Por la Dra. Norma S. D´Addato Regner
Ese que ves todos los días en la esquina, el que patea tu calle, ese que cuando pasa a tu lado te sonríe y hasta tu nombre se acuerda. Siiiii, ese que el otro día te dijo ¿Cómo le va Fernández? ¿está mejor su señora? ¿paso de grado la nena?
Ese que paro el patrullero cuando vio que estabas por guardar el auto en el garage la semana pasada, esa noche que volvieron a la madrugada y les hizo el aguante hasta que estuvieran seguros dentro de la casa.-
¿Te acordás ese que la otra vez intervino en el allanamiento en la casa de esos delincuentes peligrosos que venían pegándole duro al barrio? Siiii, ese mismo, el que saco al chorro que se había escondido debajo de la cama.-
Ese que cuando quisieron robar el banco de la avenida intervino como mediador y convenció a los ladrones que desistieran del atraco entregando sanos y salvos a los rehenes.-
El mismo que le pegaron un tiro en la pierna en un enfrentamiento con malvivientes y a los pocos días andaba rengo haciendo el rondín.-
Ese tipo que salía corriendo de la seccional para ir al banco a ganarse unas extras con las horas CORES porque con el sueldito que le pagaban por arriesgar su vida al proteger las nuestras y nuestros bienes no le alcanzaba para mantener a su familia ¿te acordás que no tenía días libres y nunca pudo dormir una noche de corrido excepto cuando se tomaba vacaciones? El problema era que con las vacaciones se le cortaban las horas CORES, y chau extra a fin de mes.-
Ese, el de las 24 por 48 que tuvo que quedarse un día 14 horas vigilando un patrullero con un menor adentro porque el trajeado juez de menores no había decidido donde enviarlo ya que los padres no lo querían de vuelta en la casa.-
El que todos los meses esta deteniendo a alguno que debería estar preso pero los “garanticidas” de siempre los dejan en la calle, si, si, el que metió preso al negro Balbue y que el juez dejo en la calle tres días después. El mismo juez que dejo en libertad al que mato a don Eulogio.-
Me acuerdo la bronca que tenía cuando el juez de menores dejo en la calle al mocosito de los Peral después de su segundo homicidio porque entendía que el nene debía estar con los padres. Y no hubo forma que el juez entendiera que eran los Peral los que mandaban al pibe a robar para mantener a la familia.-
¡Que alegría cuando lo ascendieron a comisario y que tristeza que nos dio dejarlo de ver tan seguido en nuestra calle! Pero quedo otro buen tipo al frente de la cuadrícula.-
¡Las chinches que se agarraba cuando los chalecos antibalas que mandaba el ministerio no alcanzaban para todos los efectivos y estaban vencidos! ¡Ni hablar cuando iban del foro a pedirle que el patrullero pasara más seguido por la cuadra y resulta que no le alcanzaba el combustible para girar todo el día! ¿y cuando se rompía un patrullero y no lo podían arreglar porque nadie se hacía cargo de los gastos? Se pasaban la pelota entre la municipalidad y el ministerio. Y empezaban por un patrullero roto, y seguía el segundo y el tercero, y así hasta tener menos de la mitad de los patrulleros en condiciones de circular. Pero pese a todo eso, te atendía con una sonrisa y te decía “nos arreglamos bien con lo que tenemos, estaríamos mejor si tuviéramos más efectivos y mejores patrulleros, pero bueno, ya nos van a mandar los móviles nuevos que el ministro nos prometió el año pasado”.-
Aquél que fue el partero en el nacimiento de la hija de los Gonza, familia que no tenía mutual ni prepaga, y vivían donde la ambulancia nunca llega.-
Si, también fue el que se engrano por el sobreprecio de las armas que iban a comprarse sobrevaluadas. Hablamos del mismo tipo, si, si.-
Ese, sí, ese tipo cascoteado por los delincuentes es el que quiero a cargo del Ministerio de Seguridad. Los que siempre usaron traje y corbata y trabajaron tras un escritorio, que no conocen la calle, que no estuvieron en la trinchera batiéndose con los delincuentes, esos no están a la altura que las circunstancias requieren Les sobra apresto y les falta calle, y para administrar bien el ministerio se requiere más calle que apresto ¿o me equivoco? ¿y vos? ¿estás de acuerdo conmigo? ¿Qué clase de ministro de seguridad querés?
Los apellidos son inventados, y los hechos narrados son algunos de los que viven los efectivos policiales con frecuencia.-
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