PISTOLITA DE JUGUETE

Castellanos - 27-May-10 - Opinión

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Enfoque
El peligro de las represalias

por Ricardo Medrano
ricardo.g.medrano@hotmail.com

Los grandes cerebros que rigen los destinos del país por estos días no paran en su empeño por demostrar que años y años de prueba y error en materia de economía pueden ser descartados por el simple empeño de insistir una vez más con lo mismo.

Las decisiones tomadas por la mente privilegiada del secretario de comercio interior, Guillermo Moreno ha dado cuentas de su impecable promedio, todas y cada una de sus medidas terminaron en estrepitosos fracasos.

Si algo hay que reconocerle al fiel lacayo es su estoica perseverancia, ya que ante el fracaso contínuo no se amedrenta y continúa destruyendo mercados y ciclos productivos de forma indiscriminada. Moreno es el responsable directo de los serios problemas que experimenta la cadena productiva agraria, con tambos que cierran, con ganaderos fundidos y con agricultores ahorcados; es el responsable de la destrucción del INDEC, que no es hoy sino la sombra de lo que supo ser, remplazó a los técnicos por acólitos y a partir de ahí, no hay inflación, la desocupación disminuye y la indigencia es un mito.

Argentina pasó de ser uno de los mayores productores de carne del mundo, no sólo en volumen, sino más importante aún, en calidad, para convertirse hoy en un país que tiene serios problemas para abastecer el mercado interno y que incumple sistemáticamente sus contratos internacionales, como es el caso de la cuota Hilton.

La ultima incursión de Moreno en esto de la heterodoxia económica es el cierre de las importaciones alimenticias, que a su entender tienen equivalencias en el mercado local, generando con esta medida importante malestar en nuestros socios comerciales.

Welber Barral, director de comercio exterior del vecino país, aclaró que "la posición de Brasil siempre es de dar reciprocidad", y teniendo en cuenta que el país exporta a Brasil mercadería por 2000 millones de dólares e importa por 500, resulta más que evidente, quién termina perdiendo con la flamante idea del secretario de comercio interior.

A Moreno se le pueden imputar múltiples despropósitos en estos años de gobierno, pero no hay que olvidar que no es más que un fiel soldado, que responde y reporta a su jefe supremo, Néstor Kirchner, verdadero y único culpable de la mayoría de los males padecidos por estos días por el país y la gente que lo compone.

Al parecer China y su negativa a seguir comprando aceite de soja es sólo la punta del iceberg, las cosas sólo pueden empeorar en este período en que se apela a las medidas populistas y de corto plazo, arriesgando en el proceso el futuro de todos.