LUCHADORES SOCIALES ( POR OLMEDO ZUMARAN)

Luchadores sociales
Señor Director:
Nuestra sociedad está siendo arreada en primer lugar por un gobierno, cada segundo más soberbio que ayudado por adláteres que están a su servicio pretenden imponer sin ningún escrúpulo el incumplimiento liso y llano de la Constitución Nacional.
Hace ya más de cuatro años que el derecho de transitar libremente de la ciudadanía es violado por grupos minoritarios que con el argumento de que sus derechos han sido violados incendian comisarías, destruyen legislaturas y locales partidarios, cortan rutas nacionales, en una palabra han creado su propia legislación y cuando ellos consideran que sus derechos han sido conculcados la aplican según sus pretensiones y como se les antoje en ese instante.
Hemos asistido a una serie de hechos tan bochornosos donde quienes violan las leyes cometiendo todo tipo de desmanes son observados por los integrantes de las fuerzas de seguridad, cuyo papel se parece advertir, será solo éste en el futuro.
Los únicos castigados y juzgados son los malos policías pero quienes mataron al oficial Sayago y a tantos otros gozan de libertad. Pareciera que el policía es un hombre que lógicamente tiene que morir porque para eso está, para arriesgar su vida con el solo derecho de asistir a los lugares donde los delincuentes actúan a fin de garantizar que estos no sufran represión alguna, cobrando sueldos indignos, incluso más bajos que los de los docentes, en huelga.
¿Adónde nos quieren dirigir con esta política?
Si un grupo de padres toman los colegios pidiendo a los docentes que den clases o para dar clases ellos mismos a sus hijos y cumplir con el derecho constitucional a la educación, en segundos salen a la palestra periodistas y ministros acusándolos de activistas o de ser punteros políticos, contrariamente los grupos que destruyen legislaturas, cortan rutas nacionales o incendian comisarías son calificados por estos como luchadores sociales. La Argentina cuenta con 38 millones de habitantes.
¿Es posible que la mayoría crea estos dislates que nos quieren imponer a través de una gran operación propagandística a la que los medios no se pueden negar (a los informes de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) respecto a las restricciones a la libertad de prensa, me refiero) ?
Los principales puntos de esta operación son:
1) La mano dura, no disminuye el delito.
2) El delincuente es producto de esta sociedad capitalista que estimula la competencia y la individualidad a extremos alarmantes produciendo excluidos que luego se convierten en delincuentes.
3) Solo con educación, salud, igualdad en la distribución de la riqueza y seguridad se solucionaran los problemas.
Las respuestas a estos argumentos son los siguientes:
1) Lo que llaman Mano Dura, no lo és. Lo que se solicita es la aplicación del Código Penal en cuyo articulado se dispone la solución para estos conflictos.
2) La sociedad capitalista no produce delincuentes sino que estos se reproducen cuando tienen la certeza de que la impunidad es moneda corriente, sino revisemos en estos cuatro años el aumento de los delitos con esta política del laissez faire y comprobaremos que no ha solucionado nada.
3) No es casual entonces que al dedicar menos tratamiento en estos cuatro años a áreas esenciales como la educación, la salud, la distribución de la riqueza y la seguridad, la argentina viva un caos total en donde cada grupo hace lo que le plazca aplicando la ley por mano propia, la inversión extranjera directa haya disminuido notablemente y todo sea negativo, menos para las cifras que brindan los organismos oficiales cuya ausencia de objetividad no merece una palabra al respecto.
Alejandro Olmedo Zumarán
olmedozumaran@hotmail.com
Gentileza en exclusiva para NOTIAR