ARGENTINA, PARIA Y VERGÜENZA INTERNACIONAL
Los groseros errores que el matrimonio Kirchner fue acumulando por sus disparatadas decisiones políticas a lo largo de cinco años, sin ninguna participación, limitación u objeción del sumiso y subordinado Congreso Nacional, órgano constitucional para controlar al Poder Ejecutivo, están arrojando su perjudicial resultado y el venenoso fruto que fue corrompiendo paulatinamente a la sociedad argentina.
Sin temor en equivocarnos podemos afirmar que el oscurantismo se abatió sobre nuestro país en la gestión de la pareja imperial.
El gobierno de Cristina nació con tres gravísimas anomalías. Anomalías que en cualquier país que se precie medianamente civilizado, son totalmente descalificantes:
· Su candidatura fue impuesta por su marido sin ningún tipo de elección interna. Simplemente digitada por la omnímoda voluntad del ex presidente.
· Su campaña fue costeada en parte, con millones de dólares entrados de contrabando al país enviados por el dictador venezolano y probablemente también del narcotráfico.
· Usurpó descaradamente un título profesional que no tenía.
Sintéticamente mintió, falseó y ocultó hechos para lograr acceder a la presidencia. Verdaderos pecados originales. Estos simples puntos que ya no impresionan ni importan a la mayoría de los argentinos por tomarlos como un aspecto secundario dentro del proceder político argentino, son de por si delitos, graves delitos, que además reflejan la categoría ética y moral de la mujer que supuestamente nos gobierna.
Me refiero a la mujer que “supuestamente” nos gobierna porque esta frase encierra otra gravísima anomalía. El “doble comando” del cual ya tampoco se habla por el acostumbramiento de los ciudadanos sobre esta característica del gobierno.
No se le puede escapar a nadie que el verdadero presidente sigue siendo Néstor Kirchner con su gruesos defectos y una esquizofrenia y paranoia cada vez más aguda. Cristina es simplemente la presidente virtual, una figura de carácter protocolar que encabeza actos públicos y pronuncia discursos para dar la impresión de una intensa actividad gubernamental que no realiza.
Ya no quedan dudas de este tema. Días pasados se comentaba en los medios, que ante una situación que no fue de agrado de Kirchner este perdió el control, y desde la Quinta de Olivos, vociferaba iracundo órdenes a ministros y secretarios del gobierno. Cristina no gobierna ni gestiona. Todo lo hace su esposo. Pero la pregunta que se impone es ¿Que cargo ocupa Kirchner en el gobierno? ¿¿¿???
Lo grave de esta situación es que en el extranjero, no solo en los países más desarrollados sino también en los del tercer mundo, la política argentina, si así es lo puede llamar, es absolutamente incomprensible.
Las contradicciones, los anuncios fantasiosos luego negados por la realidad, el anunciar para después contradecir, las mentiras y engaños tan escandalosamente evidentes, las acciones gubernamentales contradictorias desorientan al más pintado. Ni siquiera los capitales más especulativos se animan a arriesgar un centavo en nuestro país.
A la crisis ética y moral, se agrega la ineptitud y la inoperancia.
Pero no son estas características de los Kirchner que espantan a los inversores. Lo que realmente preocupa en el extranjero es la falta de un mínimo de sentido común, de seguridad jurídica y la imprevisión. Durante casi toda la gestión de Cristina los absurdos y gruesos errores se fueron amontonando uno tras otro. Y uno peor que otro.
En solo cinco años Argentina se convirtió en un paria y en una vergüenza internacional.
En una acción de gobierno que describe en cuerpo entero la autoritaria personalidad de los Kirchner, se refleja en un hecho ocurrido hace solo un par de días: en forma sorpresiva, sin ninguna información previa y en forma absolutamente inconsulta con los involucrados, anunció el fin de las AFJP y el traspaso a las arcas del Estado los depósitos de los aportes provisionales. La módica suma de U$S 30.000 millones. El proyecto de ley será mandado al Congreso con la directiva de aprobarlo a libro cerrado en solo unas pocas semanas.
Los Kirchner no entienden que democracia significa la búsqueda de consensos, en particular en aquellas cuestiones que hacen a medidas de mediano o largo plazo.
Kirchner volvió a apostar irresponsablemente a todo o nada
No creo necesario detallar los pormenores de esta decisión gubernamental inconsulta ya que está ampliamente comentada en los medios.
Lo que si quiero expresar son algunos comentarios del exterior.
"Una gran vergüenza", dicen en Wall Street.- Los contados analistas y grandes inversores de Wall Street que por estos días miran hacia la Argentina y el resto de América latina recibieron con desagrado la propuesta de estatización de los fondos privados de pensión. Una decisión que no sólo sería equivocada en sí, alertaron, sino que reflejaría la "desesperació n" oficial por obtener fondos frescos, la cercanía de un nuevo default y el eventual retroceso, uno más, que implicaría para el país.
“Madrid tuvo una baja histórica por la decisión de los Kirchner” El Ibex cayó 8,1% por temor a las pérdidas de firmas españolas. De la mano de la nacionalizació n de las jubilaciones privadas, un tembladeral azotó el hilito de credibilidad que le queda al gobierno de Cristina Kirchner entre inversores españoles. Atrapados entre el pánico y la sospecha de que “ya no se sabe lo que puede venir de ese país”, castigaron como nunca antes los valores de empresas españolas con inversiones en la Argentina, que cerraron todos con bajas inusitadas.
“The Economist critica la "miopía política" de Cristina” En un duro artículo, dice que la Argentina tiene un reflejo distorsionado de sí misma y habla de la falta de solvencia en las cuentas. La nacionalizació n de los fondos de las AFJP propuesta por el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner no fue bien tomada por el semanario The Economist, una de las publicaciones económicas más importantes del mundo, que en su edición impresa lanzó una feroz crítica a la miopía política de la presidenta argentina”.
"La importancia de Argentina para Latinoamérica es insignificante", El futuro de Latinoamérica depende sólo de la situación económica y política de Brasil y México y no de Argentina, cuya importancia es insignificante, dijo el ex presidente del Bundesbank, Hans Tietmeyer, al diario "Die Welt" años atrás.
El sociólogo Alain Touraine hace unos años manifestó que “La Argentina nunca se constituyó como sociedad". El único papel importante del sistema político es "ser el centro de la corrupción" y que nuestro país "no existe”. “Como país y como sistema político ha muerto”. Existen los argentinos, pero no existe la Argentina.
Sintetizando en la Argentina no hay reglas previsibles. Ha dejado de ser confiable y reina el sinsentido y la contradicción.
La generación política que se ha convertido en una corporación y no en representantes del pueblo.
Los Kirchner han convertido a la Argentina, en un país marginal, un país paria, que ha perdido la confianza de la comunidad de Naciones y su gobierno es una verdadera vergüenza internacional.
La pareja imperial ha envilecido el país. Hizo que la Argentina se haya caído del mundo.
27-Oct-08
Dr . ALFREDO RAÚL WEINSTABL
alfredo@weinstabl. com.ar
miércoles, 29 de octubre de 2008
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