DE INTRANSIGENCIA GESTUAL O REAL

Diana Conti: Se cree la dueña de la verdad ( Lic. Francisco Scolaro )

La convalidación del accionar en el Consejo de la Magistratura de personajes como Diana Conti y Carlos Kunkel, la confirmación de Moreno o la verborragia todo terreno de Aníbal Fernández parece ser el incomprensible escenario de un oficialismo cacheteado por la Ciudadanía hace unas pocas semanas.

Se cumplió un año de la votación en el Senado que dio por tierra la resolución 125 en medio de un conflicto social inédito, sin embargo frente a ello el Oficialismo se lamió sus heridas y puso en penitencia el sector agropecuario. El resultado es , que a la Presidenta, que se autotitula una experta en el yuyo, leche y carne, le va a caber el privilegio sobre el fin de su mandato, de que debamos importar carne y leche. Este año la siembra de trigo es la menor de los últimos 110 años y han cerrado un tercio de los tambos existentes en nuestro país.

En 2003, a su llegada al Gobierno, los Kirchner habían declarado un patrimonio neto de $ 6.851.810 millones, por lo que sus bienes se acrecentaron desde entonces en un 572 por ciento hasta la fecha. Frente a este dato de la realidad, el novel Jefe de Gabinete manifestó que Francisco de Narváez en cinco años lo subió el 900 por Ciento.


Parece que la política es una actividad solo reservada para el Tío Patilludo y la Argentina este condenada a oscilar entre corruptos de verborragia caduca y autoritaria ,y un discurso tan vacío y paupérrimo, del cual resulta que los simpáticos imitadores de los políticos se exhiben mas inteligentes e interesantes que los imitados.

La construcción de una alternativa política que saque al país de su Estado de postración, tiene que ver con ser diferentes a quienes reciclándose permanecen en el poder desde los noventa.

La intransigencia nos una conducta o postura gestual, va mas alla de concurrir a una mesa de dialogo o no. Se es intransigente, cuando se sostienen convicciones y posturas en todos los ambitos más allá de los interlocutores, de su virulencia o sus fortunas.
Dr. Gustavo Aramburu
CYA