domingo, 26 de abril de 2009

METER MIEDO


NotiAR - 26-Abr-09 - Editorial

http://www.notiar.com.ar/contenido/opinion/opi_8490.htm

Meter miedo; ésa es la cuestión

por Humberto Bonanata


Los mensajes que emanan del flamante "residente" bonaerense desde la unidad básica de Olivos confluyen más en una huída hacia delante que en la construcción política que debiera hacer un régimen próximo a cumplir sus seis años de hegemonía y desvaloración de todo principio que precie la institucionalidad.

A medida que se acercan los días para las proclamaciones de las candidaturas, legítimas o ilegítimas como la del amo del feudo, Néstor Kirchner, cual presa dominada por las redes de su paranoia, recurrirá a los artilugios in extremis para evitar que el 29 de junio quede grabado en nuestra historia adolescente como "el día de la retirada".
Presidente y Ministro de Economía de facto sabe que cuando pierda lo que le queda de poder, el artículo 29 de nuestra Carta Magna pesará sobre su futuro cercano e incierto y la actual "suma del poder público" podrá convertirlo en un infame traidor a la Patria.

Sabe también, porque aunque perverso es hábil, que no podrá bajarse de su candidatura de fórceps porque en sus propias huestes produciría el efecto diáspora de los adulones que hoy encalidecen sus hombros con sus palmadas y mañana serán aves de carroña de su cadáver político.

Si Kirchner decidiera dar un paso al costado de su burla electoral la recordada frase del cómico Mario Sánchez en "Polémica en el Bar" resurgiría del pasado: "Va a llegar el momento que diremos acá estamos y no va a hacer nadie" era su golpe de efecto al finalizar su diario scketch. Y eso podrá pasarle a Kirchner si decidiera dejar en libertad de pensamiento, palabra y obra al apostolado bandolero bonaerense.

Por ello lo de "después de mí el diluvio". Porque es la última batalla que librará antes de la caída. Porque sus adláteres de hoy beberán de su sangre y le entregarán al nuevo amo sus restos políticos. Aunque no escrita entre "las 20 verdades" el olfato a rigor mortis es innato en la cultura peronista.

Como él bebió de la sangre de Menem y de Duhalde hay cientos de miles que ya han logrado ubicación en sus umbrales para ver pasar el cadáver del futuro enemigo.

Y además Kirchner no podrá cumplir con su deseo maléfico de retirarse y entregar la cabeza de Scioli a los leones del circo romano. Porque ese es su ínsito deseo, sacarse de lado al oficialista con mejor imagen en el electorado y cortarle el otro brazo para la carrera presidencial de 2011.

Sueña -en su delirio- que el 29 de junio sólo se contarán los porcentajes bonaerenses y nó las bancas perdidas por ellos y ganadas en todo el país. por la "Unión Cívica" (U.C.R., C.C. y P.S.) y el neoperonismo que se autotitula "peronismo republicano",

Sólo le resta en estos sesenta y tres días que restan al comicio evitar la dispersión de su "frente ruso" y generalizar en la ciudadanía no politizada el temor al caos ante la derrota oficial.

Temor, esa es la sensación a instaurar para la gente.

Especialmente para aquellos que en 71 meses de kirchnerato han reducido su salubridad y su calidad educativa. Para aquellos que dependen de las prebendas oficiales para subsistir sin horizontes planificados para que logren el ascenso de clases como hasta 1930 les permitieron los libertarios que siguieron el legado de Alberdi.

Pero no todo es Kirchner.

En el neoperonismo, Macri hace de Michetti lo que Kirchner hace de Scioli. La utiliza, la conduce, la hace faltar a su promesa de hace solo dos años y la coloca como "yegüita llamadora" (con todo respeto hacia Gabriela en la comparación de "caballito llamador") y la obliga a dejar la vice jefatura de gobierno porteño para que sea una 275 parte de la cámara baja. Pensando en 2011, el señor de los ojos azules arrumba hacia la dispersión política a una mujer con mejor imagen que él en el electorado porteño.

La gente no es tonta, y aunque no lo quieran creen los dirigentes, crece intelectualmente.

Sabrá castigar la burla republicana a que nos quieren someter para sacarse de encima dos potenciales competidores. Claro está que ellos, Scioli y Michetti eligieron salvar el temor a la proximidad que el paso a la posteridad. Si se hubieran negado a ser usados como "caballitos de ajedrez" y reaccionado como Santiago Montoya, luego del temporal que se avecina, tendrían más próxima su "Arca de Noé".

Pero a ambos les faltó valor republicano e inteligencia política para enfrentar la tormenta. Y ambos serán presa de la política que los devorará como a los débiles que los escupe Dios.

Tuvieron la posibilidad de plantarse y se fueron al mazo.

Prefirieron la caricia de sus amos a la valentía que induce la crisis de crecimiento. Pasaron de la popularidad con proyecto a la obediencia debida de la mediocridad.

Y mientras tanto la otra oposición teje y amasa en silencio. Carrió y los habitantes de su vieja cuna, los radicales, piensan darle el zarpazo al neokirchnerista Mauricio y postular a Ricardo Hipólito López Murphy como primer legislador porteño bajo el "efecto locomotora".

Hasta el libelo dirigido por la S.I.D.E. y Verbistky, que aparece diariamente y termina con el número 12, le otorga al "el bulldog" como piso el 12% de intención de voto personal sin haber sido aún postulado.

Pero hora a hora de las que nos sucedan seguirán moviendo el tablero político.

De un lado y del otro.

Del lado de la pretensa tiranía y del lado de la libertad.

Nadie regala nada en la vida terrenal; menos aún en la miseria de la vida política que es un reflejo de la vida terrenal.

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