MAMÁ HEBE

Por Malú Kikuchi

En el mes de la madre, es pertinente recordar algunas frases de la “madre nacional”, esa que según declaraciones del presidente Kirchner ante la Asamblea General de la ONU, es la madre de todos los argentinos. Me apresuro a aclarar que la mía, NO.



Con cierta ingenuidad infantil, una tiende a creer que “mamá” es sinónimo de amor y de ternura. Pero, siempre hay un pero, las excepciones existen y mamá Hebe es una de ellas. Un mínimo resumen.



1999. “(Juan Pablo II) es un cerdo. Aunque un sacerdote me dijo que el cerdo se come, este Papa es incomible.”



2001, septiembre. (Torres Gemelas) “Sentí alegría, no voy a ser hipócrita, por primera vez les pasaron la boleta.” ¡Murieron 3000 personas! ¿Lo sabrá Obama?



2001, diciembre. “Nosotros deseamos que el Papa (Juan Pablo II) se queme vivo en el infierno.”



2003, mayo. (Aniversario de la muerte de Kosteky y Santillán)

“Vamos a iniciar la lucha armada, una revolución sin armas no es una revolución, ya lo dijo Fidel Castro.”



2004. (Museo de la Memoria). “Tienen que exhibir los fusiles FAL con que mis hijos quisieron hacer la revolución.”



2008, junio. (Resolución 125/conflicto con el agro). “Palos y gases al campo.”



2010, 28 septiembre. (En referencia a la Corte Suprema de Justicia de la Nación y sus miembros) “Son unos turros.” “Reciben sobres con plata.” “Vamos a tomar el Palacio de Tribunales.” ¡Cuanta locura!



Una madre tierna, dulce y conmovedora. La ternura la desborda tanto que le sobra para apoyar y defender a los zapatistas, a las FARC, a la ETA y a Al Quaeda. Todo terrorista tiene su bendición, ella no discrimina, el amor alcanza por igual a Lariz Iriondo, Arancibia Clavel y Galvarino Apablaza. Terroristas del mundo, el santuario argentino les ofrece refugio y una madre amante.



La disculpa ante el inverosímil y criminal discurso de mamá Hebe por parte del gobierno que proyectó, armó, promocionó y pagó (con dinero de los ciudadanos) el acto contra la Corte, se reduce a proclamar una defensa irrestricta a la libertad de expresión (Aníbal F), o a la repetida frase, “y, Hebe es Hebe” (Raúl Zaffaroni).



Vamos por partes. 1) La libertad de expresión es sagrada y debe ser absoluta. 2) La incitación al delito de sedición está penada por la ley, código penal artículos 209 a 213. Y son dos cosas diferentes. No hay libertad para atentar contra el orden constituido.



Dejando de lado a mamá Hebe, ¿qué es lo que no entiende el gobierno del primer artículo de la Constitución Nacional? “La Nación Argentina elige como forma de gobierno la representativa, REPUBLICANA y federal.”



La república se basa en la división de poderes y en la independencia de estos entre si. Los tres poderes forman parte del gobierno. El gobierno no son sólo los K. El gobierno son los K, más el poder legislativo, más el poder judicial.



Proponer tomar el poder judicial es tan destituyente como proponer cerrar el congreso o sacar de la Rosada a Cristina. Es golpista y absolutamente anticonstitucional. ¿Qué le pasa al ejecutivo y al resto del FPV? ¿No lo saben? Hay que condenarlos a estudiar educación cívica. Se empieza en la primaria.



En cuanto a eso de que “Hebe es Hebe”, o que está desquiciada, o que todos sabemos que dice cualquier cosa, no es una disculpa ante tanto disparate cívicamente inaceptable. Una cosa es decir disparates, a veces hasta puede ser graciosa de una manera feroz y tosca, y otra, es incitar públicamente y ante los medios a tomar uno de los poderes que constituyen la nación.



Si está desquiciada, que la mediquen y si está loca que la traten. Lo que no pueden hacer, y menos desde una tarima armada por el ejecutivo, es dejarla impunemente alentar una toma del Palacio de Tribunales, como si este no formara parte del gobierno nacional.



Además sería bueno recordarle a la tierna mamá Hebe, que esta Corte fue propuesta por Kirchner a quien ella defiende atacando a sus jueces. Acusar a los jueces de esta Corte de connivencia con el Proceso, en el caso particular de Carmen Argibay, supera el disparate.



La Corte no está actuando de acuerdo a los designios K, se está dando el lujo de fallar de acuerdo a derecho. Y como dijo Carlos Zanini, “a la Corte no la nombramos para esto”.



Este fenomenal zafarrancho fuera de toda lógica, se debe simplemente a que mamá Hebe y sus amados K, temen que la Corte les falle en contra del artículo 161 de la ley de medios que obliga, en el plazo de un año, a desprenderse de los activos que indica la ley.



Todo este dislate es en homenaje a la guerra declarada entre K y Magnetto. Clarín es el enemigo, todo vale. Atentar contra la Constitución, también. Que los ciudadanos estemos en el medio, a nadie le importa. Después de todo sólo mantenemos al gobierno con nuestros impuestos.



Volviendo a mamá Hebe, dueña absoluta de la verdad revelada, jueza inapelable, apologista del odio, ¿quién le da tanto poder? ¿Y por qué? Sería bueno saberlo. Votos, no tiene, estructura partidaria, tampoco. ¿Por qué es tan importante en el tablero político de los K?



¿Culpa? ¿La asignatura pendiente de no haber combatido cuando creían que debían hacerlo y el miedo se los impidió? ¿El exitoso pasado de militantes inmobiliarios mientras – se supone - los hijos de mamá Hebe combatían con sus fusiles FAL? Necesitamos saber.



Decía Honoré de Balzac, “jamás en la vida encontrareis ternura mejor que la de vuestra madre.” El gran novelista francés no podía imaginar, ¡y tenía imaginación!, que 150 años después, en un país perdido en el fin del mundo, existiría alguien como mamá Hebe.



¡Qué fenomenal novela hubiera escrito con un personaje así! A pesar de que Balzac no se dedicaba al género del terror.