miércoles, 1 de junio de 2011

EL TANO SE SACA LAS PILCHAS


EN ROMA
Una foto necesaria pero no tan favorable: Cristina se reúne con Berlusconi

En plena crisis por la derrota del Cavaliere el domingo, Cristina Fernández tendrá hoy la foto con el primer ministro Silvio Berlusconi, en un gesto indispensable para atraer las inversiones que no llegan al país.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).- En el marco de su gira oficial por Italia, la presidente Cristina Fernández se reunirá en las próximas horas con el primer ministro Silvio Berlusconi, un encuentro que supone el plato fuerte del viaje de dos días que encabeza la mandataria.

Con algunos frentes de conflicto todavía abiertos, como el pago a los 20.000 bonistas que no entraron en el canje de deuda, la falta de acuerdo con el Club de París y la relación tirante de la Casa Rosada con las empresas italianas por las tarifas de servicios públicos, la jefa del Estado intenta dar un gesto de sintonía política ante las máximas autoridades para atraer las inversiones tan buscadas que aún no llegan al país.

En tanto, poco antes, la jefa del Estado se reunió con su par italiano, Giorgio Napolitano, encuentro que se llevó a cabo en el salón Bronzino de la sede del presidente en Roma.

Estas reuniones forman parte de la agenda de la visita oficial de Cristina a Italia, donde mañana participará en los actos de celebración del 150º aniversario de la unificación del país coincidiendo con el día de la República, al que hay invitados unos 70 jefes de Estado, entre ellos el rey de España.

Será difícil saber qué temas tratarán, dado que Berlusconi, entre sus escándalos judiciales y la dura derrota electoral del domingo, lo único que quiere es ver lejos al periodismo y prohibió todo tipo de acercamiento con la prensa, tanto la nacional como la extranjera que llegó para cubrir la visita de Cristina. No habrá palabras ni declaraciones tras el almuerzo en el Palazzo Chigi.

Además, por la tarde, Cristina cerrará con un cóctel la ronda de negocios organizada por la Cancillería, que comenzó ayer en el hotel Excelsior.

Las relaciones entre ambos países estuvieron en el freezer por una década como consecuencia del default de la deuda argentina, que entrampó a unos 400.000 bonistas italianos. Quedan unos 20.000 -se estima- que decidieron no ingresar en ninguno de los dos canjes, pero luego de este último las tensiones disminuyeron y las diplomacias quieren dar vuelta la página. Cristina podría escuchar igualmente de sus interlocutores pedidos de mayor “previsibilidad” en la economía y que se pongan trabas al comercio. Pero se espera que ante todo prime la voluntad de acercamiento.

La Presidente llegó por la tarde tras volar trece horas desde México. Llegó junto a Timerman y De Vido. También está en esta ciudad siempre llena de turistas el ministro de Agricultura, Julián Domínguez, y el secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde. Hoy se firmará entre otros un acuerdo para que Italia entregue documentación producida por su Embajada y consulados en la Argentina entre 1976 y 1983 sobre el terrorismo de Estado. Denuncias y otras pruebas documentales que podrían usarse en los juicios en curso por delitos de lesa humanidad.

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