domingo, 9 de junio de 2013
YA BASTA!!
Por Malú Kikuchi (12/5/2013)
Argentina, la nuestra, el país donde nacimos o elegimos vivir, tiene una curiosa y macabra costumbre. Desde siempre, nos encanta cambiar a los muertos de lugar y a las esculturas que los representan. Casi un hobby nacional. Eso de que los muertos descansen en paz, el R.I.P. latino, es solo una frase de compromiso que se pone en los avisos fúnebres.
Así andamos por la historia, mudando sepulturas y reemplazando estatuas. Como si no hubiera cosas más urgentes e importantes que hacer en el país. Aparentemente, todo funciona tan, pero tan bien, que lo imprescindible es el capricho, en este caso presidencial, de echar a Colón de su lugar y reemplazarlo por Juana Azurduy. Vamos a los hechos.
Para el centenario, Antonio Devoto, rico inmigrante italiano, inició una colecta entre sus compatriotas (puso la mayor parte del dinero, pero contribuyeron hasta los que vendían verdura en carretillas), para donarle al país que los acogiera con generosidad, un monumento a Colón. En Italia, por concurso, ganó la obra Arnaldo Zocchi. Se puso la piedra basal el 24/5/1910.
Se esculpió en Italia. Es un extraordinario monumento (vaya a verlo, vale la pena), se trasladó a la Argentina y el mismo Zocchi lo armó en 1921. Desde entonces está ahí, en la plaza que lleva el nombre de Colón, de espaldas a la Casa Rosada y mirando al río.
Cristina, cree que la plaza, el monumento, la Rosada, la ciudad y el país son de su propiedad. Y quiere sustituir a Colón por un monumento a Juana Azurduy, ascendida post mortem por la presi, a generala. El monumento se esculpe en Argentina, cuesta un millón de US$ donado por Evo Morales (no por el pueblo boliviano, aunque la plata sí sea del pueblo). Cristina quiere tenerla a sus espaldas cuando hable desde el salón de las mujeres (que tampoco le pertenece), desde la Rosada. Y a Colón quiere mandarlo a Mar del Plata donde ya tiene estatua, plaza y avenida. El escultor es argentino.
¡Ya basta de muertos y estatuas itinerantes! Sumemos. No es “O”, es “Y”. La historia grande se hace con “Y”. Si Colón, por casualidad no se hubiera topado con América en su camino a las Indias, Juana Azurduy de Padilla no hubiera combatido en el ejército del norte, a las órdenes del Gral. Belgrano de origen italiano, rubio y de ojos azules, rodeado de “blanquitos”, para liberar a su tierra de los españoles, no en nombre del indigenismo, sino de la libertad. Y Juana era una patriota del Alto Perú. Boliviana.
Si Colón, científico, astrónomo, matemático, marino, que nunca mató a nadie, ni se le hubiera ocurrido, y eso que por ese entonces la muerte violenta estaba más de moda que hoy en la Argentina, no hubiera descubierto América (algo de lo que no se enteró), Cristina, nombre cristiano por excelencia, Fernández, españolísimo, Wilhem, alemán, de (Néstor, griego) Kirchner, alemán, Ostoic (croata), no sólo no podría ser presidente, sino que no hubiera existido. En Europa la gente no se mezclaba tanto. Y acá, hasta el puro por cruza nadie nos para. ¡Bien por nosotros!
Y dejen de amolar con el colonialismo. Que no viene de Colón, como leí en alguna parte, la palabra viene de “colono”. Este ataque de neo indigenismo, tan gratuito como estúpido, que ignora las atrocidades del mundo precolombino, para mirar únicamente las atrocidades de los conquistadores, olvidando que la época era cruel, acá, y en todas partes.
Lo más gracioso es que nadie de los que están denostando a Colón y la conquista, se apellida Manco Capac, Monctezuma o Calfulcurá. Un disparate más de los descendientes de los barcos, que vinieron a América a hacerla grande, mientras dejaban atrás la miseria de Europa. Gracias a Colón.
Apelando al sentido común, del que obviamente carecen, supongamos que Colón le abrió la puerta a un “genocidio” indigenista, eso fue hace 521 años. Y una estatua no va a cambiar, ni a recompensar las pérdidas de entonces.
Pero hoy, los Qom, del pueblo Toba, reclaman por tierras que les pertenecen, que les otorga la Constitución, y reclaman por 8 asesinados desde el 2003. Cristina Fernández de Kirchner, no los recibe. Se exhibe en los palcos oficiales entre Insfrán y Capitanich, los gobernadores responsables de las muertes y los despojos. Desde el 2003, hasta hoy, ya son 18 los muertos indígenas entre el NOA y el NEA. Por represión. Y son argentinos.
Juana Azurduy en lugar de Colón, no va a cambiar ni la conquista, ni la colonia. Ni siquiera puede conseguir que el gobierno nacional y los provinciales se ocupen de las condiciones infrahumanas en que subsisten los argentinos, pertenecientes a las etnias previas a Colón.
El resentimiento, incomprensible en los descendientes de europeos (sí en los indígenas que sólo piden que se les respete lo que les promete la CN, y que no los masacren al hacerlo), no les llega al día de hoy. Desde hace un tiempo Argentina ha decidido vivir en el pasado, despreciar el presente y desconocer el futuro. Gobernar se reduce a reemplazar estatuas.
Aunque quizás, Juana en vez de Colón, sea una distracción al cepo, la inseguridad, la corrupción, el desempleo, la pobreza, la inflación, la droga, la absoluta falta de idoneidad en los funcionarios, la mentira, la soberbia, el autismo internacional y la amistad con ¡Irán!, el pretender someter al poder judicial, el INDEC inverosímil, la falta de energía, los sueldos de La Cámpora, el asalto a la ANSES… y tanto más. Distracción o no, sin Colón, no hay Juana.
“Y” es Colón “Y” es Juana Azurduy. “Y”. Sin Colón no estaría escribiendo en este extraordinario idioma que es el castellano y Usted no lo estaría leyendo. La historia no puede cambiarse, lo que pasó, pasó. La historia contra fáctica es un divertimento para intelectuales. ¡Pobre Argentina! Pero podemos cambiar lo por venir. Ya llegan las elecciones. Cambiemos definitivamente la “O” por la “Y”. Y al FPV por algo más coherente, si es que los opositores se deciden a achicar egos y agrandar el patriotismo.
P.D.: El 3/6 en Argentina es el Día del Inmigrante Italiano, por ser el natalicio de Manuel Belgrano, hijo de inmigrante italiano. Gracias a Colón.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario