SIMULAR UN SUICIDIO

Nisman: Charla con un instructor de “escuelas de agentes” que enseña como simular un suicidio por Alesia Miguens • febrero 17, 2015 • Transcribo parte de una charla con un experto en balística, criminalística e inteligencia sobre “Cómo eliminar a una persona y que parezca un suicidio”. LOGÍSTICA Cualquier operación que vaya a realizar un profesional requiere de una preparación minuciosa, y parte fundamental es conocer perfectamente al objetivo. Ningún profesional actúa de un día para el otro; preparar una operación lleva su tiempo, sobre todo si se quiere tener éxito en eliminar a un objetivo y que se determine que fue un suicidio. La eliminación simple es muy fácil: con tener la oportunidad y el lugar basta, ya que no importa cómo se caratule ni lo que digan. Pero la eliminación de un objetivo como “suicidio” requiere preparación. PREPARACIÓN Es imprescindible conocer la mayor cantidad de datos del objetivos. Nombres y apellidos, apodos, estado civil, domicilio, personas con las que convive, personal de servicio, días y horarios de trabajo, lugares donde realizan las compras diarias, movimientos frecuentes, recorridos, trabajo, gimnasio, confitería, restorán, gustos personales, comida, bebidas, etc., lugar de culto, club, automóvil del objetivo, de sus familiares, y amantes, si los tiene; si tiene mascotas, cuáles; si tiene perro, si está entrenado, etc. Saber si el objetivo está armado, si practica artes marciales, y si cuenta con custodia armada, quiénes son, su motivación, puntos débiles, días, horarios, lo máximo que se pueda saber y, por supuesto, dónde están apostados. Es indispensable conocer dónde vive, si es una casa, una quinta, departamento, un piso, si se trata de un edificio, es más simple. Siempre se debe conseguir un plano del lugar y saber qué parte de la vivienda ocupa. La seguridad del lugar es un punto esencial. Hay que estudiar minuciosamente con qué seguridad cuenta la vivienda. Cámaras de entrada, de servicio, ascensores, escaleras, en el interior de la vivienda, vecinales, si gravan, cuántas horas o días registran, etc. Si tiene alarmas sonoras, silenciosas o ambas, y a dónde comunican. Si las ventanas tienen rejas simples, electrificadas, con sensores o alarmas, etc. También es importante saber sobre su salud. En muchos casos esto es muy útil a la hora de una operación de este tipo. Quiénes son sus médicos, si padece o padeció alguna enfermedad, operación, si realiza algún tratamiento, si concurre a un psicólogo o psiquiatra, qué medicamentos toma y dónde los compra. Si es adicto al consumo de alguna droga, sea licita o ilícita, cuáles son y proveedores. Esto también de la familia, amigos y eventuales amantes, ya sea que vivan o no juntos. Se deben intervenir todos sus sistemas de comunicaciones. Teléfonos del domicilio, oficina, celulares, si dispone de radio de largo alcance o cualquier dispositivo que pueda intervenirse, debe intervenirse. OPERACIÓN El arma para estos operativos debe ser una pistola calibre 22. Es un pequeño calibre pero tan mortal como una 45 o una 9 mm; fácil de conseguir, relativamente barata, y no levanta sospechas. El proyectil produce grandes destrozos y generalmente se deforma, y si choca contra huesos se deforma o rompe totalmente dificultando o impidiendo su estudio por balística. Lo conveniente es que haya sido fabricada en el país donde se va a eliminar al objetivo, y que tengan la posibilidad de insertar en la boca del cañón un silenciador. Hay una gran variedad de municiones, desde la común para práctica, las de alta velocidad, punta hueca, trazadoras, expansivas, subsónicas punta hueca y otras de uso especial para competencias de tiro. En estas operaciones se debe usar la munición subsónica o no se hace el trabajo. Estos proyectiles tienen una velocidad menor a los 300 m/s y no producen el estampido sónico como las otras al romper la berrera del sonido. En el caso de que el objetivo tenga armas, siempre es mejor usar una de su propiedad. Pero es casi seguro que no tenga silenciador o que no se adapte al que se lleva. En ese caso deberá dejarse el arma que se utiliza previa implantación de las huellas digitales del objetivo. El uso del silenciador está condicionado al lugar donde se realice el operativo. Si es un condominio con muchos vecinos, el silenciador es imprescindible, y hay que cerrar todo bien (ventanas, etc.) porque jamás se anula totalmente el estampido. Se acepta que el silenciador amortigüe de un 40 a 60%; para el 22 resultan bastante efectivos, a 20 m se identifica como un estampido sordo. Pero el procedimiento con silenciador tiene el inconveniente de retener un gran porcentaje de carbón de pólvora quemada por lo que no deja rastros en la mano del objetivo. Para evitar este indeseable y revelador detalle, y que aparezcan restos de pólvora en la mano del objetivo, se realiza un segundo disparo dentro de un bolso con ropa, con el brazo del suicida en su interior. El proyectil y el casquillo del segundo disparo quedan dentro del bolso, y la pólvora en la mano del objetivo para que sea encontrada en los estudios forenses. Para no dejar huellas digitales se pueden usar guantes o un film de polietileno pegado en las yemas de los dedos, es muy efectivo. Y si se tiene tiempo, limpiar lo que se tocó. En caso de haberse herido y sangrado, hay que usar hidróxido de sodio para destruir el ADN. Como los huesos son un problema para el 22, no se debe disparar a la cabeza. El método de los suicidas de dispararse en la sien es una tontería con este calibre; el 30% no muere, el proyectil cambia de trayectoria y no daña el cerebro. Para que un disparo con 22 en la sien sea efectivo, el arma debe estar perfectamente perpendicular al cráneo para que el proyectil no se desvíe. Esto cualquier objetivo que conozca de armas lo sabe, por esto ninguno se “suicidaría” con una 22, y en el supuesto de que el “suicida” conocedor en armas estuviera tan desesperado como para hacerlo con una 22, tendría especial atención en este detalle, y eso es algo que los forenses saben. Por eso, en un operativo de estas características, conociendo de armas el objetivo, lo profesional y efectivo, es un “suicidio” en la boca en forma ascendente como lo “hizo” Yabrán; tiene un 97% de seguridad. Y cuidar de apoyar el arma; los suicidas no se matan sin apoyar el arma. Se debe tener mucho cuidado con otras lesiones que pondrían en duda el suicidio. Sólo puede haber un disparo y un golpe, ya que es natural que se golpee al caer. Pero se debe prever con qué impactará y calcular del lado que impactará al caer; no puede tener el golpe de caída a la derecha y estar apoyando la cabeza en el suelo del lado izquierdo. Es muy importante cómo se dejará el cuerpo y también hay que calcular cómo caería el arma y la sangre, ya que esto determina fácilmente en qué posición estaba cuando recibió el impacto. Con un calibre mayor al 22 nunca se dispara a un objetivo de este tipo en el suelo. El proyectil puede atravesar el cráneo e impactar en el piso y sería difícil de explicar. En ese caso conviene tenerlo parado o acostado en su dormitorio; se lo coloca en la cama y cómo quede al final no importa, pero en este caso es importante evitar golpearlo, ya que no se puede justificar. Con una 22 se lo puede eliminar en el suelo o “de rodillas”. Pero siempre calculando la trayectoria del proyectil, y si el impacto atraviesa el cráneo, la dispersión de sangre. Se debe tener mucho cuidado con la sangre en el piso y la que salga como gotas por el disparo, ya que éstas también indican la posición en que se encontraba el cuerpo al recibir el proyectil. Ahora bien: “Mi experiencia me lleva a la conclusión de poder afirmar que el Dr. Nisman fue asesinado. Y aunque en la preparación de la operación pueda haber intervenido una conexión iraní-boliviano-venezolana, el ejecutor del operativo fue muy probablemente alguien perteneciente a servicios de inteligencia argentinos. Y puedo afirmar que es un completo improvisado, un inútil, por no decir un perfecto idiota. La ejecución de Nisman es tan evidente que resultaría incuestionable hasta para estudiantes de primer semestre”. Con respecto a la investigación, también habría varias preguntas por demás alarmantes que surgirían si a los investigadores les preocupara o si estuvieran a la altura de una investigación de este tipo. – Primero, Nisman conocía de armas, por lo cual un suicidio con una 22 en la sien, parietal para peor en este caso y sin haber apoyado el arma, es 100% improbable, máxime siendo el arma de un amigo y sabiendo perfectamente cuánto podría comprometerlo. – ¿Por qué el Fiscal teniendo custodia le pide con urgencia el arma prestada a su amigo; qué pasó para querer un arma con tanta premura? Descartemos que la quisiera para protección de sus hijas. Toda su familia estaba en Europa. Es significativo que Lagomarsino manifestara que las fotos del arma que aparecieron no son de su pistola. Se desconoce por completo la información sobre las municiones. Nadie escuchó el disparo, otro indicio de que se usó silenciador. Pero Nisman no tenía y su amigo tampoco, por lo que el asesino debió estar preparado con proyectiles subsónicos, y en ese caso los casquillos son distintos. – ¿Dónde está el casquillo? La falta de detonación audible es clave. La ausencia de restos en la mano de Nisman también, como también el hecho de que no se encontraran otras huellas en el arma, y que no se apoyara el arma en la cabeza, por lo cual no se encontraron restos de masa encefálica. Y ya con esto tendríamos suficiente. Pero hay otras cuestiones importantes: – ¿Cómo el Secretario de Seguridad Berni aparece en el domicilio del fiscal, y por horas, no sabemos cuántas en realidad, permanece en el interior del departamento, sin dejar entrar a persona alguna ni a los servicios del SAME? Para salir a declarar: “No hay ninguna duda de que fue un suicidio”. Pero como aparecen inconsistencias indeseadas, debe girar en el aire 180 grados y rectificarse. ¿Un médico con amplia experiencia como la suya puede cometer tamaña equivocación, o habla a las claras de que trató de implantar la idea del suicidio? ¿Se sabe en qué lugar y posición aparecieron el cuerpo y el arma, exactamente? Algo no menor es la enorme cantidad de sangre que había junto al cadáver, que surgiere preguntas inquietantes: – ¿Por qué sangro tanto Nisman? ¿Cuántas horas estuvo moribundo? – ¿Por qué no dejaron entrar a los médicos del SAME? ¿Para evitar que lo salvaran? – ¿Cual es la explicación de cómo y por dónde salió semejante cantidad de sangre si el proyectil quedó alojado en el cerebro sin orificio de salida? ¿Se calculó cuántas horas agonizó para perder esa cantidad de sangre, teniendo en cuenta que los cuerpos sin vida no sangran, con la muerte la presión sanguínea desaparece y con eso el sangrado del cuerpo termina? Con esto en mente, ¿se pidió información de dónde estaban ciertas personas en el momento que se debería calcular; no el de la muerte, sino el del disparo? Los evidentes improvisados a cargo de esta desastrosa operación estuvieron horas esperando que Nisman muriera sin siquiera haber preparado en ese tiempo un escenario alternativo, y al “filtrarse” la información de que pasaba algo en la dirección del fiscal, se enredaron las patas al punto de dejar evidencia de su culpabilidad frente a las cámaras, sacando valijas. https://www.youtube.com/watch?v=spVb6kJQgp4 – ¿Qué documentos había en las valijas que sacaron del departamento de Nisman? No hay dudas de que eran altamente comprometedores y muy peligrosos para el gobierno, y que fue de imperativo categórico hacerlos desaparecer, inclusive frente a las cámaras de televisión que lo registraron. El edificio en el que vivía Nisman tenía todos los accesos controlados por personal de seguridad, cámaras y sensores, además de los custodios del fiscal, lo que hacía casi imposible entrar sin dejar rastros al menos electrónicos, en cámaras y sensores. ¿Qué enseñan los manuales en estos casos? Dos cosas: – Desactivar la vigilancia de los servicios de seguridad personal y del lugar, por cualquier medio. – Y anular electrónicamente los aparatos o desconectarlos. Dejando zona liberada. Y así sucedió. – El titular de la empresa de seguridad de Le Parc, el Sr. Serra, tiene largas vinculaciones con el gobierno kirchnerista. Y el responsable de la seguridad del edificio, el Sr. Toro, conocido amigo de Berni, declaró que las cámaras no estaban operativas desde hacía seis meses a un año. En este caso, Serra y Toro facilitaron el trabajo constituyéndose en cómplices, razón por la cual su conocido/amigo Berni también. Y la única explicación para que esto sucediera, en un lugar como ése, de máxima seguridad, es que las cámaras habían sido anuladas para evitar el registro de la entrada y salida de algunas personas, “no sólo ese día”, sino -como ellos mismos admiten-, desde que comenzó la preparación del operativo. En otras palabras, ya se tenía preparado el terreno para un posible atentado contra Nisman. Pero evidentemente ‘algo’ los tomó por sorpresa, y ‘alguien’ se enfureció y entró en pánico. Nisman también dijo que la SIDE lo vigilaba y que tenían todos los datos y movimientos suyos y de su familia. Primer paso en la preparación de una operación. E increíblemente, la presidenta en persona se incrimina admitiendo que lo venían vigilando, al acusarlo públicamente de haber dejado a su hija sola en el aeropuerto por más de tres horas. Las cámaras del aeropuerto, con el registro de su llegada que otra vez “se filtraron”, también confirman su seguimiento. El fiscal también manifestó que había sido amenazado telefónicamente en varias ocasiones. Pero veamos esto: Por regla general, los “servicios serios” de Europa, Rusia, EE.UU., no avisan a su objetivo, no amenazan. Pero hay diferentes estilos. A los países árabes y latinoamericanos les gusta amenazar, les encanta, aunque eso a priori signifique una desventaja; cuentan con la ineficiencia de los servicios de seguridad; la incompetencia de la justicia (que nada hace frente a tales amenazas, ni frente a la explicita instigación y apología de delitos, del odio y la violencia), la negligencia de los políticos y la indiferencia de la sociedad. Y como el tiempo pasa y no pasa nada, el objetivo se va acostumbrando, le resta importancia y se relaja, descuidando las precauciones que debe tomar. – ¿Qué motivos tenía el fiscal para “suicidase”? Ninguno. Esto pesa, y mucho, en una investigación. ¿Nisman fue a TN con tamaña contundencia porque “temía” algo más que ser apartado de la causa? Lo que desesperó al gobierno fue la sorpresiva presentación de Nisman en TN apenas llegar. La contundencia y firmeza de sus acusaciones. ¿Algo explosivo que habría conseguido, y debían hacer desaparecer a “cualquier” precio? El “encubrimiento de un ataque terrorista”, en sí, es algo gravísimo. http://youtu.be/xcCYLwTtfcw Pero si petróleo y granos hubieran sido una excusa y la razón de fondo dinero, armas, terroristas, y un “intercambio de material y tecnología nuclear”, muchísimo más, ¿verdad? https://www.youtube.com/watch?v=GdfGWCd0R4o – La notebook prendida que encuentra la madre indica que alguien había estado buscando en sus archivos. – La madre también tuvo que abrir una de las cerraduras con su llave y nunca quedó claro dónde quedó la de Nisman. – ¿El fiscal pudo haberle abierto la puerta de servicio a “una mujer” y así haber entrado el resto del operativo? http://www.eluniversal.com/internacional/150216/hallan-un-cuerpo-calcinado-frente-a-lugar-donde-murio-fiscal-nisman – ¿Por qué apareció en ropa interior, y en el baño? El Fiscal Nisman debía tener en su poder pruebas que eran muy peligrosas para los acusados. Tanto como para “obligarlos a una acción desesperada activando el operativo de inmediato” para silenciar al objetivo y sacar del domicilio documentos contundentes, que resultarían irrefutablemente comprometedores; arriesgándose inclusive al inevitable y consecuente escándalo nacional e internacional, sin tener tampoco la seguridad de que no habría duplicados. Y además, digamos la verdad: al menos para esta tarea, la fiscal Fein es absolutamente incompetente, y es obvio para cualquiera que de esto entienda un poco que “oculta pruebas y miente”. En fin… todo esto es un absoluto disparate. Ni políticos, ni periodistas, ni peritos, ni la justicia tiene siquiera sentido común. Y si no fuera tan grave y tan dramático, de patético perecería una película de los tres chiflados. Argentina es un hazmerreír planetario. FIN DE LA CHARLA Y mientras todo esto pasa, o no pasa, la cada vez más psicópata perversa narcisista, desquiciada ladrona y asesina, como una hiena a carcajadas, devora los desperdicios en los que convirtió a la Argentina, presentándose ante sus pestilentes orcos vomitando un final “muy significativo”: “¡Nosotros nos quedamos con la alegría! Y a ellos, a ellos les dejamos el silencio”. https://www.youtube.com/watch?v=iRsLO1MaJ0U El que quiera oír que oiga de una vez: “Nosotros nos quedamos con la alegría, que hasta nos hace cantar… de haber podido lograr… a él… silenciar”. Clarito, ¿no? La cuestión ahora sería explicar cómo una simple mujer que escribe desde su casa tiene acceso a esta clase de información y la justicia, los peritos, los políticos y el periodismo, parece que no. También deberíamos explicarnos cómo toleramos que se llame a declarar a la mucama, el quiosquero y el cerrajero, y no a D’Elía, Larroque, Esteche, Yussuf, Timerman, etc., y Berni, les guste o no. Y a pesar de que parece ser “la era de los fiscales”, únicos que tratan de salvarnos hasta con sus propias vidas, en lo personal iré a La Marcha de los Fiscales, caigan rayos y centellas, para preguntar a todos, jueces, políticos y periodistas: ¿Por qué los acusados por Nisman, D’Elía, Esteche, Larroque, Yussuf, etc., y Berni no fueron llamados a declarar cuando de mínima deberían estar en preventiva incomunicados y a disposición de la justicia? ¿Por qué permiten que la fiscal Fein oculte y mienta? ¿Por qué las pruebas que Nisman iba a presentar al Congreso no se han dado a conocer, dónde están, quién las tiene, quién las cuida? ¿Por qué nadie habla, ni se buscan las valijas que sacaron del departamento de Nisman? https://www.youtube.com/watch?v=spVb6kJQgp4 Quiero saber lo que Nisman iba a decir en el Congreso y oír esas escuchas. Y quiero que, de una vez por todas, todos dejen los shortcitos, se pongan los malditos pantalones largos, y de una vez y para siempre en este país se imponga justicia. Quiero que esta demente asesina mal parida, esta “inconmensurable” desgracia y vergüenza histórica que padecemos los argentinos bien nacidos, ¡VAYA PRESA Y SE LE CONFISQUEN HASTA LAS MASCOTAS! Y quiero lo mismo para todos los malditos que participaron y apoyaron a estos desgraciados, Cámporas, Milagro Sala, Unidos y Organizados, Vatayón Militante, y del primero al último que haya sido y sea partícipe necesario, impresentables sindicalistas, y execrables Massa y Scioli incluidos. Ésta es la forma de “Honrar” a Nisman. Y a cada uno de los muertos que nos deja este pestilente gobierno y todos sus venales. No se trata sólo de una Marcha del Silencio. Ni siquiera de un Mani Pulite. A estas alturas, lo que Argentina necesita es un fucking, fucking Juicio de Nüremberg. ¡Y por Dios les juro que lo vamos a tener, de una forma u otra! Por eso marcharé, no para recordar a quien jamás olvidaré. “Pocos son lo que dicen ser y nadie es lo que parece”… ¡Si Pollicita se resfría salimos de maldita cacería! Alesia Miguens