LA RESURRECCIÓN QUE EL GOBIERNO “K” NO QUIERE DAR A CONOCER
Los Patacones están nuevamente entre nosotros…
Como estamos acostumbrados, recibimos lo que nos corresponde por nuestro trabajo. Día a día, semana a semana, quincena a quincena o mes a mes nos hacemos acreedores de las retribuciones correspondientes por nuestro trabajo. Pero… ¿estás seguro de tener hoy, en tu poder, lo que realmente te has ganado? ES SEGURO QUE NO
Presta atención a tus haberes, pues nuevamente te están metiendo la mano en los bolsillos. Para que un rectángulo de papel de colores y dibujitos -que eso es en definitiva un billete- tenga un valor determinado que excede en mucho a su valor en sí, hacen falta varias cosas. Si nos fijamos en los billetes, vamos a ver una leyenda que dice convertibles de curso legal. Esto quiere decir que el tenedor puede comprar dólares con sus pesos. Esto es porque el dinero argentino, como el de casi todo el mundo, está respaldado en dólares, como antes estaba respaldado en oro. Es decir que la suma de todo el dinero que circula en el país debe ser igual a la cantidad de dólares depositados en el Banco Central de la República Argentina (BCRA). Si hubiera más pesos circulando que dólares en el Tesoro, esos pesos no tendrían respaldo y valdrían cada vez menos, a esto se lo llama inflación. Pues bien, como consecuencia de la sanción de la ley Nº 25.561 del 2002, el peso argentino cesa en su convertibilidad con relación al dólar estadounidense y al euro europeo, pero queda sujeto al "curso forzoso”, por lo que, los nuevos billetes que se emitieron a partir de la sanción de dicha ley, el BCRA no tendrá la obligación de aceptarlos a cambio de dólares o euros. Es importante destacar que por el curso legal el billete se convierte en verdadera moneda que ningún particular, ninguna Caja pública del Estado puede negarse a recibir en pago. Por el curso forzoso, el Banco está dispensado, hasta nueva orden, de reembolsar los billetes en especies a la vista (bonos, letras, dólares, etc.). El carácter especial del curso forzoso no significa, a pesar de las apariencias, que el público esté obligado a recibir el billete de banco como moneda legal, sino que el portador del billete de banco se halla privado del derecho de canjearlo por especies. En resumidas cuentas… NOS ESTÁN PAGANDO CON PATACONES DISFRAZADOS, ya que estos “billetes” no sólo no tienen aval internacional, sino que, en cuanto el Banco Central de la República Argentina lo decida, dejan de ser considerados “dinero real”.
ESTO PODEMOS VERLO EN LOS BILLETES DE TODAS LAS DENOMINACIONES
Fte: La verdad,la mentira y un poco de retórica
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