Contradicciones de nuestra política internacional
He estado esperando que alguno de nuestros ilustres políticos opositores salga a la palestra para cumplir la función que una nada desdeñable acumulación de votos les otorgó. Pero están en otro...no sé en cual.
Hace poco la Cancillería informó que insistirá en la próxima etapa de negocviaciones comerciales conocidas como la Ronda de Doha con los mismos pedidos y ofrecimientos que llevó a la primera etapa. O sea que pedirá a la Unión Europea y a los Estados Unidos que rebajen sus subsidios a la producción agraria y los aranceles sobre su importación, recibiendo como contrapartida nuestra una reducción del 50% de nuestros aranceless sobre los productos industriales que importamos.
Como actualmente la exportación nuestra de carne está limitada a una cantidad que tenderá a disminuir mas que a aumentar,
la exxportación de lacteos está de hecho paralizada y la exportación de trigo tambièn limitada, el campo no podría aprovechar ninguna ninguna de las reducciones de subsidios y araanceles que se piden salvo para la soja, sobre la cual pesa un gravamen a la exportación que supera ampliamente todos los aranceles a la importación que encontramos del otro lado. En resumidas cuentas al reducir a la mitad nuestros aranceles sobre productos industriales estaríamos perjudicando a nustra industria sin beneficiar para nada al campo.
Equivaldría a trasladar a la industria las consecuencias de nuestras malas políticas agraarias, que a su vez tendrían que volverse aún más rapaces, ya que el 50% que se perdería en la recaudación aduanera sobre productos industriales importados tendrían que ser compensados con un aumento de retenciones sobre exportaciones agrarias
Roberto Roth
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