Aún no entendemos porque el Gobierno de Córdoba (más aun recordando que hace 14 años se acusaron mutuamente de fraude José Manuel de la Sota y Juan Schiaretti) , no aceptan el recuento voto por voto. A todas luces esta negación nos sugiere que hay gato encerrado. Concluimos que gente como ésta ha convertido la política en una mala palabra, en una simple disputa por el poder para la repartija del botín, en la que nadie cree (y de paso ex menemistas).
Nos aterra la falta de ejemplaridad de la actual clase gobernante de Córdoba. Lamentablemente, muchos cuando saben que nuestros familiares son de origen cordobés cruzan los dedos. Nos autorizamos a cuestionar la legitimidad de esta elecciones fraudulentas. Lo mismo ha de haber pasado en el Chaco y ocurrirá sin lugar a dudas a nivel nacional si no hay una sanción a tiempo.
Juan de los Palotes
Grupo Universitario de Periodismo, Educación y Política.
Sidney (Australia)
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viernes, 28 de septiembre de 2007
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