VOMITORIUM

¿Cuántas semanas ó meses, debemos de aguardar, para confesarnos a nosotros mismos, que la Argentina, es un gigantesco "vomitorium" como los que existían debajo de las gradas de los antiguos "circus", diseminados por toda la europa romanizada del siglo I de la era Cristiana?.
¿Cuántos Schoklenders, Bonafinis, Buzzis, De Mendigurens, Tinellis, Randazzos, Moyanos, Zaffaronis; Garrés y demás escorias, debemos ver ó escuchar para reaccionar adecuadamente?.
Requeriremos de más tiempo para advertir nuestras dolencias, nuestras ausencias, nuestras claudicaciónes; en fin nuestras propias miserias.
Ésto seguirá pudriéndose de adentro hacia afuera, hasta que no toleremos más humores nauseabúndos.
Pero con ello y todo ¿será pronto?.
Mucho me temo que no.
Sin embargo, algún día, después de todo este diluvio de vulgaridades y cuestiones de mal gusto, que nos tutelan, conoceremos la identidad de la luz, que pondrá fin a estos dos siglos de tinieblas, durante los cuáles meros estancieros, se convirtieron en "caudillos fundacionales", como Rosas, Mitre, Urquiza, Quiroga, López, Bustos y tantos otros bribones, que nos moldearon a sus imágenes y semejanzas.
Ya que al fin de cuentas, esta Sociedad, que convive con la inseguridad, pero que a su vez condena el "gatillo fácil"; que es en lo absoluto indolente frente a la crapulencia, a la que nos convidan los mencionados más arriba y miles como ellos, alguna vez habrá de desear desnudarse para vestirse de otra forma, diría más estética.
Sin los disfraces con los que actualmente ocultan sus hibernadas ánsias de una Justicia distributiva.
Ésa simple que otorga a cada quien lo que merece, desde un ángulo primario, básico y comprensible para cualquier mortal.
Como cualquier otro movimiento superador, no necesitaremos de millones de Compatriotas, para ejercitar ningún "bautismo de fuego".
Suficiente será, que menos de veinte mil Argentinos, nos animemos a declinar posturas dogmáticas e irrelevantes, para dar el puntapié inicial de la primera gesta patriótica, que de todos nosotros se espera.
El nacionalsocialismo tan denostado durante estas últimas seis décadas, nos debería servir de ejemplo.
No cuenta este modelo con un márketing adecuado, porque a poco de mencionarlo, se lo asocia conectivamente a los campos de exterminio y cosas similares.
La catapulta fiduciaria del sionismo y la hipocresía eclesiástica, fueron indispensables para teñir de diabólica a esta doctrina de pensamiento, que en nada atenta contra las virtudes ciudadanas.
Muy por el contrario, ya que los preceptos que guiaron a la primera reconstrucción germánica de la década del treinta, se basó en una alianza entre las clases obreras y los industriales, en pos de un interés común, que era el del Estado.
Lo que nos sucede a nosotros hoy en día, es el acumulativo de la total ausencia de un objetivo que nos identifique a todos por igual.
No lo tuvimos en 1810, a pesar de Belgrano y Castelli, y ese sesgo histórico nos hizo desembarcar en este "mar de sargazos" que nos gobierna de forma más funesta que la más rebelde de las anarquías.
Estos matices de incertidumbre en el mundo financiero global, nos brindarán un inestimable aporte.
Harán que nos autosepultemos ó que emerjamos de nuestras propias cenizas, que constituirán los rasgos visibles de lo que alguna vez fuimos, en un pasado, a estas alturas, sumamente remoto.
Terminará en esa etapa también, ese complejo de "federalismo", que es una sigla y factoría para entretener a los más idiotas, que se multiplican por segundos.
Después de tantas postraciónes, este oligofrénico pueblo, será el que que clame por el órden y la disciplina.
Por un Estado autoritario, toda vez que será imposible gobernar fuera de esa estructura piramidal.
Será entonces, cuando nuestra historia minúscula, y plagada con de lugares comunes, deba ser revisada.
El turno para empiecen a desaparecer espontáneamente, tantos homenajes idólatras a Yrigoyen, Perón & Evita.
Será el momento de inhumar el concepto "populista", que nos ha retrasado tanto durante estas dos largas centurias.
Muchas veces pienso, que no existe otra salida, diferente a tocar el lecho del naufragio para contar con alguna posibilidad de alcanzar la superficie.
Ese fondo nebuloso y oscuro es el que con siluetas engañosas, tenemos a la vista.
Lo único a lo que podemos aferrarnos es a la fé.
¿A cuál?.
Quizás a que este hundimiento se produzca de una vez por todas.
La tan mentada "sojización", es un salvavidas que ignoramos que en su interior está forrado en plomo.
Que le permite a este gobierno de canallas, retroalimentar la "caja".
Pero la buena nueva es que ya no les alcanza, para financiar sus actividades subversivas.
Kretina lo sabe y su novio también.
Resta sólo esperar un tiempo.
El necesario para que se acentúe la demolición de esta espasmódica estructura de poder, que nos servirá de lazarillo, para templar el momento de la verdad.
Cuando ello acontezca, no se sorprendan si alguien los invita a

EL GÉNESIS DEL PRIMER REICH.
Atentamente Carlos Belgrano.-
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