jueves, 11 de noviembre de 2010
EL JONCA
PREFIERO PECAR DE CÁNDIDO, A ENTRAR EN LA PARANOIA.
Así todo sea posible en ésta Argentina desconocida, prefiero pecar de cándido, a entrar en la paranoia. Como siempre y con efecto “retardado”, ahora hay quienes exigen se abra el jonca que contiene los restos de quien en vida fuera Néstor Kirchner. Buá; en realidad, exigen que se abra el jonca porque sospechan que “adentro” no hay nadie, así de cualquier modo no haya nadie, por esas cosas de la muerte. Y entonces ocurre lo que con el “chimento”; la bola se corre de boca en boca y ahora hasta parece que el que está “dentro”, es un Yeti que desde hace años andaba dando vueltas por El Calafate y justo esa noche cazaron “los de la custodia”, confundiéndole con Moyano. Y la historia continúa con los ribetes que cada uno prefiera darle o adjudicarle. Para algunos, el Néstor está apurando una partida de truco junto a Yabrán en algún punto del Caribe, cuando es sabido que éste en su momento, se voló la cabeza de un escopetazo…¿era Yabrán?. Para otros se rajó con toda la “tagui”, motivo por el cual la Fuerza Aérea, debió fletar un viejo Hércules 130, habida cuenta del “quatum” de billetes verdes a transportar, y el Néstor como único pasajero. Los más avezados, sostienen que se piró a la selva colombiana estimulado por su amigo Chávez, para agarrar la manija conductiva de las FARC, circunstancia que aún equivocado, le erigiría en un empedernido “idealista”. Vecinos de Río Gallegos, aseguran que tenía un hermano gemelo al que “guardaron” a modo de reserva, y ése sería el que ocupa el incómodo lugar. De una u otra manera, el Néstor parece condenado a convertirse en leyenda, cuando la mayoría esperábamos que fuera condenado por un sinfín de crímenes de lesa Patria. ¡Claro que si el jonca y por esas cosas de la vida y de la muerte, se llegara a abrir en presencia de testigos hábiles, idóneos y honestos que no será del todo fácil reunir, nos quedaremos sin ese ingrediente que nos convierte en el hazme reír del resto del planeta.
Ricardo Jorge Pareja
parejaricardo@hotmail.com
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