Kirchner: "fuera de la ley todo, dentro de la ley nada"
La remoción de Redrado por decreto.
Por Guillermo Cherashny
La telenovela dramática sobre el pedido de renuncia y luego remoción de Martín Redrado de la presidencia del BCRA promete varios capítulos más, mientras la jueza María José Sarmiento debe decidir sobre el amparo presentado por los radicales. Ayer, hasta más de las 20 hs., Redrado estaba en su despacho asesorándose con abogados para saber si puede desconocer el decreto que lo despidió y presentarse a su trabajo en la mañana del viernes cuando en el Boletín Oficial se publique la norma. Los juristas más prestigiosos sostienen que el ex presidente se tiene que quedar en su casa, al mismo tiempo que puede presentar varios recursos ante la justicia. Precisamente mañana, la Jueza Sarmiento puede decidir que se suspenda la vigencia del Fondo del Bicentenario. Pero si a las 8 hs. de la mañana sale la publicación en el boletín oficial, el vicepresidente primero del central a cargo de la presidencia puede firmar la cesión de los U$S 6.500 millones al tesoro y después el fallo de Sarmiento concediendo el amparo sería ya abstracto. El tesoro, es decir los Kirchner, no devolverán de ninguna manera los miles de millones de dólares que nunca volverán a las arcas del BCRA.
De este modo está claro que los Kirchner en este mes y 22 días que faltan hasta el 1 de marzo van a formalizar los DNU que sean necesarios para disponer del Fondo del Bicentenario mientras que la partida aprobada en el presupuesto para pagar la deuda externa se utilizará para crear 200.000 nuevos puestos del Plan Argentina Trabaja y para todo tipo de clientelismo.
El problema es que Miguel Pesce no tiene ninguna credibilidad en el mercado y lo mismo vale para Mario Blejer o Roberto Feletti. Pero los bancos nacionales encabezados por Jorge Brito darán su respaldo para que el mercado no se desborde y es probable que los tenedores de bonos también sigan respaldando la estabilidad cambiaria y bancaria hasta que se produzca el canje con los holdouts. Pero también puede pasar que los depositantes en pesos y en dólares se den cuenta de que sus depósitos carecen de suficiente respaldo y se decidan a retirarlos de los bancos y comprar dólares. Como se ve, la telenovela puede seguir un largo rato.
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