EL DISLATE ARGENTINO PROPICIADO POR UN FATUO PERSONAJE
Por Jorge Omar Alonso
“Recapacita, pues, hijo, ya que el equivocarse es común para todos los hombres, pero, después que ha sucedido, no es hombre irreflexivo ni desdichado aquel que, caído en el mal, pone remedio y no se muestra inflexible. La obstinación, ciertamente, incurre en insensatez”
Antígona – Sófocles
El desvarío político gobierna al País llevado de la mano de un insensato, cuyo resultado ha de ser un nuevo enfrentamiento entre los argentinos. Cuenta con los medios que le provee el sojuzgado aparato partidario y los secuaces que comandan sus fuerzas de choque cual Schutzstaffel (SS) nazi.
Este irreflexivo personaje llamado Néstor Kirchner resulta digno de un estudio psicológico dada la irracionalidad política que ha demostrado en el manejo de los asuntos del Estado y a la malignidad internalizada en lo profundo de su pensamiento. Su mayor obra ha sido partir en dos a la sociedad, negándose ambas partes a sí mismas y una vez acallado el diálogo que podría unir a sus componentes, se trata de descalificar al otro en una reciprocidad de injurias.
La comunicación plural ha sido sustituida por el pensamiento único que es la palabra del poder “supremo” aposentado en la Argentina y esto tiene sus riesgos que es la disolución, o la guerra interna.
Escribió Octavio Paz que “la guerra nace de la incomunicación y busca sustituir la comunicación plural por una comunicación única: la palabra del vencedor”. La República esta siendo llevada a un estado de guerra interno por los odios y las divisiones desatadas por la incivilidad del kirchnerismo.
El diferendo con el campo ha sido planteado por el gobierno como una guerra de desgaste y contrariamente la que se está desgastando es la Patria misma. La paz de los argentinos está en juego, un juego fatídico llevado a cabo por un lóbrego personaje que actúa detrás del poder de la Nación, ante el vacío presidencial.
No obstante ese vacío es llenado por los bárbaros que salen a vituperar a los que no piensan igual y los encapuchados siempre funcionales al jefe del rebaño, que hacen del “escrache” el único medio de difusión de sus escuálidas ideas.
En “Los orígenes del totalitarismo” Hannah Arendt expone el protagonismo de las masas como un elemento específico del totalitarismo, a las que define como incapaces de proponerse objetivos obtenibles El pensamiento en plural ha sido desterrado de la práctica política del kirchnerato, la barbarie masificada y la tensión es su único medio de expresión contando para ello con un adocenado aparato partidario, con el que se pretende concertar el modo de seguir condenando a la Nación al quiebre institucional, el que por otra parte ya resulta evidente.
La barbarie no solo es política sino que se ha extendido a la ética, a la educación y a la cultura. Es utilizada como medio de coerción política y el aparato son las masas que le son adeptas, con toda su brutalidad, su atraso y falta de relaciones sociales.-
FTE.CRONICA Y ANALISÍS
viernes, 6 de junio de 2008
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