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Furia de Kirchner con Aníbal Fernández
Lo citó de urgencia a Olivos para recriminarle que “fue para atrás” en la reunión con la Corte, donde resolvió derogar la resolución que obligaba a las fuerzas de seguridad a informarle de las órdenes recibidas por los jueces. El ex presidente analiza pedirle la renuncia.
Buenos Aires, lapolíticaonline, 27/06/08, 19:44

Una reunión de urgencia convocó el ex presidente Néstor Kirchner en la Quinta de Olivos donde se podría dar un pedido de renuncia a uno de los funcionarios más emblemáticos y mediáticos de la gestión kirchnerista: Aníbal Fernández.



Hasta ahí se trasladó el ministro de Justicia para escuchar los reproches del santacruceño, quien lo espera enfurecido por la decisión de derogar la resolución que obligaba a las fuerzas de seguridad a informarle de las órdenes recibidas por los jueces.



Sí, así como se lee y contrariamente a los que se podía prever, Kirchner no se enojó por la decisión de una medida incostitucional sino por todo lo contrario: lo acusa de “ir para atrás” en la reunión que tuvo el ministro con la Corte Suprema hace apenas dos días.



El Gobierno nacional derogó las resoluciones por las cuales había establecido la obligación de las fuerzas de seguridad de informar al Ministerio de Justicia sobre las órdenes recibidas por los jueces en las causas que investigan, y acordó con la Corte Suprema la creación de una comisión para "revisar eventuales instrucciones judiciales que pudieran generar conflicto" en su cumplimiento.



La derogación fue resuelta por el propio Aníbal tras una reunión que mantuvo por esa cuestión con miembros de la Corte encabezados por su presidente, Ricardo Lorenzetti. Vale recordar la pésima relación que mantiene el ministro con todo el espectro judicial desde que fue nombrado allí, mucho más después de las denuncias de hackeo a las cuentas de mails de varios ministros de la Corte, incluído Lorenzetti.



La derogación de las resoluciones Nº 1084 del 29 de abril último y su modificatoria, Nº 1531, aclara que se dan por entender que "esta comisión satisface plenamente mi interés en regular de la manera más eficaz y ajustada a derecho, la relación entre los jueces y fiscales federales y las fuerzas de seguridad a mi cargo en el cumplimiento de sus funciones".



La medida generó malestar en los ámbitos de la Justicia penal y entre los fiscales, que interpretaron que se trataba de una intromisión del poder político en la Justicia.



Tras la reunión en la Corte, Lorenzetti -quien estuvo acompañado por los ministros del tribunal Elena Highton de Nolasco, Carmen Argibay y Carlos Fayt- anunció la creación de una virtual "policía judicial", como una suerte de "solución superadora" a la situación generada por las resoluciones ahora derogadas.



Fernández calificó de "fructífera" a la reunión y destacó que "la propuesta superadora de crear una Comisión entre la Corte Suprema y el Ministerio para revisar eventuales instrucciones judiciales a las fuerzas de seguridad y policiales que pudieran generar conflictos en lo atinente a su cumplimiento, ofrece todas las garantías para concluir en decisiones acertadas".



Claro que esta aclaración llegó después de que, previo a la reunión, Aníbal Fuera interceptado por periodistas que le preguntaron si se reunía para dar marcha atrás con las resoluciones que firmó y que Fernández, muy enojado, respondiera que “esas son las pavadas que dicen los diarios”.



Furia de Kirchner con Aníbal Fernández
Lo citó de urgencia a Olivos para recriminarle que “fue para atrás” en la reunión con la Corte, donde resolvió derogar la resolución que obligaba a las fuerzas de seguridad a informarle de las órdenes recibidas por los jueces. El ex presidente analiza pedirle la renuncia.

La Política Online
| 19:44



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Una reunión de urgencia convocó el ex presidente Néstor Kirchner en la Quinta de Olivos donde se podría dar un pedido de renuncia a uno de los funcionarios más emblemáticos y mediáticos de la gestión kirchnerista: Aníbal Fernández.



Hasta ahí se trasladó el ministro de Justicia para escuchar los reproches del santacruceño, quien lo espera enfurecido por la decisión de derogar la resolución que obligaba a las fuerzas de seguridad a informarle de las órdenes recibidas por los jueces.



Sí, así como se lee y contrariamente a los que se podía prever, Kirchner no se enojó por la decisión de una medida incostitucional sino por todo lo contrario: lo acusa de “ir para atrás” en la reunión que tuvo el ministro con la Corte Suprema hace apenas dos días.



El Gobierno nacional derogó las resoluciones por las cuales había establecido la obligación de las fuerzas de seguridad de informar al Ministerio de Justicia sobre las órdenes recibidas por los jueces en las causas que investigan, y acordó con la Corte Suprema la creación de una comisión para "revisar eventuales instrucciones judiciales que pudieran generar conflicto" en su cumplimiento.



La derogación fue resuelta por el propio Aníbal tras una reunión que mantuvo por esa cuestión con miembros de la Corte encabezados por su presidente, Ricardo Lorenzetti. Vale recordar la pésima relación que mantiene el ministro con todo el espectro judicial desde que fue nombrado allí, mucho más después de las denuncias de hackeo a las cuentas de mails de varios ministros de la Corte, incluído Lorenzetti.



La derogación de las resoluciones Nº 1084 del 29 de abril último y su modificatoria, Nº 1531, aclara que se dan por entender que "esta comisión satisface plenamente mi interés en regular de la manera más eficaz y ajustada a derecho, la relación entre los jueces y fiscales federales y las fuerzas de seguridad a mi cargo en el cumplimiento de sus funciones".



La medida generó malestar en los ámbitos de la Justicia penal y entre los fiscales, que interpretaron que se trataba de una intromisión del poder político en la Justicia.



Tras la reunión en la Corte, Lorenzetti -quien estuvo acompañado por los ministros del tribunal Elena Highton de Nolasco, Carmen Argibay y Carlos Fayt- anunció la creación de una virtual "policía judicial", como una suerte de "solución superadora" a la situación generada por las resoluciones ahora derogadas.



Fernández calificó de "fructífera" a la reunión y destacó que "la propuesta superadora de crear una Comisión entre la Corte Suprema y el Ministerio para revisar eventuales instrucciones judiciales a las fuerzas de seguridad y policiales que pudieran generar conflictos en lo atinente a su cumplimiento, ofrece todas las garantías para concluir en decisiones acertadas".



Claro que esta aclaración llegó después de que, previo a la reunión, Aníbal Fuera interceptado por periodistas que le preguntaron si se reunía para dar marcha atrás con las resoluciones que firmó y que Fernández, muy enojado, respondiera que “esas son las pavadas que dicen los diarios”.