miércoles, 1 de agosto de 2007

BONASSO : FUTURO IMPUGNADO

La última intérprete de nuestra Constitución es la Corte Suprema de Justicia y es el estamento esencial de la división de Poderes.

Hoy se encuentra a punto de avalar que el electo diputado Luis A. Patti estaría en condiciones de asumir la banca de Diputado, para la que los bonaerenses (casi 400.000) lo avalaron.

No fue impugnado ante la Justicia electoral y sólo el "mesianismo" del diputado Bonasso impidió que ejerciera el mandato legítimo determinado por la voluntad Popular.

Ya se habla de no acatar lo que la Corte determine y recurrir a Organismos Internacionales (por ejemplo la Corte Interamericana de Derechos Humanos) para "resistir" al máximo Tribunal Argentino.

Para "cogote" Bonasso con seguridad la Constitución Nacional es equiparable a una novela argentina, despreciada y aplicable a su conveniencia. Por ella se ocupan bancas lo que parece haber olvidado.

Miguel Bonasso es quien se quedó sin partido (el de la revolución democrática) por disposición de la Camara Electoral, que le quitó personería por falta de afiliados.

Si bien no afecta su mandato, representa a un partido que no existe; es decir: no representa a nadie.

Seguramente convocó a una convención de sus afiliados dentro de un locutorio o una cabina telefónica, para "levantarse" contra el supuesto fallo de la Corte.

Es tropa del kirchnerismo y "suena" como candidato a diputado por la Capital en los próximos comicios. Como diputado actual se lo ha visto en muy pocas sesiones, salvo la "teatral" de impugnar a Patti, tomándole el pelo a millares de bonaerenses, logrando rechazar el pliego.

Es un gran oposicionista por su ambivalencia de opiniones y no entiende que la soberanía popular lo supera a él y a la propia cámara que integra.

Ya impulsa el conflicto de "Poderes", siendo autor de un proyecto que adjudica "muerte civil" a denunciados con causas o "sospechados" de crímenes de lesa humanidad, que los inhabilita para cargos y funciones públicas.

Se ha olvidado de su "Diario de un clandestino", donde se jacta de su dempeño en inteligencia de Montoneros (igual en "El presidente que no fue").

Reconoció que el error de su organización fue matar a Rucci, líder de la CGT (fiel a Perón) y no a López Rega.

Es decir, Bonasso reconoce haber integrado una asociación ílicita (en democracia) formada para matar personas, lo que no lo exime de "crímenes de lesa humanidad".

Está en libertad por indulto de Menem.

Su libro "Recuerdos de la Muerte" tiene "olvidos".

Los ciudadanos deben recordar de impugnarlo apenas se oficialize su candidatura y es una pena que quienes votaron a Patti no lo hayan demandado por daños y perjuicios por el solo hecho de haberse reído de su voto, de su domingo alterado, de su traslado a votar, de los gastos en tren, colectivo o subte, etc.

Que la justicia sea pareja para todos.

Saludos

2 comentarios:

Anónimo dijo...

----- Para entender la postura de Bonasso hay que realizar una operaciòn simple, la cual siempre le aconsejo a muchos amigos peronistas:

Consiste en esperar la noche, que la familia se acueste y, una a vez a solas, con solo una vela sobre la mesa, sentarse a pensar que carajo quiere decir "Justicialismo". Esta palabra tine su origen en una frase de Arturo Sampay, Fiscal de Estado del gobernador Domingo Mercante (1946-50) y que fuera encarcelado luego de que aquel terminara su mandato, al igual que casi la totalidad de su gabinete.

La frese era " Debemos transformar el Estado de Derecho en un " Estado de Justicia". Esto significaba que las leyes deben ser justas, pero fue interperetado como que habìa que abandonar el imperio de la ley para hacer justicia en cada caso particular, tal como sucedìa antes de la ley de las doce tablas, en el Imperio Romano. Ante cada hecho concreto no hay ley anterior sino que el gobernanmte (rey, pretor, concul, Etc. decide que resulta justo en cada caso concreto. Em Roma, 300 años antes de Cristo advirtieron que esto no permitìa a los ciudadanos saber cual era la conducta que debìan tener, pues siempre era el gobernate quien, llegado el caso, resolvìa que era lo justo. Y entonces decidiero hacer leyes y estas fueron las Doce Tablas . El Justicialismo nos propone volver a esa època en la cyual los ciudadanos no sabìa si lol que hacìan estaba bien o mal porque esto recièn lo resolverìa el gobernate cuando hubiera un conflicto.

Lo grtave es que el Justicialismo como idea trasciende al pèronismo y encontramos muchos argentinos que, sin ser peronistas, piensan de la misma manera. Si al momento de aplicarse nla ley la soluciòn no es la que nos parece justa la ley no debe aplicarse. Esta es la clave de todos nuestros males. Si juan le pide plata a poedro y no se la puede pagar, al moemnto del vencimiento veremos que si Pedro es rico y juan perderà su casa, que pedro se joda y no cobre la deuda.

La Argentina no tiene salida alguna, al menos dentro del sistema que nos rige, sin conntinuamos sin aclarar que es el Justicialismo y si eso es lo que queremos en realidad.

Por eso no importa lo que diga la Corte Suprema. Si eso nos resulta injusto, nosotros, que gobernamos, haremos nuestra justicia-



Jorge Gustavo Karakachoff.

Anónimo dijo...

Felicitaciones por el excelente editorial !!!
Gran verdad lo que Usted dice de Bonasso y desde ya, al ex-montonero y a sus compañeros les espera que el indulto de Menem les sea anulado a ellos también y luego comparecer ante los jueces y ser juzgados por su actuación y crímenes.
Hasta que eso no ocurra este país no se podrá llamar Republica Argentina.
Atentamente.
SERGIO ANTONIO GRACIANO