KE KARAJO DEFIENDEN ????

Política y Desarrollo - 31-Oct-08http://www.politica ydesarrollo. com.ar/nota_ completa. php?id=7192 ¿Qué derechos defiende Libertino? ¿Cuáles los Kirchner? ¿Qué orgullo? Por Juan Carlos Sánchez ¡Y no niegue que tiene ganas de pegar un par de buenas patadas enalgún trasero de esos con más empujones “que Ford de húngaro…” Que cada uno haga de su culo un pito pero que no vengan con eso de “orgullo”, “discriminació n” o “derechos humanos”. Las cosas por su nombre. Los que son trolos o putas que se diviertan sin jodernos. Ya que estamos en democracia que respeten las mayorías más aún si son normales creacionalmente hablando. En una de esas tienen razón y es más entretenido y satisfactorio hacerlo unos con unos y unas con unas o entre todos o todas (puesto así para que no se enoje la PresidentA que es PresidentE o como sea). Es cosa de ellos, pero si somos los miles de millones que somos en el mundo y fueron muchísimos miles de millones más desde la primera pareja humana es porque ¡A Dios Gracias! a la gran mayoría de los varones nos encantaron y encantan las mujeres y a las mujeres les encantaron y encantan los hombres. Es lo natural, de lo contrario el nacimiento no sería parto sino deposición. ¿Me explico? Todo esto que precede es para fundamentar por que me siento discriminado por una taradita que surfea en la cima de la ola y que invita (lea el afiche) a la marcha orgullos de los culorotos. Y lo hace en nombre y representació n de un instituto de la República dependiente de la PresidenciA de la Nación. ¡Qué lindo! Tan propio como un peronista de Guevara, un católico abortista o un pingüino en la Rosada… Mamarracho. Y no crea que escribo caliente y por eso uso y abuso de palabras de mal gusto un tanto impropias para un periodista supuestamente serio. Es simplemente porque me pongo a tono con estos anormales y soy intencionalmente grosero. Como ellos. ¿Cómo no serlo? ¿De qué otra manera hablar para que entiendan? Repito: Que cada uno haga lo que quiera con su trasero o sus partes íntimas pero que no quieran cambiarnos la naturaleza. Como humanos que somos los vamos a respetar a sabiendas de que son lamentables anormalidades, los contendremos si lo requieren, son personas; es más, ni siquiera intentaremos obligarlos a ser normales si no quieren, entonces… ¡Que hagan lo mismo con nosotros y respetándonos también, no publiciten un “orgullo” que no es tal! Orgullo es ser como se debe ser o al menos como se puede ser, no todo lo contrario. Y hay más, que es lo que me preocupa sobremanera. Nuestros pibes. Esos a quienes tenemos que transmitirle valores para que construyan una sociedad mejor y que verán por TV y en tapa de los diarios como desde el gobierno nacional y desde algunas instituciones populares se aprueba, promueve y aplaude esta barbarie, esta anormalidad. A medida que crezcan y al instalarse en ellos el concepto de la liviandad moral, de la caducidad de la familia tal cual debe ser -porque así fue siempre y seguirá siéndolo pese a los Libertino, los Kirchner y otros de su ralea- y del circo político como programa de gobierno, descreerán de todo, serán banales, superficiales y aburridos, recurrirán a los extremos buscando nuevas experiencias, consumirán alcohol y drogas para embellecer un mundo insatisfactorio y finalmente perecerán en la ineficacia y la intrascendencia. Mal futuro cimientan para nuestra sociedad estos gobernantes que tenemos. Admitámoslo de una buena vez: Nos están masacrando. ¿Nos quedaremos quietos? Lo advertí desde estas notas hace tiempo. A medida que termine el ciclo de los Kirchner, al momento en que se derrumbe el edificio de mentiras y absurdos que fue su degradante gobierno, endurecerán la mano. Necesitan ganar tiempo, distraernos de la catástrofe a la que nos llevaron. ¡Corruptos, ineficientes! No los merecemos ¿o sí? Lo digo por eso de que “el pueblo tiene el gobierno que se merece…” Y parece que merecemos la inflación, los conflictos permanentes, ser leprosos en el mundo, la inseguridad, la historia sesgada, la división de la sociedad y que además hagan de estos pobres anormales los paradigmas de la nueva Argentina. E-mail del autor zschez@yahoo. com.ar__._,_.___