MOCHILA BIPOLAR

UNA MOCHILA PESADA
Otra vez, Cristina se encontró con Tomada

2 conflictos seguidos, en menos de un mes y con un peso pesado en el medio. Luego de la "incapacidad" de Carlos Tomada para contener los delirios camioneros, el ministro de Trabajo vuelve a cargar la mochila: ahora, por el bloqueo a Clarín.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).- Preocupada por las repercusiones de los bloqueos a la planta impresora del diario Clarín y La Nación, en los sectores que más necesita Cristina Fernández para lograr una buena elección en octubre, la mandataria volvió a cargar la furia sobre el ministro de Trabajo, Carlos Tomada.

En la primera línea del gobierno afirman que el ministro de Trabajo no supo anticipar ni conducir el conflicto laboral que desembocó en el bloqueo del diario, según afirma el sitio 'La Política Online'.

En efecto, el propio ministro reconoció hoy en declaraciones radiales que la mandataria le exigió que “de inmediato” solucionara el conflicto. La intención, como hasta ahora: minimizar los costos electorales.

Pero, ¿cuánto puede costarle al ministro ser 2 veces el chivo expiatorio en cuestión de días? El anuncio del finalmente suspendido paro nacional de camioneros de hace 10 días llevó también a Cristina, entre molesta y preocupada, a ordenar a Tomada que disuadiera al jefe de la CGT de avanzar en una medida de fuerza que fue interpretada entonces como un abierto desafío a la autoridad presidencial.

"Arreglame esto ya", habría sido la orden de Cristina a su ministro, según publicó el diario 'La Nación' . Tomada no logró frenar a Moyano y sólo atinó a contestarle que estaban agotadas las vías de diálogo con el titular de la CGT.

En esta ocasión, internamente se concluyó que Tomada no supo prevenir la evolución del conflicto que llevaban adelante los empleados de Artes Gráficas Rioplatenses (AGR) y por ello es el máximo responsable del episodio de ayer. El propio ministro fue forzado hoy a asumir la responsabilidad y despegar a la Presidente.

“Hubo una orden de la Presidente que me instruyó ayer para que avanzara lo mas rápidamente posible para resolver el conflicto”, afirmó esta mañana Tomada, que fatigó las radios enarbolando el mismo eje discursivo. Explicó que se trata de un conflicto laboral, en el que ni el Gobierno ni Hugo Moyano tienen nada que ver, pero que igual la Presidente esta muy preocupada y quiere que se resuelva cuanto antes.

"Ayer mismo, apenas tomamos conocimiento del tema, intervinimos y convocamos a la reunión de hoy (al mediodía), lo que provocó el levantamiento de la medida", intentó defenderse Tomada.

Ayer por la tarde cuando el conflicto ya se había convertido en un escándalo internacional, fue el ministro del Interior, Florencio Randazzo, quien intentó despegar tibiamente al gobierno del bloqueo, reduciéndolo a un “conflicto laboral”. Y esta mañana, luego de un evidente análisis de los daños del episodio, el gobierno viró su discurso y mostró una inédita predisposición por solucionar el conflicto. Tomada fue el vocero de ese giro. Pero no sólo eso, también fue obligado a repetir ante las radios que la Presidenta lo “retó” por la demora en solucionar el tema.