GUERRA CIVIL

LOS BORDES FÁCILES DE UNA GUERRA CIVIL
Por el Lic Gustavo Adolfo Bunse (21 diciembre 2011)

“Cuando yo me quede sola
sin el ladrón nacional….
puedo copiar su libreto…
y seguir… haciendo el mal

y… como yo lo interpreto…
con la fractura social…
a la República en llamas…
será fácil … regresar.. “
H. M. Alsace.



La renuncia absoluta a la potestad coercitiva del uso de la fuerza para el control del orden público, en un país fracturado como la Argentina, … es una salvajada histórica de la mujer que nos manda.

Realmente, hay fundamento para preguntarse si está en su sano juicio

Si después de un episodio como el de Villa Soldati, decide la extravagante medida de avisarles a todos, que no se aflijan porque la policía va a actuar sin armas, entonces uno tiene derecho a sospechar.

Después de la cena…. consumirá algún producto químico ?

Cualquiera sabe muy bien que si esto se expande en el país… con otros episodios trágicos similares, … inmediatos o no, puede nacer el estigma simple de una guerra civil.

Puede parecer esto, una exageración para quienes transitan la penuria cotidiana sin otra información que la conocida por los medios oficiales.

Pero el clima que se advierte, vinculado con estos graves hechos, en el contexto de una conducta personal de instigación a la fractura social asumido por esta mandataria sin cerebro, tiene claramente dos facetas, ya muy visibles :







a) El acercamiento veloz a la ruina moral de la sociedad argentina

b) El clima sombrío de venganzas, odios y enfrentamientos cerriles con un pronóstico muy claro de caída… hacia un escenario mucho peor.

Es tan grave lo de Soldati… que cabe preguntarse si la Jefatura de Estado lo tenía estratégicamente previsto entre los hechos posibles o no, en el marco de los supuestos implícitos de la seguridad nacional.

Si acaso lo tenía previsto, entonces la irresponsabilidad mayúscula más evidente y clara, se puede ver en el hecho inconcebible de considerar que no hay delito en las usurpaciones

Si no lo tenía previsto, estamos pues, sin dudas, en manos de una cáfila de aventureros cuya únicas herramientas “disponibles y preparadas” deben ser las ambulancias del SAME, sólo para recoger los cadáveres a su debido momento y por estricto orden de aparición.


Pendula …ahora mismo… esta mujer, instigadora primaria de la fractura civil… entre las siguientes opciones, para calcular cual ha de ser la peor :

A) Que se repitan estos hechos en cadena hasta límites de desastre.

B) Que aparezca otro episodio similar y tengan la justificación de adelantar las elecciones.

C) Que puedan inventar una hermosa conspiración siendo ella (encima de viuda) una víctima inocente.

Sin dudas cualquiera de las tres opciones tiene no menos de media docena de variantes que se han de desprender del “cómo”, del “cuándo”, y del “dónde”.

Quedó demostrado que ella necesita urgentemente a alguien para echarle la culpa. Y los uniformados, los periodistas y los candidatos a presidente son sus blancos predilectos para ese menester.






Son excelentes sospechosos y fáciles de culpabilizar de antemano por parte del Gobierno, aún sin que nadie sepa todavía un bledo del asunto.

La hipótesis ya está hecha.

El enfrentamiento civil, como histórica consecuencia del precolapso moral de una sociedad y como hijo putativo de una República con sus instituciones demolidas,… a veces ni siquiera necesita tanta instigación por parte de una gobernante inescrupulosa y transida de odio.

Un simple hecho puntual y rodeado de cierto misterio y señales confusas, puede poner en marcha a todas las fuerzas del hartazgo dormidas.

Y todos los que se han sentido llevados, mudos y silenciosos, como ovejas al matadero, sean del color ideológico que sean, puestos en su límite final de odio mutuo, acaso quieran dirimirlo todo del modo más trágico y violento. En frente tienen ahora… a un Estado desarmado.

Y a una depredadora que prefiere equipar a la Gendarmería y a las fuerzas policiales con bastones y cuchillos tramontana.

El colágeno le obstruyó la única neurona que traía en muletas.

Básicamente porque ya ha sido instalado desde el Gobierno el síndrome de hacer justicia por mano propia… y luego quedar impune o ser premiado con algún cargo público como el delincuente Salvatierra.

Acaso ya esté asumido por la sociedad y por eso forma parte del paisaje desértico en la kermesse de las instituciones.

Este cóctel molotov fue preparado por el corrupto fallecido.

Y ya nadie podrá decir que fue por omisión.

Ha sido, claramente, por acción.






La contaminación y el degeneramiento del poder devenido en política de facciones han sido derramados prolijamente desde Palacio para que nadie se pueda librar de ser un faccioso.

Se puede ver claramente en todos sus decretos y en todas y cada una de las leyes que ella ha remitido al Congreso, desde la seguridad pública hasta la educación.

Lo ha hecho forzando cien disputas y mil inquinas entre todos los sectores ciudadanos. Y ha prohijado la formación de bandas arrojándoles, a cada uno, su camiseta …y su bandera.

Lo ha hecho eligiendo a varios ideólogos del mal, para acompañar su gestión, dándoles vía libre para exhumar cadáveres de hace 40 años dirigiéndose a perfeccionar un escenario de venganza sistemática.

Las tensiones ya están flotando como una niebla en toda la sociedad. Así lo dispuso ella… después de ver que la oposición navega al garete.

Ignora, torpemente, …cuán cerca están los bordes de una guerra civil.

Si la esquiva, será por milagro.


Lic Gustavo Adolfo Bunse
gabunse@yahoo.com.ar