martes, 5 de julio de 2011
LA NOVELA
ELECCIONES 2011
Cristina perdió en el Sur (y la novela de Rosaura)
Fabiana Ríos, gobernadora triunfante en Tierra del Fuego, dijo en Río Grande: "La sociedad deicidió por un camino, aún contra los que planteaban que la única posibilidad de crecer era siendo parte del Gobierno Nacional (obvia alusión al ministro Florencio Randazzo, para los festejos preparados por Rosana Bertone y el Frente para la Victoria). Sin embargo fue un acto de madurez su gesto democrático de ir a saludar a la sede del Partido Social Patagónico". El comentario provocó el siguiente análisis:
por HORACIO MINOTTI (*)
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Especial para Urgente24). Desde la elección del domingo 03/07 en Tierra del Fuego se multiplican las especulaciones periodísticas sobre si el Ejecutivo Nacional perdió o no la contienda. Pero es obvio que se produjo una derrota del oficialismo nacional.
La multiplicidad de opiniones sobre las consecuencias de la elección fueguina, su impacto nacional, quien ganó y quien perdió en el sur, parece no tener sentido. Es cierto que la actual gobernadora, ya reelecta, Fabiana Rios, en un satélite de la Casa Rosada. Pero no lo es menos, que esta situación se basa exclusivamente en la necesidad de Rios de llevar adelante un gobierno con fondos suficientes (lo acaba de explicar Carlos Verna al renunciar a su candidatura a gobernador de La Pampa), y no porque exista ningún tipo de identificación ideológica o metodológica con el Gobierno Nacional.
Por eso se presentó una fórmula oficialista pura con el fin de vencer a Rios, encabezada por Rosana Bertone, kirchnerista de Kirchner de la primera hora, quien le planteó pelea a Rios, y el equipo de la Presidente trabajó arduamente por arrebatarle la gobernación al Partido Social Patagónico.
Cuando el kirchnerismo considera a uno de sus satélites como “definitivamente cooptado” se comporta distinto.
Veamos: el gobernador radical de Rio Negro, Miguel Saiz, es de la UCR, pero es mucho más kirchnerista. Así lo asumen los K. Por eso, cuando el presidente de su bloque de senadores Miguel Pichetto, intenta concretar su eterna ambición de ser candidato en esa, su provincia, el kirchnerismo lo boicotea, no lo acompaña, lo anula. ¿Para que cambiar si ya está Saiz?
Sin embargo, a Fabiana Ríos se le presentó una fórmula alternativa para disputarle la gobernación con mucha presión, y fue porque no la consideró cooptada.
Es más: en la semana entre la 1ra y la 2da. vuelta electoral en la provincia austral, Cristina no recibió a Rios sino a Bertone en Casa de Gobierno, en un gesto que intentó desequilibrar la elección, mostrando claramente su preferencia (además Cristina cree que ella cuenta con una popularidad suficiente como para garantizar triunfos, por ejemplo en Tierra del Fuego).
Que el volátil Florencio Randazzo haya cambiado de destino y pasado a saludar a Rios el domingo por la sede del Partido Social Patagónico, cuando había viajado para festejar con Bertone, es una sandez de politiquería económica y no una demostración de que ambas candidatas le daban igual a la Rosada. Randazzo llegó con Bertone, demostración que estaba con el Frente para la Victoria siguiendo el conteo.
Tampoco Cristina influyó en el armado de la fórmula de Rios. Pero sí lo hizo en la de Bertone, en la que colocó como vicegobernador a un militante de La Cámpora, tal como hizo en cada fórmula o lista en la que influyó y apoya.
Por ende, claramente, la del domingo fue una derrota oficialista, que se inscribe dentro de una seguidilla complicada: el domingo 10/07 ganaría Mauricio Macri en la capital federal, luego José Manuel De la Sota en Córdoba, el socialismo en Santa Fe, la 2da. vuelta en la capital también sería una derrota para el Frente para la Victoria, y todo como prolegómeno de las primarias del 14 de agosto. Para un efecto dominó, todo dispuesto.
Rosaura enamorada
La presente es una historia de ficción, y cualquier semejanza con la realidad es pura coincidencia. Rosaura Bertotti era una mujer enamorada. El hombre de sus desvelos era nada más y nada menos que Juan Carlos del Fire. Ya había intentado enamorarlo hace unos 4 años, y una cámara fisgona la reveló en un renuncio, hizo estragos en su estrategia y fracasó.
Pero su amor fue más fuerte y volvió a intentarlo. Para eso fue a pedirle consejo a su amigo Cristóforo Lopeste, quien le conto un viejo adagio coppoliano: “billetera mata galán y también galana”, y le habría entregado cuatro millones de unidades de moneda extranjera para que proceda a la conquista, convencido de que así lo lograría. Posiblemente no haya sido el único inversor en la cruzada romántica, pero seguro que fue el más importante.
Todo indica que Rosaura invirtió mal. O que su avaricia venció a su amor, porque la inversión en la conquista de del Fire, no se lució, casi no se vió. Tanto que el pobre Cristóforo está enojado. Su adicción al juego no lo ciega para ver que el destino de su aporte no puede observarse en la gesta amorosa. Ahora Rosaura no solo perdió a su amor, también debe rendir cuentas con Cristóforo.
Moraleja: el amor y la avaricia son como el agua y el aceite, nunca se juntan.
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