COSECHARAS TU SIEMBRA

Por Juan de Dios Romero

Hace unos días se pudo ver en una señal de TV como un numero grupo de chicos estaban sentados en bancas de legisladores tratando de parecerse a ellos en una “actuación” con efectos futuros no deseados.-

El lugar, sede del poder legislativo de algún lugar, estaba siendo utilizado para que los niños aprendan como se legisla, o algo parecido.- que es una forma de aprender como se manda, o como se impone uno.-

El problema es que esos chicos vean como se imprime en sus espíritus, mentes o percepciones que ello en realidad no es un juego ni una clase de civismo, sino que se crean que es el destino que les corresponde y quizás, muchos de sus padres, al verlos tan compuestos a los pibitos en esas bancas lleguen a creer que ese es realmente el futuro que tienen para ellos. Por algo se comienza.-

El problema central es transferible, puedo imaginarme como un grupo de pibes con hambre, son invitados a un restauran a comer, diciéndoles que así se come.- Entonces ellos pueden llegar a creer que es lo que les corresponde y pretenderán arribar a esa situación de forma definitiva, lo mismo sus papás.- y para ello realizarán planes, como en el caso de los niños legisladores.-

Ahora, si ponemos a los niños en la torreta de un tanque de guerra, como ocurre en oriente y otros sitios, ellos también podrán inferir que su futuro es llegar a maniobrar esas moles de la muerte y, también quizás sus padres, tiene derecho, como en los otros dos casos, a que ese fin de cumpla.-

El problema que se presenta, es que en los tres casos no consigan esos propósitos y se frustren y, en ese camino lleguen a considerar que con ellos se han cometido injusticias, porque en definitiva se los inició en esas actividades que se imprimieron en su vida como el aviso cierto de sus futuros, como también en sus padres orgullosos de verlos en cada uno de los casos.-

En el primero de los casos, el real, a los niños se les esta diciendo de una forma tangencial pero efectiva como mensaje directo, que esa posición legislativa es posible para ellos como futuro y sus padres organizarán ese futuro con lo que dispongan, o más aún, contra todo y contra todos, porque tal futuro es el que merecen los pibes.-

El problema son los papás que pueden tomarse en serio esas “representaciones” que no son útiles para formar los espíritus, caracteres, o personalidades, la formación en lo que hace a la cultura cívica o al amor por las armas o por la buena comida no se puede imprimir de estas formas; porque ellas constituyen formas corruptas por su génesis, como por ejemplo, que algunas niñitas vena como otras mucho mas mayorcitas se aferran a un caño para triunfar en la vida…….

La dicotomía también se ve en las necesidades de la gente, nun ca tantos satisfechos hablaron tanto del hambre y, nunca se entrevista un hambriento…

Esta es mi opinión.-