viernes, 30 de octubre de 2009

KRETINA AMADORA


La jefa de una organización social violenta y mafiosa


FUE SALUDADA CARIÑOSAMENTE POR LA PRESIDENTE DE LA NACIÓN


Buenos Aires - Fue un gesto afectuoso, de medio minuto, con un apretón y una caricia en el pelo. El abrazo entre la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y la militante jujeña, Milagro Sala, generó una aireada respuesta de la Unión Cívica Radical. El senador y presidente de la UCR, Gerardo Morales, afirmó que esa señal fue una manifestación de que "sin dudas el kirchnerismo está avalando la violencia".

Las cámaras registraron el momento en que Sala fue saludada efusivamente por la jefa del Estado, quien al término de su discurso tomó su cabeza con ambas manos, en un gesto que hizo recordar al cálido saludo que le brindó al ex presidente Raúl Alfonsín en un homenaje realizado también en la Casa Rosada; además, la besó y abrazó.

Sala, en diálogo con la prensa, dijo después que el anuncio presidencial “fue formidable, los argentinos estábamos esperando esto. No hay palabras, estoy muy emocionada”, confesó.

“Los pobres también hoy se están entrando a beneficiar cuando lamentablemente, antes no había beneficio para ellos”, enfatizó, y agregó que “pareciera que algunos se molestan cuando se entra a beneficiar a los que menos tienen”.

Señaló específicamente a “la oposición” y pidió que “ahora no haya ninguna justificación para (oponerse a) lo que hoy acaba de anunciar la Presidenta”.

Cuando se la consultó por la acusación de Morales, quien dijo que hay casas a nombre de ella, Sala fue enfática: “Sí, totalmente, lo desmiento” y recordó que “en el transcurso de esta semana en que los periodistas fueron a Jujuy, se dieron cuenta de que no era como él dice, que portamos armas, manejamos la droga, que manejamos la policía, los juicios”.

"La verdadera reforma política que tendría que impulsar Cristina es un cambio de actitud, terminar con la violencia, las agresiones y la protección a los que manejan a su gusto la plata que es de todos", advirtió el líder opositor quien fue víctima hace una semana de las agresiones de miembros de esa organización en San Salvador de Jujuy.

El senador radical, que denunció a Sala la semana pasada, sostuvo que "hay que proponerse hacer lo correcto, mantener el respeto y la voluntad de construcción en política para recuperar las instituciones".

"Había que pegarle al chancho para que aparezca el dueño", ironizó el senador electo por tucuman José Cano, quien criticó que la Presidente reciba en Casa de Gobierno a la líder de Tupac Amarú.

En ese sentido, manifestó que "es realmente vergonzoso que el gobierno contenga a la jefa de una organización social que ha mutado en violenta y mafiosa que hace apenas una semana se ensaño con el presidente de la Auditoria General de la Nación y el titular del principal partido de la oposición, Gerardo Morales".

En el acto, además, estaban presentes, además de gobernadores de varias provincias, el piquetero oficialista Emilio Pérsico, quien viene de renunciar a su puesto en el gobierno tras la detención de su hijo transportando en una camioneta oficial plantas de marihuana y miembros de la agrupación kirchnerista “La Cámpora”, que entonaron ruidosas consignas y la marcha Los Muchachos Peronistas, junto a muchos de los presentes.

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