jueves, 14 de mayo de 2020
EL ÚNICO OBJETO DE LA CUARENTENA INTERNACIONAL: EVITAR MUERTES MASIVAS Y COLAPSO SANITARIO.
EL ÚNICO OBJETO DE LA CUARENTENA INTERNACIONAL: EVITAR MUERTES MASIVAS Y COLAPSO SANITARIO.
Si por un simple pero metódico ejercicio, tomásemos a todo el universo informativo de cualquier región del Planeta, el unívoco tema de agenda, vía las Agencias y Corporaciones Periodísticas es el Covid, sus estragos actuales y los que hoy pronosticó y de pseuda perpetuidad, la OMS.
Certificando así cuánto adelantamos nosotros hace más de un mes.
Esto es que, una inocua vacuna se lanzará próximamente al Mercado Global, con una toma de ganancias de los carteles farmacéuticos de incalculables proporciones.
Pues bien, todo nos indica entonces que habrá virus por largo tiempo.
Y con su propagación, la progresiva desaparición de nosotros, los de la Tercera Edad.
Enviando así al canasto todos los adelantos científicos en aras de prolongar hasta por nueve décadas la vida de la gente promedio, limitandola dramáticamente a todo mayor mayor de setenta años.
Conforme las estadísticas que se van recogiendo en todas partes y con idéntico resultado.
Bueno, aceptando ese desenlace cronológico como inevitable, resta ver en que puede cada uno de nosotros, colaborar con el prójimo y para que los más jóvenes sobrevivan.
Aquí en USA, hasta las datas de febrero del año en curso, el conglomerado de pobres de solemnidad, alcanzaba al 13% de la población, ergo, algo más del 40 millones de individuos.
A partir de julio, esos carenciados, y merced a un optimista conjetura, se cuadriplicará.
Alcanzando -de no desbandarse aún más esta diabólica Pandemia-, unos 160 millones.
Números más o menos equivalentes al 50% de todos sus habitantes.
Si esta argamasa de sorpresiva pobreza aquí trepida a tal proporción, imagínense en el resto de América y los restantes cuatro Continentes.
Según los expertos, alrededor del 70% del resto del mundo, deberá resignarse a desayunar, almorzar y cenar en Ollas Populares.
La intervención de los Estados, con muchísimas dificultades presupuestarias y un voraz
emisionismo monetario, no traspasará los límites de ayuda social.
Las Industrias de todo tipo, con acentuación y severa en las Alimentarias pasarán a ser controladas como Factorías Estatales.
Que, será la ineludible forma en que, el agiotaje y el black market carezcan de oportunidades especulativas.
Y después de un tiempo todos los medios de producción de bienes y servicios seguirán su suerte.
Los Aliados durante la Segunda Guerra, masacraron a ocho millones de Alemanes, y de esa forma, el contralor de un sistema Capitalista más humanitario, se esfumó junto con la derrota.
Aunque aparente como bizarro, si el Nacional Socialismo se hubiese impuesto, este decadente y envilecido mundo actual estaría mejor aprestado para enfrentar esta mega crisis.
Toda vez que, ahora, las reglas del Mercado y la Economía serán modificadas y sin anestesia y a quemarropa.
Los Colosos Financieros que a diario se juegan sus cuartos en Wall Street y las restantes Bolsas de Europa, Japón y China también se esfumarán.
Por cuanto, sus activos no valdrán un cobre.
Este nuevo modelo, al que podemos ya etiquetar como Neo Maoista no será realidad por una imposición beligerante entre Occidente y los Asiáticos o un abrupto cambio de paradigmas ideológicos.
Sino como el precipitado de una realidad que muy vano sería soslayar.
A esta tan perniciosa como afamada concentración de la riqueza en pocas manos, obvio es que, desde este momento, podemos extenderle su Certificado de Defunción.
Ya que sin importar cuál sea el rubro que la mutó en archi millonaria, siempre, sin exclusiones, basó la multiplicación de sus activos en el Consumo Masivo.
Vgr, la telefonía celular y los portales de la internet.
Que, precisamente es de quien estamos inhumando sus restos.
Trump, un orate con medalla de oro en su manejo de la política, con ese sesgo de Real State que guió su vida de tahúr, tratará de imponer su paranoia e iniciar un episodio nuclear contra Beijíng.
Pese a que los Capitostes de la Defensa, le están haciendo saber que abandone tal demencia.
Veremos dicha expectativa y sus progresos, pero conforme nos indican los que acá mucho saben, ni una conflagración y a escalas inimaginables, disiparía esta realidad que golpea en todas latitudes por igual.
Porque a los Pueblos habrá que alimentarlos con o sin guerras de por medio.
En resumidas cuentas, este virus que carece de precedentes a los anteriores, posee una velocidad mutante que torna y tornará en imposible una contra vacuna.
Puesto que descubierta que fuese la eficacia dominante contra una cepa, esa fulminante aptitud mutativa en otras nuevas y con un idéntico patrón mortal para las vías respiratorias en gente de avanzada edad, la convertirá en estéril.
Esto que, es ya un secreto a voces en los principales cenáculos de los poderosos que rigen los destinos de toda la humanidad, poco a poco han comenzado tibiamente en aceptarlo.
En una dirección en paralelo, la reflexión que ni ellos pueden negar es que la Plutocracia, es ya hoy considerada como un precepto muy pretérito, más acorde en incluirlo en los Libros de Texto de los Educandos y Educadores del próximo lustro.
Una regla de principios esenciales, empero, no perderá ningún valor.
La Ley Universal de la Oferta & la Demanda muy incólume se mantendrá, pero con una sesgo e inédita escalada.
Una Nación y/o una novel Federación de ellas, cualesquiera que sean, producirá y a impensada multiplicación, insumos de los que sus recursos naturales las provean y otras adquirirán cuanto no producen.
Pueden denominarla como una remozada Ley Internacional del Trabajo.
O para que asome y suene menos marxista, llamarla como Ley Universal de Intercambio Compensado.
De esta monumental e inimaginable realidad de un desempleo masivo y hambrunas, no existe ni existirá otra forma para evitar algo que, de momento se encuentra en un estado,
algo más desarrollado que en situación embrionaria: La Anarquía Social.
Que sería propio de eunucos, no considerarla como el venidero escenario, de continuar atándonos a las ahora perimidas variables de la Economía Política.
Cuando en seis meses o menos, el dólar ceda su cetro, todo nos hace inferir que ésta y las demás administraciones, emitirán vales de racionamientos.
Como durante las dos guerras pasadas y basadas en patrones de puntos.
Y para ello, los valuativos de los Bienes durables y los otros, tendrán una asignación en mérito a esa puntuación.
El formidable efecto benéfico que tales reglas conllevarán, estarán dadas por la extinción
de los Paraísos Fiscales y en términos generales de todo el dinero negro, que por contar con dicha jerarquía es espurio y malhabido.
El prestamista, el usurero y todos sus homónimos, también desaparecerán.
Y muy posiblemente, esa tóxica, anti Cristiana y malsana evaporación, conlleve a que quién se esfuerce obtendrá sin más su merecida recompensa.
Por último, una póstuma reflexión sobre este colosal encierro social.
El estrepitoso fracaso en otorgarle cierta dosis de laxitud a las salidas transitorias de los habitantes de cualquier Capital o Metrópoli es del todo evidente, por el veloz incremento de los contagios.
Pero esa, tan solo es una verdad a medias.
Para expresarlo en un concepto desprovisto de cualquier atisbo académico, la realidad, cuyo rumbo de colisión no podemos evitar es solo uno:
Toda la Población Terrestre, antes o después, y sin excepción ninguna, será presa de este micronésimo bichito.
Los más jóvenes y sin antecedentes de otras dolencias preexistentes o coetáneas a la infección, dicen que tendrán serias chances de sortear prontamente sus efectos.
Al Altísimo rogamos que así sea.
Pero, si esta encerrona fuese desechada, un solo resultado se obtendría y sería el fin ya de la tan poco fiable capacidad de atención y cura hospitalarias.
Ese y ningún otro aditamento es lo que la idiotizada Prensa calla siniestramente.
Contabilizándo cotidianamente las bajas como si estuviésemos inmersos en un conflicto bélico mundial.
Y deducimos que tras bastidores, se encuentra lo más granado de esos parasitarios intereses que aún no están dispuestos a capitular, y menos a resignar o desprenderse de sus privilegios.
La realidad Estimados, sería más provechosa si dejamos de enmascararla.
Porque la reactivación industrial, cuenta aun con una chance.
En todo el Orbe, y vecinos a las grandes urbes, los bolsones y racimos de indigencia,
son cuantiosos.
En su gran mayoría, carecen de servicios cloacales, lo que sin aditamentos sobrevinientes, los está capacitando en enormes usinas reproductivas de esta rebelde virosis.
Bueno, cada gobierno deberá destinar sus recursos, menguados o no, en demoler esos villorrios que, coadyuvan a la propagación de este Mal a monstruosas proporciones.
Ese, deberá ser el primer paso que corporativamente, todos los gobernantes deberán de articular, para dar inicio a una producción que no será demandada por los particulares.
Paliando esa desigualdad social, y necesaria encubridora del narcotráfico y la delincuencia callejera, un segundo objetivo, se corresponderá con un emético tan clamado por la gente decente.
En otras palabras, erradicando las villas con bulldozers, también se disecará junto con la desinfección, la morralla anidante entre los más excluidos y necesitados.
De esa forma, además, el bobo asistencialismo deberá de caducar, pues esos falsos estandartes de los que menos tienen tendrán que renovarse por otros más edificantes y saludables.
Suprimiendo esta práctica de limosnerismo con jerarquía de perpetuidad.
Comenzando por el incontrastable mecanismo que sean esos villeros quienes edifiquen con sudor y sacrificio sus nuevas viviendas.
La desocupación así, sufrirá un golpe del que difícilmente se recupere y nos librará de estos economicistas de cartón con sus punteros, libros y powers points tan viles como mendaces.
¿Depondrá el Hombre sus gregarias costumbres de oprimir a sus semejantes o de beneficiarse arteramente de quienes lo hacen, como esta sórdida cáfila de los actuales políticos?.
Que cada quien extraiga sus propias conjeturas.
Creemos que todas, aunque unas y otras sean oblicuas entre sí, tendrán un valor agregado que, de todas formas será más óptimo que este estatus qúo.
Bien Amigos, es nuestro propósito que los más adormilados finalmente se espabilen y entiendan de una vez por todas que...
EL ÚNICO OBJETO DE LA CUARENTENA INTERNACIONAL: EVITAR MUERTES MASIVAS Y COLAPSO SANITARIO.
Cordialmente Carlos Belgrano
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