martes, 13 de julio de 2010

ANESTESIA


- ANESTESIA SOCIAL Y SERVILISMO


Por el Lic. Gustavo Adolfo Bunse


El crecimiento de la fortuna del matrimonio es directamente proporcional al desdén de una ciudadanía inconmovible, plácidamente aplastada y en un estado de pachorra absoluta.


Antes bien… indigna mucho más la estupidez colectiva, que cualquiera de los delitos que se desarrollen ante sus ojos de carnero degollado.



Impertérrita… con una mirada completamente distante e indolente… toda la sociedad sabe perfectamente… que es conducida hoy por un par de salteadores de caminos y prefiere, por la tranquilidad de sus hijos, esperar como una vaca en el brete.

Parecemos, de este modo… millones de serviles.



Existe además, el mito imbécil, alimentado por el propio matrimonio, que consiste en confundir al país en su ingénita esencia institucional, nada menos que con las personas físicas de ambos.



Con tal enfoque. no se considera políticamente correcto desear “que les vaya mal en su gestión”. Nadie se atreve a decir eso en voz alta, por temor a que se confunda con un deseo apátrida conforme al referido mito.



Sin embargo, ya van quedando pocos, incluso entre los contrapoderes legales, que oculten su auténtico deseo de que les vaya mal.



Es bastante fácil fundamentar y demostrar aquí que resulta perfectamente legítimo desear fervientemente que les vaya muy mal a ambos. E incluso proponerse hacer algo constitucional para cristalizarlo.



Una vez, en un discurso, ella dijo, con su mejor cara de cuarzo respecto de su gobierno : “somos un ejemplo de transparencia” (sic).



Moliêre, en su ataúd, se revolvió muy indignado… queriendo salir de allí… acaso para ir a buscar un nuevo personaje para su libro “El Tartufo”.

Vale la pena poner la lupa sobre lo que hacen estos sátrapas :

Véase, por ejemplo, algo de terror :



El desplazamiento del auditor contable de la Fiscalía de Investigaciones Administrativas (F.I.A.), el contador Eduardo Blanco Alvarez , es un vivo ejemplo.

El tipo es el auditor contable que alertó por escrito sobre más de 25 inconsistencias y contradicciones por 24,7 millones de pesos en el patrimonio de Néstor y Cristina Kirchner.

Todo el mundo lo sabe : Su desplazamiento ha sido por esa y por otras investigaciones "sensibles" sobre la pareja presidencial y otros varios referentes del poder político y empresarial.

Así consta en el escrito que envió a las autoridades de la F.I.A.

Una y mil veces en sus apariciones públicas… tal como ocurre con una expectoración, esta mujer se puso a enunciar un gran catálogo de números macroeconómicos, todos los cuales eran nada más y nada menos que la más cercana producción del último pan caliente que había dibujado, para ella, el INDEC… casi como un delivery de la falsedad .



Los aullidos de advertencia de Moliêre, se perdieron como una letanía entre los vítores que suenan - cada vez - en las inmediaciones de su atril… plagado de reptantes , mercenarios, advenedizos y obsecuentes.



Cualquiera se pregunta cual ha de ser el “click” que pueda hacer despertar de su letargo a esa sociedad increíblemente zombie.



Pues si no lo hace… y como que no lo haga,.. estamos al horno.



Así como se ven las cosas… y sin la menor elegancia, esta gente va a hacer cualquier cosa que pueda… para ganar, a mansalva, las elecciones del año que viene.

Cualquier cosa quiere decir eso : Cualquier cosa.



Cualquiera que encaje dentro de sus parámetros éticos.

Y eso es sinónimo – incluso - de la peor demasía.

De cualquier estremecedora barbaridad… que saben bien, les ha de estar permitida por esa Constitución agujereada que usan de adorno.



El sujeto que controla la comarca, podría volver muy tranquilo en el 2011.





Y quienes piensan que perdió las chances en las legislativas de junio del año pasado, acaso cometen un craso error.



Ni la multitud de actos de corrupción que perpetran a la luz del día, ni los desastres que les facilita el abuso descarnado del poder , ni las mentiras que, según puede verse, no le mueven a nadie el amperímetro, van a impedirles ganar de nuevo.



Mucho no importa eso : Aquí no existe oposición... Ni va a existir



Los acuerdos absolutamente descafeinados de los últimos días, son un mero juego de conveniencias coyunturales, de tal grado de precariedad, que hasta podría adivinarse su desmoronamiento ante el primer cheque.



Es un partido que se halla en los 44 minutos del segundo tiempo. Acordarse ahora de hacer acuerdos de políticas de Estado, es ingenuo.



Jamás, en los últimos 6 años, ha ocurrido el menor atisbo de oposición, ni en lo formal… ni en lo virtual. Ni parlamentaria, ni extra parlamentaria



La oposición ha sido y es… un enorme desierto político en el que sólo hay arena, mezquindades e ineptitudes.



Hay un pensamiento, casi emergido de una letrina, que flota por doquier:



“Deseo que le vaya bien a esta Presidente de la Nación, porque si le va bien a ella , entonces nos va a ir bien a todos y le va a ir bien al país”.



Los empresarios de la UIA y muchos en la Bolsa dicen eso… de rodillas.

Y es algo así como una especie de piedad, tan farsante, que los pone a mitad de camino entre el disimulo y la justificación.

Entre la cobardía y la ridiculez…



Por este rumbo que va esta presidente : si uno desea que le vaya bien

¿ Que es lo que está expresando en verdad con eso ?



Pues desear que le vaya bien, podría suponer, que esta mujer va a cambiar drásticamente sus prácticas políticas e imaginar también que va a salir de su impenitente confusión ideológica ?.



Sería sospechar que, acaso, que de carambola, con su conocido libreto de “la prueba y el error”, va a tener alguna posibilidad razonable de salir airosa y de levantar el país ?





Si tal fuese el deseo, - expresado de esa manera extraña - lo que se pondría de relieve, en verdad, es otra cosa más o menos así :

“ojala le vaya mal en este rumbo que va… y que por eso, entonces, deba cambiar por otro rumbo”.



Y además… “que sea muy pronto”, porque, puesta frente al susto de su ruina inminente, deberá mover el timón hacia otro lugar completamente diferente.



Por lo tanto resulta obvio : sólo podría irle bien al país si le va mal a esta mujer en lo que hace todos los días.



Capaz que un buen día se da cuenta del grave error que comete y decide mutar todo, sorpresivamente, hacia sus propias antípodas.



Si una persona cualquiera cree en verdad que este rumbo lleva al país hacia la nada, entonces no puede honestamente desear que le vaya bien a quien lo conduce, sino, inversamente… que le vaya mal, para que cambie todo.



Y debe saber también que, cuanto más pronto le vaya mal, mejor le irá al país, bien sea por el milagro de una mutación estrepitosa, o bien sea porque deba dejar su cargo en el acto. Para que sea otro mandatario quien advierta enseguida la sombra de la calamidad y conduzca el cambio a tiempo .



Si una persona impugna lo que está haciendo la que conduce, es decir, si se ve claramente que se ha emperrado en errores de los cuales hasta se siente orgullosa, entonces : desear que le vaya bien es hacer nada menos que el “elogio a la locura” de Erasmo de Rótterdam.



Le irá bien al país en el caso de que, alguna vez, elijamos a un tipo con excelentes aptitudes y controlemos para siempre nuestra inveterada tendencia a propiciar que, en la puja por mandarnos, solo triunfen los mediocres.



Un tipo al que podamos desearle que le vaya bien… porque haciendo más de lo que hace, en el mismo sentido… , le irá mejor.



Una persona a quien, sus obras lo sobrevivan y que permitan reconocer su huella augusta… a través del tiempo.





Un clarividente de los ideales, con la fuerza de actuar en función del país y con la capacidad de terminar, de una vez por todas, con el mal, practicado por inercia, por imbéciles e improvisados, en un país que fue estupidizado por medio siglo de mutilaciones morales.



No le irá bien al país sosteniendo con lisonjas a estos engendros, con la loca esperanza de que acierten el golpe en el clavo después de pegarse cien veces en los dedos.



No le irá bien si alentamos a los frágiles de criterio, huérfanos del menor equilibrio, estrábicos de hecho y de derecho, que no pueden mirar ni por encima de sus propia familias o de su grupo de advenedizos.



No le irá bien si se mantiene el paradigma del engaño social, el gambito político de la sustitución y la viveza iridiscente, de la malversación de la voluntad popular para el acomodo de los tránsfugas surgidos de la nada entre los colgajos de cualquier boleta.



Que les vaya bien a toda esta manga de abigeos de la fé pública es, ni más ni menos, que esperar con paciencia que terminen de perpetrar esta aventura de defraudación, apuntada a la estafa social y dirigida a un enfrentamiento civil ?



Que les vaya bien a estos violadores seriales de la Constitución, es suponer un escenario en el que ellos puedan terminar tranquilamente de perfeccionar el burdel parlamentario ?



Y si tienen suerte, acaso les puede ir mejor, porque es muy simple extrapolar ese camino de indecencia pública, para adivinar hasta donde podrían llegar con su vocación de carcoma.


Quizás… para seguir con estos líderes populistas, jefes de un batallón de felpudos humanos que entregaron su honra una y mil veces… jurando en público hasta por los huesos de sus padres, cumplir y hacer cumplir la Carta Magna para profanarla luego durante 6 años seguidos.


No basta ser multitud para ser pueblo…, por cuanto no lo sería la unanimidad anestesiada de millones de serviles.

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