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Provincia de Buenos Aires: la crisis, sector por sector. Paro, movilizaciones, cortes de ruta y un desmadre imposible de frenar Clases y comedores escolares, en peligro Los docentes bonaerenses representan la mayor cantidad de los empleados públicos provinciales. Suman cerca de 350 mil en las 21 mil escuelas de la Provincia. Al igual que la mayoría de los gremios de estatales, comenzaron un plan de lucha la semana pasada en reclamo del pago del medio aguinaldo en cuatro cuotas. Las medidas continuarán esta semana con paros de 48 horas hoy y mañana, que sumarán cuatro días sin clases en dos semanas. Sin embargo, la situación tenderá a empeorar si no hay novedades, porque desde el Frente Gremial ya anunciaron que no se reiniciarán las clases tras el receso invernal, porque ya tiene previstos paros para el lunes 30 y el martes 31 de julio. Mientras, los maestros de Udocba, el gremio docente de la CGT, también pararán mañana y el jueves y el viernes definirán las acciones para después de las vacaciones. “Nosotros también pedimos la reapertura de las paritarias el 23 y 27 de julio para tratar el reajuste salarial sin levantar los topes del impuesto a las Ganancias y universalizando las asignaciones familiares”, dijo a Hoy el secretario general de Udocba, Miguel Díaz. Al paro de los docentes se le suma el de los auxiliares del Soeme (ver aparte) y también complicará la actividad escolar la deuda que el Estado provincial mantiene con los proveedores de los comedores escolares, que asciende a más de $ 400 millones, según aseguró a este diario el titular de la Asociación Bonaerense de Prestadores de Servicios a Comedores Escolares y Afines (Abpscea), Héctor Acevedo. La deuda se remonta a enero de este año, aunque los proveedores recibieron el compromiso del pago de $ 50 millones, que sólo cubriría los meses de enero y febrero. “Queremos consolidar la deuda como sea, aunque sea con bonos, porque hasta ahora el servicio es normal porque hay buena voluntad, pero cuando los proveedores se caigan, no van a poder llevar más comida a los chicos”, dijo Acevedo. Los hospitales, en emergencia Los trabajadores y profesionales de la salud de los 77 hospitales bonaerenses agregan al pago desdoblado del medio aguinaldo la falta de insumos y la escasez de personal. Al igual que el resto de los estatales, desde la Asociación de Profesionales de la Salud de la provincia de Buenos Aires (ex Cicop) ya definieron que realizarán paro hoy y mañana, por lo que se atenderán sólo emergencias en los hospitales de la Provincia. El secretario de Relaciones Institucionales de la Cicop, Jorge Yabkowski, dijo a Hoy que “en el congreso del sábado pasado votamos la medida de fuerza de 48 horas y planteamos como únicos temas el pago del medio aguinaldo y el rechazo a la ley de Emergencia Económica”, que había anunciado el gobierno de Daniel Scioli. Además, los profesionales de la salud pusieron en “el mismo plano de responsabilidad al Gobierno nacional y al provincial”, aclaró Yabkowski. Si bien el dirigente de la Cicop aclaró que no se incorporaron otros reclamos, señaló que “la crisis nos está llevando a la falta de insumos, incluso sencillos, como suero, guantes de látex, jeringas y hasta algodón. La falta de insumos se debe a la crisis de presupuesto y también a las trabas a las importaciones (dispuestas por el Gobierno nacional) que hacen que haya faltantes en los hospitales”, agregó. Otro de los reclamos de los trabajadores de los hospitales bonaerenses es “que se reabran en el segundo semestre las paritarias para analizar aumentos salariales, por la inflación”, añadió Yabkowski. Por otro lado, el gremialista mencionó el “régimen de reemplazo de guardias, que está atrasado”. En el Ministerio de Salud hay 40 mil trabajadores, de los cuales 17 mil son profesionales de la salud y los otros 23 mil son administrativos y enfermeros que no hicieron la carrera, según el gremio. “Tenemos déficit en general entre 2.500 y 3.000 enfermeros de carrera porque es una profesión escasa en el país y los pocos que se forman se encuentran con que los sueldos en la Provincia están por debajo del sector privado que absorbe la mano de obra, que se va a trabajar a Capital Federal o al sector privado”, describió el secretario de Relaciones Institucionales de la Cicop. La Justicia sigue paralizada Los tribunales bonaerenses están paralizados casi desde el inicio de la actividad judicial en la Provincia, porque los empleados de la Justicia bonaerense mantienen un conflicto de larga data, por la restitución del sistema de porcentualidad para el cálculo de sus salarios. Por ese conflicto hubo 65 días de paro ininterrumpidos y en lo que va del año ya suman más de 70 días. A todo esto se agrega el desdoblamiento del pago del medio aguinaldo, por lo que la Asociación Judicial Bonaerense volvió a las medidas de fuerza la semana pasada y continuará esta semana con paros mañana y el jueves. “El viernes vamos a tener una asamblea para definir cómo sigue el plan de lucha”, dijo el secretario adjunto de la AJB La Plata, Oscar Martín. Al reclamo del pago del medio aguinaldo los judiciales agregan el de la incorporación al cálculo de la escala salarial de acuerdo a un porcentaje de lo que cobran los jueces de más alta jerarquía, que son los ministros de la Suprema Corte bonaerense. Ese sistema de porcentualidad salarial se aplicaba en la Provincia hasta la década del ‘90 y nunca más se volvió a poner en práctica, a pesar de que se utiliza actualmente en los poderes judiciales de varias provincias del país. El año pasado, los trabajadores judiciales habían recibido el compromiso de la Provincia de volver a discutir la incorporación de la porcentualidad a sus salarios, por lo que este año, al encontrar una negativa, endurecieron la protesta. “El gobierno nos dijo que es un problema político y económico, pero nosotros esto ya lo veníamos adelantando, por eso pedimos audiencias con el Ejecutivo y también con la Corte, pero no nos quieren recibir”, dijo Martín. Los empelados de la Justicia suman unos 24 mil en los 18 departamentos judiciales bonaerenses, en los que los tiempos de los procesos judiciales se complican por los reiterados paros. Sin embargo, ayer trascendió que la Corte está buscando un acuerdo extraordinario para que los judiciales cobren el medio aguinaldo completo esta semana. Los policías también reclaman Los policías bonaerenses no tienen representación gremial. Sin embargo, desde la Asociación de Profesionales de Policía de la provincia de Buenos Aires (Apropoba), su secretario general, Miguel Angel Reynoso, dijo a Hoy que el pago del medio aguinaldo en cuotas “afecta sobre todo al personal de menor jerarquía, que tiene los sueldos más bajos y aprovecha el aguinaldo para nivelar su situación económica”. El titular de Apropoba dijo que desde su asociación no se promovió ninguna acción de protesta y desestimó los anuncios que circulan desde la semana pasada llamando al autoacuartelamiento. En la Provincia hay unos 55 mil policías en actividad y unos 30 mil retirados, según Reynoso. Además del pago del medio aguinaldo, los uniformados tienen otros reclamos. “Hay un gran engaño que son las horas Cores, que es un aumento encubierto de una cifra en negro que los policías las pierden si se enferman o accidentan y tampoco tienen beneficios, es un engaño para los policías que menos ganan, cuyos sueldos son de poco más de cuatro mil pesos, pero piensan que ganan más o menos bien sumando las horas Cores, y cuando se retiran se disminuye mucho el sueldo”, explicó el secretario general de Apropoba. Además, “hay excesiva carga horaria, faltan francos compensatorios y no se pagan los trabajos en feriados y fiestas nacionales”, agregó Reynoso. “Se trabaja todos los días del año sin que haya compensación”, se quejó. Y completó: “También hay carencia de elementos necesarios para trabajar y de infraestructura, hay dependencias policiales que ni siquiera tienen baño”. A todo esto se suma una recomposición salarial que está pendiente en la Legislatura y que alcanza a unos 10 mil policías retirados en actividad, por la que en algunos casos podrían tener aumento del 85%. El proyecto de ley, enviado por el Ejecutivo y que espera tratamiento en el Senado, propone modificaciones en el escalafón para corregir errores de la última reforma policial de 2009.