Señor Director:
> Quizá el único índice que este gobierno no pueda "dibujar" sea el de
la
corrupción. El discurso oficial además de anunciar falacias como que
trabajan para los excluídos de la década del 90, apoyada en primer
lugar por
el disertante y todos sus colaboradores, habla de la lucha contra la
corrupción además de narrar otras fábulas.
> Por segundo año consecutivo la Argentina logra un aplazo vegonzoso de
2,9
sobre 10 en cuanto al índice de percepción de corrupción. En esta
ocasión
ocupamos el puesto 105 sobre 180 naciones. Seguramente saldrán los
adláteres
oficialistas a decir que esto es una maniobra del neoliberalismo, del
FMI,
de los conspiradores y golpistas, de los defensores de los 90 y hasta
de una
operación del hoy poderoso menemismo, quién no puede ganar una elección
en
su propia casa.
> Más allá de las bromas el panorama es triste y desalentador, porque
la
corrupción nacional está sistematizada en gran parte de la sociedad
pero
sobre todo en las instituciones encargadas de velar por los intereses
de la
Nación. Esto hace que ningún estado, salvo naciones como Venezuela,
Cuba y
Bolivia crean en nuestro país.
> Tomando en cuenta las actitudes de la candidata oficialista en su
paseo
por el mundo poco podemos esperar si hablamos de mejoras, su negativa a
que
la prensa nacional participe en sus conferencias y la inexistente
información sobre sus proyectos y planes confirma que el anunciado
cambio no
sera tal sino más de lo mismo.
> Alejandro Olmedo Zumarán.
> olmedozumaran@hotmail.com
>
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