DE CARNE SOMOS

En 10 años la carne marcó un récord de inflación: Subió 1.000 %

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por Gabriela Balls



Hace una década los cortes de asado costaban menos de 3,5 pesos, como consecuencia de la competencia entre supermercados. Hoy llega hasta los 35 pesos.

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En tan sólo 10 años, el precio de la carne aumentó alrededor de 1.000%. Los números son por demás elocuentes. Si nos remontamos a aquella época, durante 2000 los valores de cortes para asado, por ejemplo, rondaron entre $ 2,95 y $ 3,50, el kilogramo. Hoy, el mismo corte se mueve entre $ 29 y $ 35. Así, en este caso, la inflación fue de 983%.

Más aún, según el archivo histórico del diario Los Andes, con la frenética apertura de varios centros comerciales en Mendoza, la carne llegó a costar en aquel momento menos de $ 1, para ser más exactos $ 0,99 el kilo.

Bajo el título: "Inédito: la carne llegó a costar menos de un peso", el Diario Los Andes explicaba el 28 de setiembre de 2000 que "por la guerra de los híper, Libertad abrió ayer y desató un feroz capítulo en la pelea por los clientes mendocinos".

En ese momento, los anuncios de ofertas se hallaban alrededor de $ 1,75, pero motivados por la competencia y guerra de precios a fin de maximizar las ofertas, las otras grandes cadenas debieron pelear centavo a centavo para atraer clientes y no dejar de vender en sus sucursales.

Fue tal el escenario que se desencadenó en la época en que llegó este híper, que el resto de los súper debió bajar todavía más los precios y la carne vacuna quedó en casi $ 1.

Y esto no es todo porque según consta en los archivos, hay varias crónicas periodísticas que reflejan a la carne, junto a otros alimentos, como uno de los pilares alimenticios que ayudaron a enfrentar la cruel crisis social que aconteció en la Argentina entre los años 2000 y 2002.

Pero este alentador escenario comenzó su escalada de precios en 2007. Muy pocos meses después, el 22 de febrero de 2008 Los Andes titulaba: "En los últimos quince días, el precio del asado subió 30%". El kilo ya estaba a $ 15,90 en el mostrador pero aclaraba que dicha variación afectaba a todos los cortes. Ya se atribuía a "la menor oferta de la hacienda".

La inflación por las nubes

A fin de comprender este increíble 1.000% de inflación que recayó sobre la carne en estos últimos 10 años, debemos señalar que la inflación acumulada general en el resto de alimentos y algunos otros bienes se cifra en un 350%.

Pero también al hablar de inflación tenemos que tomar como referencia la devaluación del peso ante el dólar.

Es más, según se indica en las páginas oficiales del Indec, el índice que marca el Costo Variable Salarial (CVS) fue en este mismo tiempo de 337%. Es decir que los sueldos en general crecieron más de un 330%, siguiendo fielmente los mandatos de la inflación.

El ejemplo de los 0 km

Asimismo, otros productos y bienes como los automóviles, electrodomésticos y computadoras, han sufrido una suba que fue de la mano de la inflación.

Por ejemplo, un auto como el VW Gol costaba en aquellos tiempos alrededor de $ 14.500; una PC (Pentium 4) valía $ 1.200 y un aire acondicionado cerca de $ 600. Sin excepciones, tanto el vehículo como los electrodomésticos han subido sus precios al compás de una inflación de alrededor del 350% en promedio.

Así, un VW Gol (base) cuesta casi $ 52.000, según indica Volkswagen en su página web oficial; una PC moderna alrededor de $ 4.000 y un aire acondicionado, alrededor de $ 2.000.

"Los automóviles y algunos bienes como los electrodomésticos están en sintonía con la inflación. Han aumentado sus precios a una cifra similar al proceso inflacionario", aclaró el economista y docente Sebastián Laza.

Además, dijo que este proceso va económicamente atado "al índice de la devaluación del peso ante el dólar", especificó Laza, "que es del 300%".

En cuanto a las causas específicas dentro de la actividad ganadera, este economista explicó que "el sector vive una situación coyuntural, muy particular, marcada por el achicamiento de la oferta y el mantenimiento de la demanda".

En su opinión, aclaró que esto no se debe relacionar con los costos de producción sino con la caída general del rubro.

Por su parte, el economista de la consultora Evaluecon, José Vargas, coincidió en que la caída de la oferta y de stock de carne "potenció el incremento de los precios". A su vez, subrayó que la demanda per cápita "no ha bajado; al contrario, ha subido aún más".

Para Vargas, "la carne tiene una fuerte presencia dentro de la canasta básica alimentaria (CBA) y los alimentos en sí pesan un 37% dentro del índice de la inflación. Por esto, cuando se mueve el rubro alimentos se mueve el índice de la inflación".

Además, la falta de inversión de los últimos años, la que migró a la soja, el freno en las ventas al exterior y a la exportación de productos cárnicos, también han incidido en las subas de precio de la carne.

Desde Prodelco, la liga local de Protección del Consumidor, Susana Yelich indicó que los consumidores tienen una fuerte noción de estos aumentos porque "es un rubro muy sensible y porque todavía hay sueldos de $ 1.500".

Yelich aclaró que ya hay cortes que están en más de $ 30 y que en las semanas de las Fiestas Navideñas los precios se van a disparar en más de un 20%.

"Hay rumores de que el peceto o el lomo llegarán a los $ 60", dijo con preocupación esta dirigente quien además aseguró: "Ni siquiera las ofertas de los supermercados son convenientes. Las mejores están a fin de cada mes porque bajan las ventas notablemente".