FOBI

FOBI: para evitar la derrota, el gobierno ahora va por una ley

Según como sea el proyecto, pueden renacer los riesgos de embargo.

Por Guillermo Cherashny

El gobierno dilató la batalla por el DNU 2010/2009 hasta el último límite y ahora se dispone a tomar la decisión que, un mes y medio atrás, hubiera acortado la larga crisis por el Fondo del Bicentenario (FOBI).

CFK intentaría evitar la derrota del oficialismo en el Congreso, a través de la decisión de anunciar mañana en la inauguración del período ordinario de sesiones ante la asamblea legislativa, la elevación de ley con la creación del FOBI. Pero hasta que no se sancione una nueva ley, el DNU 2010, cuya ejecución suspendió la justicia en lo contencioso administrativo, seguirá suspendido. Quedaría así frustrada la operación opositora en diputados pidiendo una sesión especial para derogar el citado DNU. La discusión de la nueva ley será entonces el nuevo escenario. El gobierno paga un nuevo costo, ya que los bloques del Peronismo Federal y de la UCR vienen reclamando desde que se iniciara la crisis que se trate una ley.

Se desconoce cómo será el proyecto de ley, pero trascendió que en sus fundamentos criticará indirectamente al “partido judicial”, a la oposición y a Martín Redrado por conformar una “máquina de impedir”.

En cuanto al FOBI, habrá que ver si se planteará que los U$S 6559 millones solamente conformarán ese fondo como mecanismo de garantía para pagar la deuda externa, como exigen los radicales para aprobar la ley. O bien, que una parte vaya a parar a las provincias, como reclama el senador Carlos Verna. O también para inversión y desarrollo, como reclama Proyecto Sur.

Riesgos

El problema es que, si la citada ley acepta la propuesta Verna o la de Proyecto sur es altamente probable que se produzcan nuevos embargos por parte del juez Thomas Griesa de Nueva York. En el caso de que se legisle que sea un fondo de garantía, hay un peligro menor, porque Griesa entiende que las reservas no sirven para saldar deudas comerciales, como es el canje con los holdouts. Sí existe la posibilidad en este caso de que el gobierno de los EEUU presione para que la Argentina vuelva a los mercados voluntarios de crédito.

En conclusión, podríamos decir que el famoso DNU 2010, que hablaba de reservas excedentes de U$S 18.000 millones, ha dejado de existir tal como fue planteado. A partir de ahí, la sesión especial que idea la oposición en la Cámara de Diputados no tiene razón de ser.