TILINGA NO CONVENCE

SIN NÉSTOR, AL FPV LE VA MEJOR

El efecto “Cristina ya ganó” avanza en las urnas pero no convence a los mercados

Por Guillermo Cherashny

Desde esta columna criticamos reiteradamente a los encuestadores pagados por el gobierno que inflan los números sosteniendo que CFK ganará en primera vuelta. Pero no es menos cierto que luego de la muerte de Néstor Kirchner se produjo en la sociedad un fenómeno cuyas consecuencias recién se empiezan a vislumbrar ahora. El ex presidente se llevó a la tumba gran parte o casi toda la mala imagen del gobierno nacional y, coincidentemente, la corrupción desapareció de la agenda política argentina. La victimización intentada con éxito por la Presidente tuvo también entonces otro efecto, que fue dejarla al margen de los cuestionamientos por corrupción que golpeaban a su marido -y a ella misma- hasta que aquél falleciera.

Además, hay que tener en cuenta que la asignación universal por hijo tiene un efecto demoledor en provincias chicas como Catamarca. Tan es así que el Frente para la Victoria, desde la intervención al PJ de Ramón Saadi, obtuvo en las sucesivas elecciones alrededor de 45.000 votos. Pero el domingo, el kirchnerismo superó holgadamente esa cifra. En este punto es donde se siente el efecto de las 56.000 asignaciones universales por hijo en una provincia donde hay muchas familias numerosas. También hay que apuntar a los 20.000 nuevos votantes que en gran parte se inclinaron por el Frente para la Victoria.

Los bemoles de la reelección

Ahora bien, proyectar automáticamente al orden nacional el triunfo del FpV catamarqueño sería bastante exagerado. No parece haber duda, en cambio, de que CFK tiene un piso sólido de intención de voto apenas superior al 30% y le llevaría más de 20 puntos de ventaja a cualquiera de los otros candidatos. Esto la coloca ante una situación inmejorable para obtener el 40% sin que el segundo llegue al 30%, siempre y cuando la oposición no termine concentrándose en una sola fuerza.

Lo sucedido en Catamarca tal vez incentive las dificultades para una convergencia entre el Peronismo Federal y el PRO. Mauricio Macri no termina de decidirse si se lanza como candidato presidencial o por la reelección como jefe de gobierno. Pero la decisiva influencia de Durán Barba se está volcando a favor de que baje a la Ciudad. Este consejo parte de la prevención de que CFK puede ganar en primera vuelta, lo que le haría redescubrir a Macri el interés por quedarse en la Ciudad y esperar cuatro años más, ya que es un político joven.

Donde no cayó bien el “efecto Corpacci” es en los mercados locales, especialmente en los bonos de la deuda externa en pesos, que hace una semana que no dejan de caer, influidos por el cierre de las exportaciones. Ahora también caerían porque, si CFK es reelecta, va a tener serios problemas para pagar sus compromisos externos, que ya los tiene cubiertos por todo este año 2011. El año próximo los subsidios a la energía y el transporte van a entrar muy probablemente en crisis, porque no alcanzarán los dólares para importar energía o subsidiar el gas oil. Por otra parte, si continúa el cierre de importaciones, el país está en peligro de default, aunque sólo tenga un 24% de su PBI como deuda externa. El broche de oro de este cuadro de riesgos es que el dólar a 4 pesos aguanta este año, pero no el 2012.