje Aníbal F-Randazzo-Massa. Hasta se habla de que Julio De Vido, siempre dispuesto a causarle disgustos al Jefe de Gabinete, podría estar más cerca que antes de Scioli. El gobernador trataría de bloquear el crecimiento de Massa advirtiéndole a CFK sobre los riesgos de premiar a los que se rebelaron contra el gobierno.

Los otros

Ante estos dos ejes, los sectores menores se van realineando. Por ejemplo, La Cámpora se está acercando ahora al proyecto Massa, de la mano de Aníbal F., que patrocina desde tiempo atrás la agrupación Jauretche. Edgardo Depetri podría ser el operador de estos sectores juveniles cuyo mayor crédito político no es precisamente ideológico. La Cámpora maneja la floreciente caja de las cooperativas, que es un eficiente aparato clientelista en el que también influye Alicia Kirchner. En la vereda de enfrente, la del Peronismo Federal, está Graciela Camaño, que expresa la ortodoxia duhaldista. Recientemente presentó su candidatura en un acto realizado en el sindicato de gastronómicos en Constitución. Tuvo buena repercusión, pero entre la dirigencia duhaldista abundaron las críticas a Fernando Galmarini y Fernando Villaverde, que se presentaron como sus operadores estrella. Es que Galmarini es el suegro de Massa y esto contribuye a confundir las cosas. Sin embargo, no es cierto que entre el Peronismo Federal y las ramas del neokirchnerismo bonaerense no haya contacto. Cada vez se habla más de la posibilidad de reunificación, es decir, que todos terminen compitiendo dentro del PJ. Por ejemplo, la segunda línea del Peronismo Federal bonaerense que encabezan Mauricio Silva y Hugo Melgar no deja de dialogar con el sciolismo y se prepara para una etapa de realineamientos sorpresivos. El cada vez más silencioso Francisco De Narváez es otro ejemplo de que, cada vez más, todos conversan con todos.

(*) Crónica y Análisis publica el presente artículo del Dr. Carlos Tortora por gentileza del Informador Público.

CARTAGO


EL SINDROME DE CARTAGO

Por el Lic. Gustavo Adolfo Bunse

En cualquier país del mundo más o menos serio, un grave caso como el de Ricardo Jaime… arrasaría con el gobierno. Obligaría a renunciar a todos y…seguramente, además, empujaría a que cualquier parlamento decente, se rindiera postrado ante las evidencias de este gran desfalco organizado desde el poder.

Legisladores, tanto extraños como propios, formarían un juicio político y quitarían los fueros de cualquier mandatario en 48 horas.

Y aunque el principal ladrón se hallara muerto… su socia plena, a cargo de la primera magistratura, tendría que regurgitar su retórica plañidera ante un tribunal de jueces honestos… para que explique como rayos ha hecho para ignorar completamente y no ser cómplice natural de la saga criminal de este asalto a las arcas de la Nación.

La candidatura de ella, aunque sea una necesidad política ficcional … sigue adelante , básicamente porque les importa un reverendo bledo lo que acontece en materia de investigaciones sobre sus propias filas.

Ella está flotando aún en esa nube de impunidad que se acostumbró a respirar cerca del ladrón difunto. Dijo Alsacia que su escenario inmediato es una apuesta muy compleja y sospechosa.

Está signada por las extorsiones de su hija, por la conducta tóxica de su hijo y por la necesidad de fueros … todavía por más tiempo.

Cualquier cosa puede justificarse, al amparo de la necesidad de cumplir con el legado del fallecido carterista, más conocido hoy por los mail de don Manuel Vázquez… como “el número uno”.

Está signada por un odio metafísico que la sigue acompañando, y que transita la piadosa distracción de un pueblo de pavotes…que prefieren beatificar a un corrupto que indignarse cuando los saquean.

En un “amperímetro” de la corrupción el muerto marcaba 100.

Sin la ayuda y la anuencia de ella, al mando del país, eso no se podía.

Con su luto solemne de víctima de una injusticia de la vida fue “lanzada” a través de voceros cuidadosamente elegidos, pero nada fue todavía confirmado, oficialmente.

Si lo que pretende el resto de la cáfila es ponerla en la proa de la nave, para que el viento de los misericordiosos le permita navegar un alegre ensueño,… entonces, en no más de 4 meses tienen que tener preparado un candidato de repuesto.

Y allí corren el riesgo de tener que pagar caro varios costos políticos sin contar con la sorpresa y la evidencia de una farsa mal urdida.

Si lo que planean es darle motor pleno a esa candidatura aprovechando el baldío político de la oposición, tienen que cruzar los dedos para que los vendavales de varios otros gravísimos descubrimientos como el de Jaime, no se la lleven puesta antes de octubre 2011.

Tendrían que tener un “plan de lluvia” muy temerario.

Porque ya empiezan a florecer los depredadores que robaban para ellos

Todo lo que se ha venido improvisando, postergando y simulando en la Argentina, todo lo que se ha artificializado y todo lo que se barrió bajo la alfombra, prefigura un escenario que la obliga a subir interminablemente la apuesta de la mentira.

Los errores estratégicos son tan groseros que resulta inconcebible que ningún asesor se los advierta. La única explicación es que nadie se anima a señalarlo por el clima de terror que aún cunde en “palacio”.

Lo que alarma… en este cuadro de situación peligroso… es que ella, en lugar de haber apostado a la pacificación, a la unión… y a zanjar todas las crispaciones… ha propiciado todo lo contrario. Cuatro discursos y los cuatro fueron un catálogo de mayor odio y de mayor lustre en el desprecio.

Ella ha apostado al riesgo terminal del “Síndrome de Cartago”

En una sociedad, así dividida… se desconfía y se odia a muerte.

Aníbal, el cartaginés, que había aniquilado a todos los cónsules que le salieron al cruce, en Trebbia, en Trasimeno y en Cannas, cayó después, definitivamente, en Zama. Pero antes depredó y saqueó el Imperio de un modo verdaderamente cruel. Arrasaba las aldeas y quemaba todo a su paso. La opción era sumarse a su ejército o morir

Y Cartago fue convertido en cenizas solo por el odio a Aníbal.

Catón… lo había dicho mil veces: “Delenda est Cartagho”

“Cartago debe ser destruida”.

No se trataba de vencerla. Se trataba de destruirla, de arrasarla, de borrarla de la faz de la Tierra para siempre.

Sus piedras, sus ciudadanos, e incluso su recuerdo, debía desaparecer.

Y el punto de vista de Catón era suscripto por todos los romanos. Roma odiaba a Cartago. Pero Cartago también odiaba a Roma como jamás en toda la historia dos naciones se han odiado.

Los ciudadanos de las dos urbes, dueñas ambas de muy extensos territorios más allá de sus muros, creían firmemente …que incluso valía la pena que su ciudad se hundiera en el infierno si conseguía arrastrar a la otra con ellos.

No era sólo rivalidad o enemistad.

Era mucho más: Un odio irracional, cuyos ecos aún nos llegan nítidos después de más de 2000 años. Odio a una persona: Aníbal.

Y Catón lo consiguió.

No vivió para verlo, pero Cartago, capital de la nación púnica, fue arrasada con una minuciosidad tan terrible que los arqueólogos sólo han conseguido encontrar pequeños restos de lo que fuera la mayor y más rica ciudad del Mediterráneo.

Los magníficos edificios fueron primero incendiados, luego demolidos y para finalizar la tarea sus cimientos fueron arrancados de cuajo.

El páramo en el que los romanos convirtieron Cartago fue sembrado con sal para que nada volviera a crecer allí.

Y cualquier resto de la esplendorosa cultura cartaginesa fue perseguido y exterminado. Borrado del libro de la Historia, muchas veces… para siempre.

¿Por qué?

¿Por qué este odio… que aún hoy nos deja perplejos?

Toda la sociedad romana odiaba a una persona simbolizada por Cartago

La odiaban los senadores, los cónsules, los nobles, los comerciantes, los artesanos, los panaderos, los herreros y los campesinos.

Curiosamente… no fue por las muertes despiadadas que causó Aníbal.

Fue por su saqueo y su depredación de las riquezas del Imperio.

PAÍS PEQUEÑO


EL PACTO DEL PAÍS PEQUEÑO

Presos del miedo a no tener nada, los argentinos renunciamos al todo y nos conformamos con apenas un poco.

Por Carlos Mira

“Cuando nosotros, los italianos,
nos hayamos liberado de las calamidades del fascismo,
ustedes, los argentinos,
seguirán sufriendo las consecuencias.”
Conde Sforza

Dicen que si había algo que separaba las opiniones de Néstor y Cristina era el criterio con que cada uno veía el llamado “pacto tripartito” entre empresarios, gremios y Estado. Néstor no lo aprobaba; Cristina, sí. Con su esposo muerto, Cristina ha visto la posibilidad de lanzar nuevamente esa idea al ruedo. No es que el ex presidente fuera un apasionado de las instituciones de la democracia clásica y por eso rehuía del pacto… Lo que en realidad ocurría es que su estrategia se emparentaba con el conflicto y no con la paz, por eso toda firma de un documento que estableciera parámetros que le restaran discrecionalidad era un sacrilegio para él.

Por el otro lado, no es que Cristina sea una “fanática” de la paz y por eso añora un acuerdo de convivencia… Lo que la presidenta tiene en mente no es otra cosa que el mismo esquema del fascio italiano, creado hace 70 años por Benito Mussolini y recreado por Juan Domingo Perón aquí en 1945 cuando el fascismo era vencido en Italia.

Se trata de la misma antigüedad de siempre, consistente en asegurarles a los empresarios cotos de caza no competitivos que les permitan llenarse de oro ofreciendo bienes y servicios de baja calidad y a un altísimo costo (con claro impacto en el individuo consumidor), a cambio de lo cual éstos le reconocen ventajas a los gremios (generalmente en contra de la generación de empleo nuevo), todo bajo el arbitraje del Estado que (de palabra) demoniza a los empresarios (que se dejan demonizar a cambio de sus cotos de caza) y usa a los gremios para sus objetivos políticos (no los del Estado como institución de la democracia sino como entelequia bajo la que se cubren las conveniencias personales de aquellos que ocupan sus sillones). Este es el famoso “pacto tripartito”. Más viejo que María Castaña, es realmente increíble que el peronismo no haya podido elaborar una idea nueva después de 60 años que reemplace a este mamotreto corrupto, pesado, no competitivo, aislacionista, que condena a la gente común al encierro, la pobreza, a consumir lo que le dan y a los precios que les impongan.

¿Cómo es posible, entonces, que semejante esquema concite la atención y el apoyo de tan amplios sectores de la sociedad? Es muy sencillo: porque la gente olvida que el único colectivo realmente unánime es la condición de individuos que tenemos todos. Efectivamente “individuos” somos todos. Frente a esa cualidad nos igualamos todos; en la democracia votando y en la economía consumiendo.

Pero hay que conceder que el enorme logro del fascismo, -por lo menos en aquellos lugares donde ha quedado en pie (y la Argentina es, sino la principal, una de sus más importantes conquistas)- ha sido el haber convencido a la gente que, antes que individuos, las personas son aquello de lo que trabajan (camioneros, médicos, enfermeros, abogados, metalúrgicos, etc, etc). De esa manera ha logrado convencer a una interesante masa electoral de que consiguiendo “conquistas sociales” para sus “gremios” estarán mejor. Nadie atina a darse cuenta de que las ventajas conseguidas en tanto “camionero” son perdidas en tanto individuos, porque el costo que tiene pagar las ventajas para los camioneros lo pagan los mismos camioneros en su calidad de consumidores. De modo que el enorme mecano fascista termina en un tremendo enredo de (como mínimo) suma cero, cuando no directamente de saldo negativo.

Del lado empresario podría decirse lo mismo. Sus cotos de caza les reportan ganancias, pero el estrambótico sistema del fascio les genera costos materiales e inmateriales que les licuan sus beneficios y les impide multiplicarlos a un nivel mucho mayor (que podrían alcanzar si ganaran el genuino favor del individuo consumidor con sus productos). Esa es la razón de que no haya ningún multimillonario argentino a nivel mundial. Han aceptado la demonización del éxito a cambio de que les aseguraran unos beneficios mínimos. Si bien esos beneficios les alcanzan para llevar una muy buena vida, en nada se comparan con los que podrían tener en una sociedad libre.

Las personas que cooptan el Estado (que se llaman a si mismas “Estado” para que todo el mundo crea que ellos son el país mismo) llevan la mejor parte: su discurso demagógico capta masa que no advierte que la usan como carne de cañón (o lo advierte pero prefiere esa indignidad a cambio de tener también “un mínimo” seguro) y sus negocios con gremios y empresarios les permite vivir como millonarios y con los privilegios de los funcionarios, a costa del dinero público.

¿Cómo es posible que tanta gente inteligente no haya desenmascarado esta parodia en 60 años? En el caso argentino creo que se trata de un pacto con la seguridad mínima. En algún pliegue interno de nuestra más profunda personalidad nacional debe de haber algún complejo de inseguridad y de baja estima importante. Presos del miedo a no tener nada, renunciamos al todo y aceptamos un poco. Los empresarios renuncian a las fortunas de la Revista Forbes pero se aseguran sus countries, sus viajes, sus casas en la playa y el engole de sus posesiones. Los trabajadores renuncian a llegar a la cima saliendo de la nada a cambio de su ingreso seguro, de su vacación paga y de su mate en la vereda, conversando con “la patrona”. Y los okupas del Estado renuncian a la historia de los estadistas para quedarse con la guita que no generarían si tuviesen que desenvolverse en la actividad privada.

Estas son los rubros que se “negocian” en el pacto tripartito. Un pacto que simboliza escasez de ambiciones y que representa como nada una estructura mental pequeña que ha producido (como era lógico) un país pequeño.

lunes, 29 de noviembre de 2010

EL DESQUICIO DE LUPPI


29 noviembre, 2010

El desquicio de Federico Luppi y el tercer milagro del Kirchnerismo.


Si bien es cierto que la colonia artística siempre ha tenido relación directa con los gobiernos de turno, también es cierto que desde que el Kirchnerismo maneja los hilos del poder, las diferencias al interior del mundo del espectáculo son cada vez más profundas.

Nunca se sintió, desde este espacio de glamour, tanto la adhesión así como tampoco, la oposición al Presidente electo.

Actores K VS. Actores Opositores.

Desde el programa televisivo 6, 7, 8 los actores que apoyan incondicionalmente al Gobierno bajan línea acomodándose a la vorágine de TIPS que los panelistas estables le dan a los televidentes para que sepan agiornarse, vivir y entender la construcción subjetiva de los componedores del Modelo.

Programa Escuela Para Todos y Todas.

Es que la retórica apunta a penetrar en los imaginarios hasta llegar a conformar un sistema de creencias asentado sobre la base que concibe al Kirchnerismo como un “Movimiento “Progresista” que acercó a la juventud a la política. Cosa que antes, según los adeptos, no sucedía.

Hasta antes de ellos predominaba la ficción juvenil política. En cambio, con ellos, todo es aprendizaje, acción y compromiso.

Sería como el tercer milagro. El auto atribuido. Sin embargo, el tercer milagro que Blog Informes de Medios les reconoce, tiene que ver con haber instalado, conforme a una “guerra mediática" de disparos críticos mutuos, la masacre a Mirtha Legrand. Que sus pares se le animen.

“Destronar” A La Señora De Las Cuatro Décadas. A quien éste año le pegan como nunca antes se vio. De hecho, muchos artistas ya no quieren sentarse a su mesa.

Repasemos, antes de continuar, los dos milagros anteriores.

1) La reconciliación de Elisa Carrió con el agua y el jabón.


2) El viraje intempestivo de Esther Goris a las líneas oficialistas luego de su ruptura con el Wi Fi puntano Alberto Rodríguez Saá. La echó, descortésmente, pero a diferencia de otras, se fue “nutrida”.

Hasta hace no más de tres años, La Reina Madre de la Televisión, como la bautizó “Chiche” Gelblung, era prácticamente intocable. Nadie se atrevía a hablar mal de ella en público y todas las andanzas familiares eran tratadas con absoluto cuidado y delicadeza para no herir el espíritu de la Señora que siempre se preocupa en saber si sus invitadas se ganan las joyas con honra.

Aníbal Fernández: El Pionero.

Independientemente de sus absurdos, de su tendencia a la negación y de una manera de gestionar reprochable, el Jefe De Gabinete se le anima a la conductora y no le deja pasar una. Desde ignorante hasta mala conductora, Fernández, cada vez que puede o que ella provoca, le contesta despedazándola. Le importa, un bledo, la trayectoria o los mitos de mujer indiscutible de los medios.

Tanto es así, que hasta Federico Luppi, casi olvidado, salió en Uruguay a hacer declaraciones sobre Legrand. “Mirtha es ignorante y pobre de espíritu”. Y de Susana Giménez dijo: “Susana ca… por la boca”.

Luppi, es tan vulgar y desgraciado que se equipara a la pobreza que menciona y lo vuelve, escatológicamente desagradable. Vemos, como desde su antagonismo, termina siendo aquello que critica. Efecto rebote.

Ahora, lo que piensa él, también lo piensan muchos actores PRO K.

Golpes y un hijo pululando. Dos situaciones condenables que hablan de un ser oscuro. Con sus diferencias, roza el “Maradonismo” del espectáculo.

Más allá de eso, la tensión generada ante las declaraciones del actor pone en evidencia la necesidad del Kirchnerismo en crear un campo de batalla que se extienda hacia todas las esferas de la vida. Incluso, hasta la del espectáculo.

Desde el lumpen hasta los consagrados, se suman y se matan por remarcar las virtudes y los defectos de un Gobierno que lleva todas las alteridades a lugares bochornosos.

Un funcionamiento a partir del caos y el conflicto.

Se lee en las redes sociales como Facebook y Twitter. Se exacerba con las imágenes conjugadas con fuertes declaraciones y se prolonga en los discursos realizados en los diferentes espacios de pronunciación del Gobierno, acompañado por una platea de actores que solo por militar, son capaces de bajarse del escenario.

El Oficialismo y su periferia actoral contra todos.




Publicado por Laura Etcharren

LOS MUERTOS


OPOSICION
MUERTOS SIN ACCION

Hace 27 años que volvimos a la democracia, realmente en algunos aspectos avanzamos un montón, pero en otros volvimos al pasado.

Pero hablemos de, la famosa y esperada Oposición que se conformo a partir de junio cuando ganaron las elecciones. En todo ese tiempo, solo sacaron Una ley, por todos los proyectos restantes nunca se pusieron de acuerdo y cuando se acercaron, los compraron y lo más triste es que aceptaron. Tontos, tendrían que haberse unido para sacar las leyes mas importantes para la Nación y asegurado estas, peleen el año que viene por las candidaturas, pero en forma honesta y transparente y den una sensación al mundo de una verdadera democracia. No, todo al revés ¡ y ahora? Inútiles ambiciosos, antipueblo, ladrones y coimeros, que más se puede decir. “Trabajan” de martes a viernes, el resto del tiempo se pelean, están en campaña para ser reelegidos para ocupar casi los mismos cargos.
Dos indios muertos en Formosa, su Gobernador ordenó la represión creo que esto se llama “Crímenes de Lesa Humanidad” por la cual mil personas de las FFAA y FFSS hoy están presas en cárceles en donde el mal trato y la desconsideración de sus captores están acabando con sus vidas, pero.. Para los operadores asesinos y coimeros no hay mal que perdure cien años.

Sacamos 6.000 habitantes de la gendarmería para cuidar el cono urbano bonaerense, debieran cuidar nuestras fronteras, mientras su gobernador el inmutable Scioli hoy pasea por el mundo e Israel.

Nunca escuche a ningún miembro del Senado hablar de la seguridad, la droga, la educación, el hambre y la salud, etc. La Corte Suprema, silencio de radio, los Jueces y Fiscales NO existen salvo algunas excepciones.
Hablar de Aerolíneas Argentinas y su pérdida, falta de conducción, robos, camarillas y cancelación de vuelos es inútil. Todo esto no tiene fin. Las ideas como formar L.A.D.E Norte, oídos sordos, es un proyecto a futuro.
Nuestros aviones paralizados y el éxodo de pilotos ya supera la lógica. Nos vamos hundiendo de a poco. No sentí a ningún camarada quejarse públicamente. Creo, los supera la pérdida de sus sueldos o lo que debiera ser.

SEÑOR, NUESTRO DIOS, CUANDO VOLÁBAMOS NOS DABA LA SENSACION DE ESTAR MAS DERCA DE TI, HOY EN TIERRA, PERDIMOS LA SENSASION DEL CIELO. A JORGE KELLY, PERIODISTA DE CANAL C CORDOBA, MUCHAS GRACIAS.
A. J SESIN

ESTAFADORES




Los estafadores de la “industria local”.



Con cierto aire folklórico, una corriente emotiva se ha terminado convirtiendo en una cuasi ideología. Movimientos que se ufanan de su nacionalismo, de preservar las tradiciones y fortalecer la historia doméstica se han encargado de servir de plataforma a una de las mayores estafas de este tiempo.



Un grupo de pillos, de rufianes oportunistas, se abusan del sentido de pertenencia que cualquier territorio genera a su alrededor. Ellos han exacerbado el sentido de lo local para transformar esa visión en algo así como una escala de valores que les resulta más que funcional a sus intereses económicos.



Han logrado construir una fantasía con cierta verosimilitud que solo cabe en la mente de los incautos y desprevenidos. Es que se trata de una casta de aprovechadores profesionales que han convencido a propios y extraños de que proteger la industria local implica salvaguardar el bien común, que la política debe generar espacios para favorecer a los de adentro y evitar que los de afuera hagan de las suyas.



Se ocupan de promover normas que favorezcan el compre local, las industrias del lugar. Dicen que debemos cuidar todo lo de adentro, para despotricar contra lo foráneo, induciendo a simplificaciones que hacen que lo propio sea bueno, y lo de afuera sea malo. Solo buscan protección, privilegios, prebendas, favores públicos, que hagan que sus emprendimientos sean viables, que haga rentables segmentos que no lo son.



Han construido un razonamiento que parece sostenible. Quieren que la industria local florezca, para mantener los puestos de trabajo y la actividad económica del lugar se revitalice dando oportunidades a los de adentro. Suena romántico y convocante.



Pero lo que no aclaran es quienes pagarán esa “fiesta”, quienes sostendrán su circo inmoral. Pretenden protecciones porque son ineficientes, porque quieren desarrollar actividades que no pueden sobrevivir sin subsidios, sin privilegios, sin apoyo estatal, ventajas impositivas, o castigos vía barreras para los que vienen de afuera. Se trata, según ellos, de impedir que la competencia foránea, ingrese al mercado local, destruyendo la industria del lugar y provocando perdidas de empleo.



Aspiran a tener protección, ganar dinero sin tomar riesgos, que el Estado les garantice rentabilidad para hacer un negocio seguro, que no dependa de los vaivenes del mercado. Lo que no quieren es competir, desean un monopolio apoyado desde el Estado, y con una gran mística periférica que haga que la gente los avale, que la política los sostenga.



Tampoco hablan de las consecuencias de su pseudo ideología. Aspiran a que alguien los subsidie, que financie las ineficacias de su negocio, su aventura empresaria, socializando las perdidas y privatizando sus ganancias.



La sociedad se obliga a pagarles sus deficiencias, vía impuestos, endeudamiento o cualquier retorcido método que posibilite la transferencia desde el sector privado, de los que trabajan para ganarse su salario, de los que desempeñan su oficio, hacia los que parasitan desde las oficinas públicas imponiendo regulaciones o desde los sectores prebendarios, promoviendo ventajas que solo le resultan convenientes a ellos mismos.



Saben lo que hacen, se escudarán en la sensiblería de los puestos de trabajo, de favorecer lo propio, y de ayudar al crecimiento local. Todos argumentos que apuntan al corazón, a la emotividad, pero pocas veces a la razón.



Para que sus empresas ineficientes sean viables, la sociedad toda deberá aportar la diferencia y hasta la ganancia. Esos recursos no pueden tener otro origen que cada individuo, que resignará su propio consumo, el que hubiera elegido en libertad, para destinar esos dineros al “estafador” y los supuestos ideales románticos que defiende.



Pero no se agota allí la historia, no se trata solo de las exenciones impositivas, los regimenes privilegiados, las subvenciones otorgadas, sino también del cúmulo de regulaciones que lo favorecerán para impedir que sus competidores ingresen al mercado. Todas esas reglas “hechas a medida”, evitarán que quienes pueden ofrecer un mejor producto, mas barato, en mejores condiciones, no lo consigan. Para ello, lobby mediante, el “protegido” empresario local, conseguirá que las normas castiguen económicamente a quienes insistan en ofrecer sus productos desde afuera. Le impondrá barreras arancelarias que impidan la competencia, restricciones formales que hagan que sus intentos no estén contemplados por las reglas domesticas. Todo tipo de escollo sirve al loable fin que intentarán defender con uñas y dientes.



Pero los consumidores locales tendrán que abonar un precio más alto por un servicio por el que optan acorralados por las reglas artificiales obtenidas bajo el amparo de la influencia del “afortunado”. Para abonar ese sobreprecio del proveedor local, los clientes del lugar tendrán que privarse de consumir otros bienes, reduciendo su capacidad de compra. El fin justifica los medios dirá la caterva de aduladores que rodea al privilegiado y sus “convenientes” aliados. Para ellos no tiene mucha importancia que el consumidor local pague mas, después de todo se trata de ayudar a los empresarios locales, fortalecer el mercado interno y preservar el empleo de los lugareños.



Lo que nuevamente no dirán es que el dinero que el consumidor local utilizó para pagar el sobreprecio de esta prebenda, solo puede explicarse al privarse del consumo de otro bien. Es en esa otra actividad, en ese otro sector, donde el cliente local no podrá poner voluntariamente su dinero y por lo tanto habrá hecho desaparecer sin intención a otra actividad, en este caso sin protección.



Los genuinos empresarios locales, esos que no gozan del calor del poder, serán los primeros perjudicados. Ellos y sus empleados, que son los que realmente perderán puestos de trabajo pero sin tanta trascendencia, de modo progresivo, casi en silencio.



Es que los “privilegiados de siempre” saben invertir su tiempo en hacer lobby, en traficar influencias, en convencer políticos y aportar argumentos al debate social, para ponerse a la gente de su lado.



Los verdaderos emprendedores, los que pelean cotidianamente en el mercado sin protección alguna, mas que la de prestar el mejor servicio, ofrecer el mejor producto, al precio mas bajo posible, con el menor margen que pueda darle viabilidad a su negocio y lidiando con los competidores a diario, ellos, no tendrán defensores en la lucha. Al contrario, pagarán el costo de este engendro, con menos empleos, con una inferior ganancia, en una verdadera competencia desleal, desde otros sectores de la economía.



En economía no se puede hacer magia, las soluciones las provee un marco normativo transparente, donde los empresarios toman riesgos, se dedican a hacer lo que saben hacer, y subsisten solo si son elegidos por sus clientes todos los días, con claros incentivos perdurables en el tiempo, esos que solo provee el mercado, para ofrecer el mejor producto, al menor precio, desde la óptica de quien lo consume.



Cuando las empresas, ya no toman riesgos, e invierten tiempo en recorrer pasillos de oficinas públicas, la ciudadanía toda habrá perdido, porque pagará la nueva parodia con sus propios ingresos, abonando en el mercado local precios irreales.



Si no entendemos que detrás de cada idea retorcida de estas que pretenden cuidar lo propio, existen mas problemas que soluciones, más daños que beneficios, y sobre todo perversos intereses parciales que solo desean alimentar sus propias ineficiencias frente a la incapacidad de superar a sus competidores, estaremos transitando un camino sin retorno, ese que nos proponen los estafadores de la industria local.





Alberto Medina Méndez

amedinamendez@gmail.com

CADA DÍA MÁS LOCA


Esto recién comienza. Era de prever. Cuando se pierde el poder político comienza el principio del final.



Esta noticia originará revuelos por lo que involucra. Acepto todas las interpretaciones y presunciones que surjan del análisis, para cotejar con mis propias opiniones.





¿Cristina está cada día más loca?



"Ya no me aguanto, amigo mío

Y me vuelvo cada día más loca,

Me voy volviendo cada día más loca,

Me vuelvo cada día, cada día más loca". Celeste Carballo





REVELAN DOCUMENTOS SECRETOS DEL DEPARTAMENTO DE ESTADO



EE.UU. pidió informes sobre la salud mental de Cristina





El País de Madrid publicó decenas de cables reservados de Washington provistos por el sitio Wikileaks. Adelantó que hoy dará más información sobre la Presidenta.



Como parte de lo que considera “la mayor filtración de la historia que revela secretos de la diplomacia de EEUU”, el diario El País de Madrid publicó ayer que el Departamento de Estado “solicitó información” sobre “el estado de salud mental” de Cristina Kirchner.



La noticia, que forma parte de una edición que el periódico consideró “histórica” por el volumen y la calidad de los datos que aporta, será ampliada hoy, en la nueva edición del diario, según anuncia la publicación española en su sitio web.



Como parte del paquete de revelaciones, también figura un cable de la embajada estadounidense en Buenos Aires de 1966 que revela la preocupación de la delegación diplomática por el plan argentino de “aumentar sustancialmente las aguas territoriales”, un plan que dejaría a las Islas Malvinas dentro de ellas. Esa legislación fue aprobada al día siguiente de que la Embajada envió el cable, con lo cual las Islas quedaron dentro del Mar Argentino.



Según surge de los 250.000 documentos a los que tuvo acceso el diario español –que fueron entregados por Wikileaks en conjunto además a New York Times (Estados Unidos), Der Spiegel (Alemania), The Guardian (Reino Unido) y Le Monde (Francia)– el Departamento de Estado efectuó areas de inteligencia desde sus representaciones diplomáticas en decenas de países del mundo, entre los que se encuentra Argentina, y más especialmente, a la Presidenta de la Nación.



El País destaca que los documentos de Wikileaks revelan el papel que juegan “las más íntimas facetas humanas en las relaciones políticas” e insiste en que eso es “particularmente evidente en América Latina”, donde se dan a conocer juicios de diplomáticos estadounidenses y de muchos de sus interlocutores sobre “el carácter, las aficiones y los pecados de las figuras más controvertidas”.



El periódico español revela también, tras analizar los documentos de Wikileaks, que la diplomacia estadounidense trabajó para que países de América latina aislaran al presidente venezolano Hugo Chávez. Allí habla de los ‘esfuerzos’ de la diplomacia de Estados Unidos “por cortejar a países de América Latina para aislar al venezolano Hugo Chávez”.



En total, según El País, el diario consiguió más de dos mil papeles y comunicaciones enviadas entre la Embajada estadounidense en Buenos Aires y Washington a partir de 1966 y hasta fecha reciente. Allí aparecen 22 archivos secretos, 1.547 documentos no clasificados y 664 confidenciales.

Los documentos fueron obtenidos por Wikileaks desde el sistema de comunicación por internet que usan 180 embajadas de Estados Unidos en el mundo y que está regido por protocolos del ejército norteamericano.



El Gobierno de Barack Obama se mostró ayer muy preocupado por la difusión de ese material y por las consecuencias que podría tener en la relación de Washington con los líderes y estados mencionados, entre los que también figuran Rusia, China, Italia, Irán, Turquía y Francia.



Los documentos del Departamento de Estado fueron facilitados por Wikileaks a varios medios, como El País, el diario británico The Guardian, el estadounidense The New York Times, el francés Le Monde y la revista alemana Der Spiegel.





“Si a las tres de la mañana el virrey no ha renunciado, lo arrojaremos por la ventana de la fortaleza”. Gral Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano 1810.

INTERVENCIONISMO


INTERVENCIONISMO: ¿IDEOLOGÍA O NEGOCIO?

Comprendo que la gente no relacione calidad institucional con crecimiento. Lo que no entiendo es que se haya perdido el concepto de decencia, algo que nuestras abuelas conocían sin haber hecho un posgrado.

Por Roberto Cachanosky

Considerando que el mundo está lleno de seres mortales con sus virtudes y defectos, y que los funcionarios públicos surgen de ese mundo de seres mortales, resulta difícil imaginar corrupción cero en cualquier país del mundo. Habrá naciones con más corrupción y otras con menos, pero difícilmente haya una corrupción cero por el simple hecho de que la misma existencia del Estado da lugar a un poder que detentan los gobernantes y funcionarios públicos que les permite disponer de los dineros ajenos.

Si aceptamos que es casi imposible llevar la corrupción a cero, al menos puede limitársela. Es decir, buscar esquemas de políticas públicas que disminuyan las posibilidades de corrupción. ¿Cómo puede lograrse ese objetivo?

Cuando uno observa, los casos de corrupción se deben fundamentalmente a dos razones: a) las regulaciones de todo tipo del Estado y b) el estatismo.

Cuando hablo de regulaciones no solo me refiero a los controles de precios o restricciones al ingreso de nuevos competidores al mercado, entre otras medidas, sino también a los subsidios de toda clase. Por ejemplo, es común escuchar denuncias sobre el uso político de los planes sociales que manejan algunos sectores del gobierno u organizaciones que se autodenominan “sociales”.

Mi punto es que a mayor intervención del Estado en la economía, más posibilidades de corrupción. Tomemos el caso de regulaciones que impiden el ingreso de nuevos competidores al mercado. El objetivo de ese tipo de regulaciones consiste en generar una renta extraordinaria en los sectores beneficiados que no obtendrían en condiciones de libre competencia. El funcionario que otorga ese beneficio puede cobrar una coima por otorgarlo y quien lo recibe puede pagarlo porque la renta extraordinaria se lo financia. Se produce así un mercado de tráfico de influencias en que el objetivo no es invertir para ser más competitivo y ganarse el favor del consumidor, sino que todo se centra en hacer el lobby necesario para obtener esa renta extraordinaria. El funcionario sabe que esa renta es un bien escaso y que su firma puede tener un precio, por lo tanto, “vende” ese beneficio gracias a que la sociedad toma como normal que el Estado intervenga en la economía para neutralizar los “efectos negativos” del “mercado salvaje”.

Otro ejemplo podrían ser los controles de precios. Cuando una empresa depende de que un funcionario público firme una autorización para incrementar los precios, su capacidad de subsistencia puede depender de la buena voluntad del funcionario, por lo tanto puede estar dispuesta a pagar para que el burócrata firme a cambio de un precio. En ese caso hay una extorsión del funcionario de turno.

Los escándalos de corrupción que han surgido en los últimos tiempos en las obras sociales sindicales no son otra cosa que el resultado de una fuerte intervención del Estado que, en nombre de la justicia social, le quita compulsivamente a los trabajadores parte de su ingreso para transferírselo a los dirigentes sindicales. No es que los trabajadores libremente eligen aportar a las obras sociales, sino que el Estado les quita por la fuerza parte de su ingreso para transferírselo a los sindicatos. Si no existiera ese “robo legalizado”, como lo denomina Bastiat, el trabajador podría elegir quién le presta el servicio médico, y si quien se lo presta no lo satisface podría cambiar de prestador. Es tal el monto que se mueve mediante este robo legalizado que la corrupción es inevitable bajo este sistema porque los sindicatos no tienen que ganarse la voluntad de los trabajadores sino que obtienen los recursos gracias al aparato de compulsión del Estado.

¿Quién no recuerda, si tiene edad suficiente, el suplicio que era conseguir un teléfono en la época de ENTEL? Tener un amigo que tuviera un amigo en ENTEL que consiguiera un teléfono era la forma de obtenerlo. ¿Quién no recuerda los techos de los edificios del microcentro repletos de cables de teléfonos que usaban las mesas de dinero? Esas líneas se conseguían comprándolas. Y el que las vendían se las quitaba a otros. Y los ejemplos podrían continuar, con las empresas estatales que compraban mucho más caro los insumos que el precio de mercado porque había un negocio cautivo.

En definitiva, a mayor intervención del Estado, más poder del funcionario público para decidir ganadores y perdedores dentro de la economía. Ese poder omnímodo de los burócratas y políticos, que va contra los principios de la democracia republicana, termina generando el tráfico de influencias al que hacía mención antes, porque, insisto, el costo de las coimas lo termina pagando el consumidor. El funcionario que coimea se beneficia y el que paga lo asume como parte del costo de producción gracias a los beneficios extraordinarios que le otorga el Estado le permite trasladar ese costo a precio.

Podemos catalogar a los dirigentes políticos, sindicales, economistas etc. que adscriben al intervencionismo y al estatismo bajo dos grandes categorías: a) los que están convencidos por ideología y b) los que ven un negocio personal en la intervención del Estado y lo promueven no por ideología sino por interés personal. En este caso, la intervención estatal se presenta como una ideología a favor de los pobres o de la soberanía nacional, pero en rigor esos argumentos son solo una pantalla para esconder el enriquecimiento personal que persiguen baja la máscara de defensores de los pobres y de la Nación.

A los que están convencidos por ideología y no los mueve la búsqueda de enriquecimiento personal les diría que no es un problema de personas sino de sistema, además de debatir técnicamente sobre la inconveniencia del intervencionismo y el estatismo. Pero para los que buscan un negocio personal no hay argumentos científicos que valgan, porque sería como tratar de convencer a Al Capone que no es bueno para la sociedad las actividades mafiosas. Su interés personal no pasa por el interés de la sociedad sino por maximizar sus ganancias personales utilizando cualquier mecanismo para obtenerlas. De manera que tratar de convencer a este grupo de personas no tiene ningún sentido.

Pero el problema de fondo es que una amplia mayoría de la población cree que el intervencionismo estatal la beneficiará y que el mercado libre la perjudicará, al tiempo se escandaliza con la corrupción y cree que el problema se resuelve reemplazando a un intervencionista corrupto por un intervencionista honesto. Para la inmensa mayoría de la sociedad la corrupción no es fruto de los poderes omnímodos que manejan los burócratas y políticos, sino que es un tema de personas. Y la realidad es que si en el medio de un océano de corrupción cae un intervencionista honesto, la mafia de la corrupción se lo come vivo. Y en el caso que se consiguiera un ejército de intervencionistas honestos que pusieran en retirada a los intervencionistas corruptos, igual tendríamos un serio problema de eficiencia económica. Tema que dejaré para otra nota.

Si uno mira la oferta electoral de hoy día en Argentina, salvo excepciones, se va a encontrar con que la oposición denuncia al gobierno de corrupto y sin respeto por la democracia republicana, pero no propone un cambio de sistema. El argumento se limita a decir: ellos son corruptos y autócratas, yo soy honesto y democrático. Una especie de kirchnerismo al revés. De ambos bandos parecen tirarse con el argumento de la honestidad y el respeto a las instituciones, pero, sinceramente, del lado de la oposición no veo, a grandes rasgos, propuestas de políticas públicas tan diferentes a lo que actualmente se hace. Solo se argumenta sacando la chapa de honesto.

La democracia republicana se construye limitando el poder del Estado. Sin un límite claro al monopolio de la fuerza que le delegamos al gobierno, no hay democracia republicana posible y sí muchas posibilidades de corrupción. Y como la corrupción necesita de la impunidad para subsistir, el paso siguiente es la destrucción de la república.

Pero tal vez sea el mismo mercado electoral, es decir las preferencias políticas de la gente, lo que hace que impere este tipo de sistema. Comprendo que no todo el mundo tiene que conocer la relación entre calidad institucional y progreso económico y personal. También comprendo que no todo el mundo tiene que entender porque son perjudiciales los controles de precios, las restricciones a la competencia, el despilfarro en subsidios, el estatismo, etc. Lo que me resulta más difícil de comprender es que hayamos llegado a un punto en que la gente no pueda comprender un concepto básico que es el de decencia o prefiera dejar de lado la decencia a cambio de un artificial y transitorio nivel de consumo. Digo, no pido que la gente entienda la relación entre instituciones y crecimiento, sino que valore la decencia, que es algo que nuestras abuelas lo comprendían sin haber hecho un MBA o un PHD. Ser decente es vivir del trabajo propio y no del ajeno. Ser decente no es pretender vivir de las dádivas del Estado. Ser decente es esforzarse para progresar sin pedirle al Estado que le robe a otro para que me lo de a mí. Ser decente es respetar al otro, es la buena educación en el trato. El saber que uno no debe robar, en forma directa o mediante el Estado gracias al lobby. Ser decente es no avasallarlo los derechos de los demás en nombre de la justicia social o de la soberanía nacional.

Esta orgía de creciente corrupción que vive el país, podría ser el resultado de haber perdido el concepto de decencia. Posiblemente, quienes ven el intervencionismo como un negocio personal y lo disfrazan de ideología a favor de los más desposeídos, aprovechan esa pérdida del concepto de decencia porque amplios sectores de la sociedad está dispuesto a cambiarlo por una fiesta de consumo transitorio o de vivir de la ilusión que una autócrata bueno nos evitará el trabajoso camino de construir el país con trabajo, inversiones y respeto por las instituciones, y cuando digo instituciones pongo el acento en el Estado limitado.

En definitiva, me parece que es imposible que tanta corrupción pueda sostenerse sin una sociedad que ya no se escandaliza por ella. Y si no se escandaliza, es porque se perdió el concepto de decencia. Y si se perdió el concepto de decencia, queda el campo listo para el negociado corrupto del intervencionismo.

Tal vez, si comprendemos que la existencia de un Estado limitado no es solo más eficiente para poder crecer, sino un imperativo moral, es que logremos el sueño de una Argentina diferente.

UN MES SIN TUERTO


UN MES SIN KIRCHNER, LA OPORTUNIDAD DE UN CAMBIO

Por Dr. Patricio E. Gazze (*)

Hace un mes, en plena jornada de Censo Nacional, fallecía el ex-presidente Néstor C. Kirchner. Su repentina e inesperada partida conmocionó fuertemente a la opinión pública y a la dirigencia política nacional. Encontrándose en dicho momento ejerciendo funciones como Secretario General de la Unión de Naciones Sudamericanas (UNASUR), la noticia también causó repercusiones a nivel internacional: evidencia de ello fue la concurrencia a su funeral de siete Presidentes de Sudamérica, de todos los colores y extracciones políticas.

Sin lugar a dudas, el ex-Presidente dejará una gran huella en la historia argentina como una de las figuras protagónicas de la década. Continuó con el cambio de modelo que había comenzado en el interregno de Duhalde, ayudó notablemente a reconstruir la autoridad institucional que había quedado fuertemente dañada luego de la estrepitosa caída del gobierno de De la Rúa, y promovió grandes cambios en todos los aspectos. En la economía favoreció un tipo de cambio competitivo, supo mantener una política de superavits de balanza comercial, llevó adelante una agresiva renegociación de la deuda externa y desoyó la tutela de organismos internacionales como el FMI. En lo institucional, forzó un recambio en la Corte Suprema de Justicia de la Nación (altamente cuestionada en ese entonces), promovió la reapertura de los juicios por delitos de violación a los derechos humanos a los integrantes de la Dictadura, y frenó el proceso privatizador, recuperando algunas empresas estatales como Correos Argentinos.

Pero más allá de los aspectos positivos y negativos (inflación, sospechas de adulteración de índices oficiales, etc.), el ex-Presidente construyó una nueva fuerza política con capacidad de gestión que continuó su Sra. esposa, la actual Presidente Cristina Fernandez. Por el peso de su figura, la "sombra" de Kirchner siempre estuvo presente en la forma que el público percibió la Administración de Cristina.

El gobierno de la primera mujer elegida como Presidente de nuestro país comenzó con una grave crisis desatada en virtud de un cambio en el régimen de derechos de exportación a los cereales (que implicaba una considerable elevación de las tasas), exacerbada por una pésima campaña de comunicación. Luego de quedar severamente debilitado su gobierno y dañada su imagen en la opinión pública, en lugar de replegarse, Cristina se embarcó una audaz agenda de gobierno que promovió cambios aún más radicales que los ocurridos en la presidencia de su marido. Así, se gestaron (y se aprobaron) la re-estatización del Sistema Previsional, la Ley de Medios Audiovisuales y la ley de Matrimonio Igualitario. Néstor Kirchner, lejos de mantener un perfil bajo, fue un gran combatiente en todas esas luchas y quizás el ideólogo e impulsor principal de las mismas.

Ese estilo combativo y confrontativo, posiblemente se forjó en los primeros años de su gestión, al encontrarse en una situación de debilidad política que requería de medidas extremas y golpes de efecto que lo ayuden a posicionarse. En efecto, Kirchner asumió la presidencia con el porcentaje más bajo de votos de la historia, pesaba tras de sí el "padrinazgo" de Eduardo Duhalde, y carecía base propia de legisladores y funcionarios. Estaba todo por construírse. El desastre de la crisis del campo, sumado a las grandes batallas libradas a posteriori, acentuaron aún más dicho estilo.

Como todas las situaciones límite que definen el carácter y la personalidad de los seres humanos, aquellos días en los cuales la necesidad requería una forma agresiva y una lógica dicotómica de construcción, dejaron una marca indeleble en su persona dificultando en gran medida un cambio hacia una posición más moderada.

Su muerte causó una gran conmoción, sin dudas. Al igual que con el paso a la eternidad del Ex-presidente Alfonsín, tanto la opinión pública como sus adversarios redimensionaron sus aspectos positivos y dejaron en segundo plano las críticas. El multitudinario funeral de Estado dió un claro ejemplo del resurgimiento de su imagen. El efecto positivo alcanzó a su viuda. De un magro 30% de imagen positiva, las últimas encuestas arrojan guarismos cercanos al 60%.

La muerte desde siempre ha configurado el gran enigma existencial de cada uno de los seres humanos. Consciente o inconscientemente nos pega en lo más profundo de nuestro ser. Y del mismo modo, la muerte de un regente, o de un miembro de la familia de un regente también lo hace. Este paradigma o arquetipo es tan profundo y tan arraigado en nuestra cultura que dificilmente podamos analizarlo en la totalidad de su complejidad.

La imagen o arquetipo de la viuda regente, está dotada de una gran fuerza y simbolismo. Evoca en primer lugar a la Diosa egipcia Isis, quien con amor y fidelidad lloraba a su difunto esposo Osiris, y velaba por su resurreción. De éste modo, la cuestión de la feminidad deja de percibirse como un factor y pasa a ser un elemento de fortaleza (en la medida que demuestre templanza, devoción y dulzura). No sólo dentro del paganismo encontramos símbolos que apoyan a Cristina. También dentro de la liturgia cristiana existen fuertes imágenes femeninas que dan cuenta de ésta situación.

La Virgen María, mujer signada por la tragedia de haber perdido a su propio Hijo, había sido fecundada por el mismo Dios, con lo cual su situación se asemeja en gran medida a la de una Viuda: era madre sin la presencia terrenal del padre. Latinoamérica y en especial nuestras clases populares rinden especial culto y devoción a la Virgen Dolorosa: quizás en el dolor de la Virgen nuestro pueblo se identifica el evocar las numerosas injusticias y pérdidas sufridas a lo largo de su historia. La devoción mariana por otra parte, quizás haya sido una manera de resignificar y adaptarse a la nueva forma de percepción de la trascendencia tomando elementos preexistentes. Los cultos pre-hispánicos que dedicaban especial importancia a la "Pachamama" o madre tierra primordial, posiblemente encontraron y transmutaron dicha fe en la fe y amor hacia la Virgen.

A éstos arquetipos, deben sumarse los sentimientos de empatía natural en cada ser humano. De ésta manera, la viudez de Cristina provocó algo que pocos días antes de la muerte de su marido era impensado: una especie de re-conexión en su carácter humano. Su tragedia personal logró renovar los vínculos entre ella y la gente, que en lugar de percibirla distante, hablando siempre el púlpito, aleccionando con su discurso e incluso con cierto grado de soberbia -como retando-, pudo verla en su dimensión más humana: también era mujer, madre, esposa, viuda.

En éste mes sin Kirchner, Cristina ha dado señales que parecieran indicar que tomó nota de ésta situación: los medios ya apuntan que aún habiendo tenido intensa actividad, no nombró al Grupo Clarín ni ha endilgado las duras críticas a los sectores que solía hacer. Fuera de lo discursivo, se decidió el regreso del FMI, se han dado señales de preocupación por el INDEC, se ha reabierto la exportación de maíz, y se ha avanzado para un acuerdo con el Club de París. También es importante un mínimo -pero real- distanciamiento con el ultra-cuestionado líder de la CGT, Hugo Moyano.

Que éstos indicios constituyan verdadero cambio de concepción en el modo de ejercicio del poder y no meras concesiones sólo dependerá del tiempo. Pero las condiciones para dicho cambio resultan óptimas, por cuanto -como hemos visto- la situación actual le ha otorgado a la Presidente una fuerza que le permitirá llevar adelante una modificación y una transición de un modelo confrontativo hacia un modelo de construcción basado en el consenso y en el diálogo.

(*) Crónica y Análisis publica el presente artículo del Dr. Patricio E. Gazze - Abogado - Profesor Sup. Universitario - Miembro CEIN 1816, por gentileza de su autor.

MENTIME QUE ME GUSTA




Por Malú Kikuchi (*)

“No quiero saber que has hecho [..]

Sólo endúlzame los oídos”.

Patricia Sosa (1)

La gran mayoría de la sociedad argentina le tiene terror a la verdad. Admitamos que las verdades argentinas no son fáciles de digerir y requieren para solucionarlas, un esfuerzo enorme y sostenido en el tiempo, algo que no parecemos dispuestos a encarar. Mientras tanto, “mentime que me gusta”.

La verdad suele ser implacable, cruel, ardua, difícil, o por o menos, sosa. Por su parte, las mentiras son creativas, piadosas, paliativas, y aunque estemos concientes de que son mentiras, las toleramos bien, casi las agradecemos, nos sentimos cómodos y abrigados; por lo tanto no pedimos explicaciones. Que deberíamos exigir.

Aceptamos el doble discurso como algo normal. Desde el gobierno el doble discurso ES normal. Lo sabemos, no hacemos nada al respecto, ni siquiera golpeamos las tapas de las cacerolas en señal de protesta. O somos rematadamente tontos y no nos damos cuenta, o pertenecemos a la cultura del “mentime que me gusta”.

El doble discurso es la discrepancia entre lo que se dice y lo que se hace. Sirve para engañar, esquivar, encubrir, despistar y siempre es mentiroso. Stuart Mill en 1853 escribía que: “El hombre es propenso al autoengaño, a esconder la basura bajo la alfombra”, y daba una serie de consejos para evitar las contradicciones entre el decir y el hacer.

Que sea una tendencia humana universal, no impide que los argentinos hallamos alcanzado la excelencia en tragar dobles discursos. Desde su creación el 27/12/45, el FMI ha sido una mala palabra en nuestro país. Recién aceptamos ser miembros el 6/10/1955, y todavía lo somos.

El FMI es un ente económico, burocrático, con más errores que aciertos, sobre todo en nuestro país. Pero no es el diablo, no quiere apropiarse de nuestras riquezas y simplemente tiene la desgracia de ser demasiado ortodoxo cuando debería ser más flexible, económicamente hablando, más allá que a todos los países no se les pueden aplicar las mismas soluciones.

Ni ángel salvador, ni demonio destructor, es sólo un excesivamente burocratizado ente internacional. Ente del que formamos parte, ya que seguimos siendo socios de ese club. En un momento de locura económica, Kirchner pagó nuestra deuda con el FMI al contado (teníamos 2 años más para pagar), o sea que pagó más de lo debido, casi US$ 10.000 millones, ¡pero nos declararnos independientes y soberanos de la tutela del FMI!

Ese fue el discurso. La realidad es otra. Con o sin deuda con el Fondo, al ser miembros del mismo, el FMI tiene la obligación de auditar las cuentas de los socios del club que lo componen. Argentina no permite que el FMI lo haga desde el 2006. ¿Por qué? ¿Tendremos algo que ocultar?

Además, Argentina forma parte de otro club muy selecto, el G20, donde se reúnen los países más desarrollados del planeta. Estamos en el G20 gracias a Menem. La presidente quiere seguir en el G20, y eso es bueno para el país. El problema es que Argentina ya no califica para pertenecer a esa elite y mantiene una larga deuda de casi US$8.000 millones con el Club de París.

Todos los países a los que les debemos pertenecen al G20. Mientras no arreglemos con el Club de París, Argentina sigue en default. Podemos pagar al contado, lo que sería un brillante negocio para los acreedores y un pésimo negocio para nosotros. Para poder pagar en cuotas, y que nos acepten el acuerdo, tiene que auditarnos el FMI, o si, o si. Y hemos jurado que eso no sucederá, ¡jamás!

Seguimos sumando. Teníamos un INDEC creíble. Medía un universo demasiado amplio (por ejemplo, castración de gatos y salmón ahumado, hechos y productos no tan corrientes), pero era un ente estatal serio, prestigioso y veraz. Argentina tenía parámetros reales para manejarse a nivel económico; los índices no mentían, hasta el 2006. Aterrizó Moreno y se hundió la credibilidad del INDEC. Desde entonces, el INDEC, miente.

Los índices pasaron a ser dibujos inverosímiles hasta para un escolar, la inflación desapareció bajo números groseramente mentirosos, los parámetros se esfumaron y nadie supo a qué atenerse. Echaron técnicos idóneos y se los reemplazó por empleados obedientes.

Todo ese descalabro, ¿para qué? Porque con una inflación mínima y mentirosa, el gobierno se evita pagar los bonos ajustados por la misma a su precio real. Una estafa implementada por el gobierno, que perjudica a los tenedores de bonos argentinos. El discurso oficial dice otra cosa. Miente.

De pronto, después de haber jurado que el FMI no pisaría suelo argentino, que nunca auditaría nuestras cuentas, ni se metería en nuestra economía, el gobierno llamó al FMI … para que nos ayude a enderezar el INDEC. Argentina tiene especialistas reconocidos internacionalmente, capaces de volver el INDEC a lo que fue, un ente creíble. Primero hay que echar a Moreno y su patota. Lo demás es simple, hay que volver al 2006.

Hay expertos de universidades argentinas a los que el ministro Boudou no escucha, y que son aptos para hacerse cargo del tema. Argentina no necesita del FMI por el INDEC. El gobierno llama al FMI para que nos solucione el tema con el Club de París. La mentira es tan infantil, que resulta ofensiva. Pero la aceptamos.

Artículo IV. Dice John Lipsky, 2º del FMI, “Argentina como miembro del G20, tiene la obligación de aceptar auditorías pactadas cada 5 años”. Es cierto. Todo lo demás son cuentos chinos, mejor dicho, cuentos argentinos.

¿Es tan difícil decir la verdad? El gobierno está convencido que la mayoría de los argentinos no estamos capacitados para aceptar la verdad. Puede que estén lo cierto. Nos han mentido tanto y desde hace tanto tiempo, nuestras ideas han sido tan manipuladas, que quizás ya no pensemos. Desventajas del nacionalismo barato, que le sale carísimo a la sociedad, y de la demagogia populista, que goza de buena prensa.

La cruda verdad es que la presidente quiere seguir formando parte del G20, para eso tiene que pagarle al Club de París, para pagarle al Club de París, el FMI tiene que dar el visto bueno, para eso tenemos que transparentar el INDEC. Todo esto es positivo. Tenemos que integrarnos al mundo y estando en default es imposible.

Tan imposible como pretender que los miembros de este gobierno que hemos sabido conseguir, nos digan con la verdad. Verdad que no exigimos y que deberíamos exigir. Mientras tanto, dale que va, “mentime que me gusta”.

1 - "Endúlzame los oídos” de Patricia Sosa.

(*) Crónica y Análisis publica el presente artículo de Malú Kikuchi por gentileza de su autora.