VERDADES....

Verdades Absolutas –

Verdades Relativas



La opinión de Gustavo Oscar Colla invita a reflexionar:





El kirchnerismo ha inventado una espectacular formula para zafar de cualquier discusión: el de las “verdades relativas”. Si Ud. demuestra a través de la lógica o de los hechos que la verdad esta de su lado, ellos le responderán que tienen su propia “verdad relativa”, con lo cual siempre tendrán razón y obraran en consecuencia, justificando de esa manera sus procederes.



En la ya “histórica” discusión entre Animal Fernández y una modelo/vedette/botinera que le canto frente a las cámaras todas las verdades de “doña Rosa”, el inefable espadachín K ensayo como argumento de defensa, que ella tenia derecho a expresar sus “verdades relativas” o los que el, a su vez, el tenia derecho a oponer sus propias “verdades relativas”. Si las verdades fueran relativas, no habría discusión posible, ni siquiera para diferenciar un caballo de una mesa. Alguien puede decir que si tiene cuatro patas y relincha es una mesa y esa sera su irrebatible “verdad relativa”. Según esta lógica kirchnerista pueden haber tantas verdades, como opiniones haya sobre un punto.



Negar la existencia de la ”verdad absoluta” es contradictorio. Si asimilamos el vocablo verdad a certeza, afirmar que no existe la certeza absoluta, es afirmar algo con absoluta certeza. O sea que existe la verdad absoluta. El problema es que da mucho trabajo encontrarla. La filosofía en su terreno y la ciencia en el suyo han trabajado a destajo a través de la historia en la búsqueda de “la verdad”, que a veces aparece, permanece un tiempo y luego es reemplaza por otra. Pero esto no invalida el acuerdo que los racionales otorguemos al concepto de verdad. Claro que, ni la filosofía ni la ciencia, podrían haber jamas imaginado que en una lejana comarca llamada Argentina aparecerían innovadores de la aritmética, del lenguaje, de la historia y de todo lo que se cruce, que acomodarían todo el orden universal a sus deseos, sus caprichos y sus gustos, mediante un simple recurso: “las verdades relativas”. Lo que es decir que hay tantas verdades como seres humanos en el planeta, incluyéndolos a ellos, por supuesto.