martes, 14 de agosto de 2007

KIRCHNER: CREE EN DÍOS????

Los que creen en Dios creen por cierto en la pluralidad y en las divergencias ideológicas, pero de los discursos a la realidad hay un muy largo camino. Los discursos no sirven diría para nada mas que para apelar al “alma” de las personas. El tono de la voz suele ser en la mayoría de los casos muy enérgicos, casi como para “autoconvencerse” que las cosas son como se dicen.

La experiencia que hoy tenemos de como es el Sr. Presidente nos demuestra exactamente lo contrario. Dios no distingue entre derechos humanos de derecha y de izquierda, todo lo contrario. Dios acepta la pluralidad ya que sabe que cada ser humano es un “ser especial” un “ser único” y como tal puede pensar de una forma o de otra. Creo que el Dr. Kirchner actúa de una manera muy contraria a lo que pretende decirnos con esas lindas palabras.”Pluralismo” es aceptar a los que tienen ideas diferentes y lo que nos ha demostrado es una constante demostración de que son solo “palabras vacías de verdad”, casi despreciando a los que no piensan como él.

Cuando el Dr. Kirchner se refiere a las “divergencias ideológicas” vemos también que tampoco ello es cierto. Siempre esta abrazado a las “Madres de Plaza de Mayo” - ello no tendría ninguna importancia porque son una realidad de la vida política en Argentina y nada nos debe asustar-, pero jamás ha abrazado a la madre de un soldado, de un militar, que haya sido víctima del accionar de los grupos de “jóvenes idealistas” que mataron a mansalva,tampoco, a las madres de empresarios, gremialistas, hombres de la Justicia y de la prensa también asesinados por aquellos.

No nos hacen falta los discursos altisonantes así como tampoco es necesario que escuchemos esas palabras. Lo que realmente necesitamos todos los argentinos es, que desde la más alta cumbre del poder , esas palabras sean realmente una realidad. Comprobar que los discursos no se compadecen con la realidad constituyen un verdadero descrédito para quien conduzca en este caso los destinos del país.

Obviamente no seré yo quien lo juzgue y quien tenga derecho a hacerlo. Es una simple reflexión y/o análisis del discurso presidencial.Será Dios por cierto ante quien deberá rendir cuenta de sus actos. A los hombres es fácil engañar no así a Dios que lee nuestras mentes.Uno de los diez mandamientos es: NO MENTIR.

Autor: Dr. Francisco Bénard
Abogado y Periodista

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