domingo, 1 de marzo de 2009

LAS ARENGAS


Amigos:Acabo de leer y reenviar, dos excelentes artículos.El primero de Eduardo Castro, poniéndo al desnudo el plan de los K, en miras de conducirnos a la colectivización & sovietización del sector agrario.El segundo de Fernando Lema, en el que describe la decadencia de nuestra Nación, conjugada con episodios cotidianos que hacen al todo.Vibrantes plumas, tanto como la de Dante Calori, que suele ilustrarnos a diario sobre los aspectos determinantes, que motivan a esta gavilla del gobierno en sus inalterables y secuenciales tropelías.Todos ellos, junto a muchos otros como Cosme Beccar Varela Daniel de Urquiza y Carlos Manuel Acuña entre tantos, en cuyos mensajes advierto un sincero Patriotismo.En la medida de mis posibilidades, trato también de seguirles el rumbo.Pero ¿que sucede con la mayoría que recepta estas arengas?.Ese es el verdadero dilema.Lenta pero inexorablemente, este gobierno de pandilleros, que manejan el Erario Público, como si fuese de su exclusiva propiedad, tratan denodadamente, no de seguir robando, ya que cuentan con más de lo que pueden gastar sus choznos, sino de insistir en una desenfadada provocación.No están interesados en sostenerse en el poder, porque el coadyuvante natural para ese propósito se lo brindan en una charola de plata nuestros propios conciudadanos.Pero como decía Yrigoyen, con ese lenguaje indescifrable, llamado krausismo, adentremonos en las efectividades conducentes (¿?).Los K, en una melodía típica de la escuela stalinista, pretenden capturar el mercadeo granario.Cuando se estaba tratándo la 125, les advertí a todos los que leían mis notas, que el avasallamiento con la formidable herramienta de las retenciónes, era ni más ni menos que la vuelta al Iapi peronista de la década del cincuenta.No recibí ni comentarios ni adhesiónes, pero seguí adelante.Luego, para sacudirlos un tanto de esa somnoliencia colectiva remití otro correo: El Funeral de la Agricultura.Las constancias obran en Internet, merced a la bohonomía de entre otros el Lic Scolaro, El Ojo Digital, Corrientes Noticias y algunos otros prestigiosos medios on line.Allí se encuentran aún, según creo, tan sólo con pulsar el nombre de quien suscribe, en el buscador de google ó yahoo.Pero, por lo que veo, estas apóstrofas advirtentes, naufragaron en el olvido y la indiferencia de casi todos, incluyéndo a mis propios amigos.He descalificado y obviándo el pretérito, aún lo hago, a esta malhadada Mesa de Enlace.Ahora tibiamente comienzan a desayunarse de algo que resultaba ser más que previsible.Es apremiante observar, como ignoran la forma de gestionar adecuadamente, a un sector que es el motor mismo de nuestra economía, y lo penoso de ver en una actitud mendicante, como concurren a los ciclos televisivos, a reiterar fórmulas de solución que no implementaron en su momento, cuando las cosas no habían llegado demasiado lejos.Salvo un valiente Alfredo Guarino de Canal Rural y un solitario Héctor Huergo, nadie más ha puesto en evidencia lo que esta crapulosa maniobra del gobierno mantenía en ciernes, desde sus cimientes, de lo que ahora, todos parecen empezar a palpitar en sus bolsillos.Pero el embravecido desenlace de una tormenta perfecta, está a la vuelta de la esquina.Trataré de proceder a la apertura de los dos acápites, que a mi modesto entender, son los vectores de algo que detenible y previsible se está tornándo en una meridiana realidad.Los eventos que podemos releer a los largo de la historia del hombre, sin importar el punto geográfico ó cronológico que seleccionemos, se desencadenaron con más ó menos violencia y derramamiento de sangre, conforme la reacción haya sido pronta ó retardada.La Revolución Francesa, conocida como El Reino del Terror, tuvo un epicentro de inusitada violencia porque la Carta Magna y cuna de las constituciónes que hoy nos rigen a todos, se había producido seis siglos antes en la Inglaterra de Juan Plantiginet.El freno a los absolutismos monárquicos, los británicos los manejaron con mayor soltura y sin tanta violencia.Ese retardo en quitar los privilegios fue el detonante para que una burguesía famélica decapitara a Los Capeto, precisamente por los excesos de una casa reinante que no advirtió que la rueda de la historia los pasaría por arriba.Salvándo muy respetuosamente las distancias, aquí enfrentaremos algo similar.Porque los K son, aunque parezca algo irónico equipararlos, una reedición berreta de María Antonieta y su cornudo e impotente Luis XVI.Las circunstancias y los personajes no son muy diferentes.Claro que esta negra marca Puloil no es austríaca, ni recibió los privilegios de educación de aquélla.Y que su esposo, no es incapacitado sexual, sino un invertido.Pero la esencia tiene peligrosos claroscuros de identidad.Cuánto más permanezcan los K en este omnímodo poder, más crecerá el fermento de una solución traumática y acaso desproporcionada.Debo aclarar, empero, que esta es una suposición de mi parte, que no transita por otro andarivel que el de un mero anhelo.¿Porqué?Es una buena autopregunta.Con escuchar a esta "sangre nueva justicialista, en la figura de Solá, que ahora dice lo que calló con una abultada complicidad durante décadas, mientras acompañaba al "Turco" en el desmantelamiento del Estado, como luego lo hizo con el "cabezón" y con el propio Néstor, me sobrevienen las dudas que una reencarnación de Maximillien Robespierre, elija algún cuerpo con filiación argentina.Este truhán que ahora se arrima al Campo por una mera conveniencia electoralista, es otra muestra más de la hipocresía dirigencial.Su desfachatéz es de tal calibre, que no se anima a imputar a los K, simplemente se conforma con decir que se miente un poco.Si repasamos la lista de esa "nueva savia republicana" con Reutemann, que tiene la apatía de lo que es: un suizo que parlotea el español.Si dirigimos nuestras miradas hacia el "Alberto", hermano del "Adolfo", quien no soportó una mera amenaza de muerte de Duhalde para abandonar la presidencia en Chapadmalal, a 48 hs de asumir el cargo, ya no me interrogo sobre las causas de esa anomia colectiva de mis semejantes.Simplemente me pregunto: ¿Cuánto hace falta para que nos citemos en la Plaza de Mayo para exigir simplemente que estos hijos de mil putas le rindan cuentas a Dios y nuestra Patria? Cordialmente Lucio Catano (h).-

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