A PESAR DE LA GRIPE......

A pesar de la gripe puerca, "Todos unidos triunfaremos"


El domingo pasado se disputó en todo el país la gran interna peronista a la que por obligación legal debieron concurrir millones de argentinos. Para que no quedasen dudas de que era una común disputa interna, al día siguiente de los comicios, dañado hasta lo más hondo por el resultado, uno de los dos Presidentes Kirchner renunció a la titularidad del Partido Justicialista, dejando en su lugar al gobernador bonaerense y diputado electo testimonial Daniel Scioli que, como era de esperar, aceptó el convite.

Extrañamente, la retirada fue grabada en un lugar secreto con la única presencia de los periodistas de la agencia oficial TELAM y luego entregada a los medios de comunicación para que se encargaran de divulgarla. Faltó, que se hubiese encapuchado como el comandante Marcos o los terroristas cuando realizan sus publicitadas conferencias de prensa. Es hora de que el periodismo, en especial el político, sea respetado y se respete a sí mismo un poco más para no caer en el mismo descrédito en que se ven sumergidos en la actualidad políticos, jueces y fiscales, y policías. No se debe publicar cualquier cosa provenga de donde provenga. Ni tampoco asistir a largas peroratas del Ejecutivo a las que suelen llamarse humorísticamente "conferencias de prensa" en donde las preguntas se encuentran digitadas con anterioridad en calidad y cantidad. Mucho menos puede sobrellevarse la actitud del "decano" de los periodistas de la Casa Rosada, más preocupado en parecer -o ser- condescendiente con la otra Presidente Kirchner que cumplir con recato su misión profesional.

Que por haber perdido la elección, Néstor Kirchner haya dejado el bastón de mando peronista en manos de quien lo secundó en la derrota, es, por lo menos, un contrasentido, y en el aire se siente que "tras los muros, sordo ruido, oír se deja de corceles y de acero", porque quien le sigue a Scioli es nada más ni nada menos que el campereado líder de los camioneros y de la CGT, Hugo Moyano. Aquí, en estas pampas engripadas, el remedio siempre es peor de que la enfermedad.

El domingo 28 el matrimonio presidencial perdió su paso a la inmortalidad porque por hache o por be, los votantes le dieron la espalda al "modelo" nacional y popular y de inclusión social sobre el cual solían machacar con insistencia. Y eso que del otro lado nada se proponía porque en realidad fue una lucha por el poder entre billeteras bien forradas: una estatal, a ojos vista pecaminosa y carcelaria, y otra más hinchada aún, pero particular. En Capital Federal se pagó $ 100 a cada fiscal de mesa y $ 150 a cada fiscal general de escuela: tanto por tantas escuelas resulta tanto. Ni que hablar del tanto que costó tantear en la provincia de Buenos Aires. Créase o no, esta fue la elección más cara de la historia argentina que demostró que es posible que el dinero no dé la felicidad pero ¡damas y caballeros, jóvenes, niños y lactantes de la patria bolivariana en franca retirada!. ¡cómo ayuda!

El peronismo estatista de centro recostado levemente a la izquierda (Reutemann, de Narváez, Macri, Solá, Solanas y otros) irá por más. Mientras que el peronismo estatista de izquierda (los Kirchner) buscará nuevos aliados que lo ayude a mantenerse antes que el desbande, una especie de Crash-Bang anunciado, un Titanic sin salvavidas, una corrida bancaria a la argentina, se generalice. Y ya comenzó.

El "modelo" finalmente partió y se partió. Atrás queda el tren-bola, los planes para reactivar la venta de patinetas y triciclos, las cabinas de seguridad para colectiveros o el boleto electrónico que de electrónico no tiene nada y sí mucho de boleto. Pero también las reestatizaciones nacionales y populares de Aerolíneas, el Correo, Aguas, el Hospital Francés de la que los recién llegados se robaron hasta la histórica campana de emergencias que se encontraba al traspasar la entrada, los Ferrocarriles y por supuesto, la más grande estafa de todas ellas: los fondos de la jubilación privada. Que así sea.

De nada vale que el secretario de Transporte haya renunciado si antes no deja en claro que fue lo que subsidió y sobrefacturó para la Corona en lugar de tener todo el tiempo libre como desocupado de lujo para preparar su defensa ante la Justicia que ahora, visto y considerando la composición del nuevo mapa político, zamarreará a voluntad hasta que prescriban las causas. Por otra parte, las dilaciones y omisiones de la oposición hacia temas fundamentales como la economía nacional, deuda externa, seguridad, narcotráfico y alineamiento internacional, plantean demasiados interrogantes. Faltan seis meses para el recambio de legisladores y ediles: ¡una eternidad! Y aunque no se diga puede pasar cualquier cosa. Si con la 125 no cayó el Gobierno para asilarse en El Calafate fue porque no era eso lo que se buscaba y porque no había nadie en ese momento que pudiera hacerse cargo de la Casa Rosada. Hoy la situación es distinta al haber acuerdos entre bloques y un mancomunado trabajo en algunas cuestiones. Pero habrá que estar atentos a la salud de mucha gente, por ejemplo, a quienes hablan con ojos dilatados y vidriosos.

El matrimonio Kirchner arremetió contra los obispos pero no pudo doblegar a la Iglesia; encarceló, para pagar favores de campaña, a los miembros de las Fuerzas Armadas y de Seguridad que derrotaron a la guerrilla y a los cuales la sociedad argentina aún debe ese reconocimiento. Cebado, quiso hacer lo mismo con la gente de campo. ¿Cómo continúa ahora la historia?
SALINAS BOHIL