URGE EL TRAJE A RAYAS

LOS LÍMITES DEL RESURGIMIENTO K

Kirchner cerca del ballotage pero lejos del triunfo y de la impunidad




Compartir

Por Guillermo Cherashny para el Informador Público

Recientes encuestas ubican al matrimonio presidencial -si las elecciones fueran hoy- llegando al ballotage. Lo que no se sabe es si se enfrentarán con la alianza en formación entre el Peronismo Federal y el PRO o al Acuerdo Cívico y Social. Respecto de la opinión sobre el gobierno, la última encuesta de Poliarquía es clara: sólo un 26% está de acuerdo con el gobierno, en tanto que el 63% está en desacuerdo. Esto hasta parecería contradictorio con el hecho, también señalado por varias encuestas, de que la imagen positiva de CFK esté en un 36% y la de NCK en un 32%. Aunque está comprobado que generalmente la intención de voto es menor que la imagen positiva. Así lo señala una encuesta reservada realizada en la primera sección electoral, en la que Néstor y Cristina tienen 15 y 12% respectivamente. Pero la imagen de los intendentes de la zona supera largamente el 30% y está muy cerca del 40%, así que éstos bien podrían ganar su distrito organizando, por ejemplo, un corte de boletas que les posibilite el triunfo. La diferencia está en que para algunos encuestadores -Artemio López, Carlos Fara y Ricardo Rouvier- ese 27% del matrimonio presidencial, sumando a un porcentaje de indecisos, llegaría hasta el 33%. En cambio, la encuesta de Poliarquía da una intención de voto con un techo de 26%.



El síndrome de Menem 2003

La alianza Peronismo Federal-PRO superaría hoy estos números si Carlos Reutemann fuera el candidato del espacio. En cambio, si no se presenta Lole, las posibilidades de Eduardo Duhalde de alcanzar la segunda vuelta pueden afianzarse con el tiempo. En cuanto al acuerdo Cívico y Social, las encuestas se dividen entre las que sostienen que Kirchner le ganaría en segunda vuelta a Cobos o Alfonsín, y otras que sentencian que NCK y CFK pierden con cualquiera en la segunda vuelta.

Además hay que tener en cuenta que éste es el mejor momento electoral del kirchnerismo. Es que la inflación no afecta todavía demasiado a los sectores de sueldos altos y la emisión de moneda permite un consumismo grande. Pero algunos economistas de primer nivel prevén que a fines de este año la inflación puede afectar a todos los sectores. En consecuencia, para octubre del 2011 la intención de voto del oficialismo tendrá un techo del 20%. Así las cosas, hoy por hoy Kirchner puede embaucar a más de un dirigente peronista para que juegue dentro del PJ. Pero el tiempo ahora corre en su contra.