KRETINA DEPRIMIDA

Caso Redrado: Boudou le llevó escrito el dictamen a Marconato
El ministro de Economía visitó a Marconato, el único kirchnerista que hay en la Comisión Bicameral que evalúa si Redrado incurrió en incumplimiento de deberes de funcionarios público. Le hizo un rápido "coaching" para que enfrente al titular del BCRA y le acercó un dictamen escrito en la Casa Rosada. Cristina anoche se deprimió cuando supo que Redrado finalmente iba a presentarse y ordenó asistir al diputado. El economista habló por más de cuatro horas y vuelve hoy a las 11.

El ministro de Economía Amado Boudou le acercó ayer por la tarde al diputado Gustavo Marconato un dictamen escrito en la Casa Rosada, para que presente en la Comisión Bicameral que estudia si Martín Redrado incurrió en incumplimiento de los deberes de funcionario público durante su paso por la presidencia del Banco Central.

Según fuentes del Congreso, Boudou se acercó a media tarde hasta el despacho del jefe del bloque de diputados kirchneristas, Agustín Rossi, quien lo recibió junto a Marconato. Allí el mediático ministro le hizo un rápido "coaching" al santafecino, a quien instruyó sobre las consultas que no debía olvidar de hacerle al principal enemigo del Gobierno.

Después le entregó el dictamen para que no se tome el trabajo de redactar uno con sus propias consideraciones y le pidió que lo presente una vez que el Redrado termine su defensa, si era posible hoy mismo. Esta última estrategia no resultó, ya que el ¿todavía? titular del Central empezó hablar a las 17, terminó pasadas las 21 horas y anunció que continuará su defensa hoy a las 11.
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El ministro de Economía Amado Boudou, al retirarse del Congreso.



La sorpresiva irrupción de Boudou en el Congreso se produjo por una orden directa de Cristina Kirchner, quien ayer pasó de la euforia a la depresión, cuando se enteró que finalmente Redrado había decidido reveer su decisión de no presentarse en la comisión.

Enterada de esta pésima noticia -para el Gobierno- su ánimo se ensombreció y pidió que redactaran de inmediato un dictamen e instruyeran a Marconato, para acelerar al máximo el proceso, que tiene a mal traer al Gobierno y socava día a día su autoridad política.

Antes de irse del Congreso, Marconato dio cuenta de esa urgencia al pedir "profundidad y celeridad" a las deliberaciones de la Bicameral. "Ahora estamos en la parte de la profundidad. Lo que continuará después es la celeridad en el consejo respectivo que le debemos dar a la Presidenta", remarcó el santafecino.

Su compañero en la bicameral Alfonso Prat Gay, de la Coalición Cívica, sostuvo que los miembros de la Bicameral están "preocupados por la urgencia" en terminar el dictamen "pero también por hacer las cosas bien".

Prat Gay (que hoy tiene convocada a las 17 la comisión de Finanzas de Diputados) señaló además que Redrado explicó el contenido de la carta que difundió ayer, en la que les pedía que le exijan a la presidenta la derogación del decreto que lo echó de la entidad el 7 de enero. En un primer momento, se entendió que con esa misiva anunciaba que no iría hoy al Congreso, algo que no ocurrió.

Una salida posible

Ninguno de los tres integrantes de la bicameral (Prat Gay, Marconato y Julio Cobos) imaginan a Redrado llegando hasta el final de su mandato, que vence en septiembre. Pero los tres buscan que la salida sea sin costo político para sus filas.

Uno de los rumores es que tras las deliberaciones de mañana la comisión emitiría dictamen la semana próxima. Es que mañana, además de su presencia, en la comisión esperan otra visita de Miguel Pesce, vicepresidente del Central en ejercicio de la presidencia. Ambas presentaciones pueden consumirse el día.

Esta mañana visitaron la bicameral el director de Asuntos Legales, Marcos Moiseeff, un hombre de confianza de Pesce, y la gerenta de Estudios y Dictámenes Jurídicos del BCRA, María del Carmen Urquiza, quien fue la que recomendó a Redrado que esperara un pronunciamiento del Congreso antes de entregar las reservas en dólares para la constitución del Fondo del Bicentenario.

Después de un cuarto intermedio, a las 15 fue al Senado el síndico del BCRA, Hugo Alvarez, quien brindó un cuadro de interpretación jurídica de la medida dispuesta por el gobierno.

Como ya es habitual, Redrado regaló una máxima a la prensa antes de partir sin contestar preguntas, como siempre, en torno a la importancia de que el Banco Central sea independiente.

“Estoy convencido de que estamos marcando un hito hacia delante en la relación entre el Banco Central, el Congreso y las instituciones de la República Argentina, para que nunca más las reservas, que son los ahorros de todos los argentinos ni el Banco Central ni el Congreso sean avasallados", señaló, y se fue