INSÓLITO FESTEJO Y APUESTA DE RIESGO

UNA APUESTA DE RIESGO -EL INSÓLITO "FESTEJO" KIRCHNERISTA.
Por Ignacio Fidanza
La cuenta es sencilla, Mauricio Macri esta a 5 puntos de ganar la segunda vuelta. Más del 45 por ciento lo votó cuando había 18 fórmulas para elegir. Difícilmente, esa porción del electorado, ahora que las opciones se redujeron a dos, elijan al candidato de la Casa Rosada. Entonces, para superar el 50 por ciento que fija la Constitución porteña, Macri sólo debería agregarle a su cosecha del domingo un poco menos de 5 puntos.No parece una proeza desmesurada –y por el contrario- cuesta imaginar que al menos uno de cada cuatro votantes de Jorge Telerman, no termine optando por la opción opositora que encarna Macri. Con eso ya le sobra para ganar.Del otro lado el gobierno necesita para imponerse subir unos 27 puntos en poco más de tres semanas. Daniel Filmus es según Néstor Kirchner “un tractorcito”, que fue subiendo a cuentagotas, pero con constancia. Bueno ahora hace falta un avión jet. Para alimentar sus turbinas, el gobierno parece decidido a nacionalizar la campaña porteña y se redoblarían las apariciones de Néstor y Cristina Kirchner junto a Filmus, así como la de otros destacados miembros del gabinete nacional, y del vicepresidente Daniel Scioli. Un anticipo de esta algarabía se vivió ayer en el Hotel Panamericano, cuando Cristina Kirchner y Scioli saludaron desde el balcón junto a Filmus, en una extraña celebración de una aplastante derrota electoral por más de 20 puntos. Microfísica del poder que concentró la mirada en el odio a Telerman y se perdió la inmensa postal de la paliza sufrida, expresada en esa inmensa masa de votantes que votó a Macri, quien por discurso, estética y compañías, representa lo opuesto al kirchnerismo.Curioso destino el kirchnerista que desde su misma génesis nacional, protagoniza extraños festejos en torno al 20 por ciento de los votos, como si fuera la expresión de una arrolladora tendencia social.En este marco, con su derrota Jorge Telerman tal vez haya realizado un aporte impensado a la construcción de una alternativa opositora de tipo nacional. Corrido de la cancha, ahora más que nunca la pelea aparece con esa pureza que tanto encandila a sociólogos como Torcuato di Tella. Un candidato de la nueva centroderecha, frente al flamante centroizquierda que dice encarnar el kirchnerismo.Habrá que ver si la gente compra esta escenificación de laboratorio. Pero lo que sin dudas quedará claro con la nacionalización, que se dispone a cristalizar la Casa Rosada con entusiasmo, es que el próximo 24 de junio la pelea será entre el gobierno y la oposición. Y esto tal vez lleve a la gente a cargar en la cuenta de Filmus, flancos de la Casa Rosada como ser, denuncias de corrupción, problemas de transporte, cortes de luz y gas, inflación, inseguridad y otras cuestiones que se suelen atribuir al “gobierno”. Corrido Telerman, no hay distorsiones posibles, en la búsqueda de responsables por las calamidades que diariamente sufren los porteños.Cuesta entender entonces, como una probable derrota que amenaza con convertirse en paliza, puede representar una ventaja para el gobierno, a sólo tres meses de la crucial elección presidencial. Basta recordar la brutal onda expansiva del fracaso en Misiones –que exigieron el sacrificio de dos gobernadores, Felipe Solá y Eduardo Fellner-, para imaginar los efectos posibles de un fracaso en la vidriera del país.A veces, en política, una oportuna retirada es la única salida para asegurar el objetivo de fondo. La voracidad no suele ser buena consejera.