miércoles, 25 de abril de 2012

MUNDO DE OTROS

YPF y el mundo de los otros Por Hugo Martini Fuente: Carta Política.org El gobierno propuso expropiar por ley a YPF y al mismo tiempo la intervino por decreto. Las interpretaciones de porque se tomó está decisión y la forma de su ejecución están siendo tratado por analistas políticos y económicos. La Presidenta ya tomó su decisión y decidió ejecutar su mensaje “vamos por todo”. Son los otros, el mundo de aquellos que no controla, los que deberán actuar en los próximos días y horas. El mundo de los otros 1. La dirigencia política • Los partidos han sido llamados a votar en el Congreso a favor o en contra de la decisión presidencial. Este no es un voto cualquiera. Es una convocatoria para conocer el tipo de sociedad en la que los argentinos quieren vivir. Para decirlo con más claridad: aquellos que acompañen la propuesta de expropiación cruzarán una frontera. Las instituciones de la República –de las que tanto se habla- son un mundo de formas y contenidos. Si en algunos casos las formas no interesan habría que sincerarse y decir que sí importan, pero solo cuando nos conviene. Después escucharemos discursos articulados y explicaciones brillantes, pero el mensaje real es que en este tema suscriben la doctrina del “nada importa, todo vale”. • La demanda sobre los partidos políticos no se agota en que sostengan, al mismo tiempo, que el gobierno es el responsable de los problemas energéticos pero que lo acompañan, porque esta es una cruzada nacional. Para decirlo más simplemente: los hidrocarburos no son un tema de política exterior como Malvinas. Se trata de la explotación de un recurso que se encuentra en el territorio nacional, como los granos o las vacas. Aplaudir mientras se iza la bandera y se canta el himno no tiene influencia alguna en el éxito o el fracaso de una política petrolera. Esta relación de símbolos es casi una agresión al nivel cultural de los argentinos. 2. El mundo exterior • Durante los diez días anteriores a la expropiación se produjeron desde sectores empresarios internacionales, el gobierno de España y las autoridades de la Unión Europea una serie de advertencias, de una extrema gravedad, para el caso que la intervención anunciada se hiciera efectiva. Es probable que estas advertencias se diluyen en enérgicas protestas y presentaciones ante tribunales internacionales, cuyo cumplimiento para los países afectados depende en gran parte de su propia voluntad. • De esta expropiación los argentinos deberían capitalizar alguna experiencia. Si el mundo exterior finalmente no reacciona, es porque esta situación no afecta realmente sus intereses. Las acciones que los gobiernos realizan dentro de sus fronteras tienen como efecto que “los países deben vivir con sus decisiones”, como expresó Hillary Clinton referido a este hecho. Se interviene, únicamente, si estas decisiones afectan al orden global: Malvinas o la convulsión actual en el mundo árabe. El resto lo viven, lo sufren o lo gozan, nada más que los que viven dentro del territorio nacional. Si la democracia es lo que suponemos que es, “el peor sistema excepto todos los demás”, como dijo Churchill, las elecciones del año que viene deberían medir lo que cada uno ha hecho desde la elección anterior. El mensaje más claro es que aquellos que acompañen al gobierno en esta decisión, les costará explicar que son parte de la oposición.

No hay comentarios: