Desde Schiaretti a Das Neves, pasando por Gioja y Busti, exigen que el ex presidente se mantenga al margen del armado de listas en las provincias y piden no “nacionalizar” los comicios. A cambio, Kirchner exige fidelidad en el Congreso. Critican las operaciones de prensa de Mazzón y empiezan a ver al sello K como “piantavotos”.
Cuando Carlos Reutemann dijo ayer que “no se puede salir a hablar del Frente para la Victoria en el interior santafesino” no sólo dejó al sello K pegado a cierto perfil “piantavotos”, sino que mostró que sabía perfectamente de qué estaba hablando. Intencional o no, se transformó en vocero de las sensaciones que viven la mayoría de los poderosos dirigentes provinciales que, fuera de micrófono, piden que Néstor Kirchner se mantenga al margen del armado de las listas provinciales para las Elecciones 2009.
Lole soltó estas palabras en la misma nota donde volvía a poner en duda su candidatura tras conocerse la insistencia del ex presidente de imponer al titular del bloque oficialista en Diputados, Agustín Rossi, como cabeza de lista en Santa Fe para revalidad su banca. Inmediatamente, con grabador encendido pero sin emitir un mensaje directo, el gobernador de Córdoba, Juan Scharetti, se apoyó en el ex mandatario santafecino.
Apenas horas después de este mensaje por elevación de Reutemann a Casa Rosada, Schiaretti dijo: “Si usted me pregunta cuál es el peronismo que más se asemeja a la posición que tiene el peronismo de Córdoba, es la posición que tiene Carlos Reutemann en Santa Fe, con quien compartí la defensa del campo y compartimos trabajo para lograr que primara el sentido común en el conflicto con el campo”.
Nada parece casual. En las distintas provincias cobra cada vez más fuerza una sensación entre los gobernadores y principales dirigentes de que pegarse al gobierno nacional los terminará perjudicando. Por eso, exigen en voz baja “provincializar” la elección para no pagar platos por su alineamiento nacional, y a su vez tener el total control del armado de listas, sin sentir la presión de la birome de Kirchner escribiendo nombres.
Perdiendo imagen a tu lado
Ese fue el mensaje que todos los dirigentes que en las últimas horas pasaron a ver al titular del PJ por la Quinta de Olivos le dejaron. Se lo hicieron saber desde Schiaretti al chubutense Mario Das Neves, a los que se sumó el mandatario de San Juan, José Luís Gioja, quien se encargó de aclarar que “cada distrito va a fijar su estrategia electoral”.
En sintonía habló hoy el cordobés, que consultado por su reunión con el ex presidente buscó la misma definición que Gioja: “"No me dio ningún nombre y me dijo: 'Yo quiero que el peronismo cordobés ande bien, y la responsabilidad de poner un candidato es del peronismo de Córdoba y serán sus dirigentes quienes pongan a las personas que consideren conveniente'".
Das Neves, lo mismo: “Kirchner no arma las listas, eso lo decide cada gobernador, yo me voy a poner al frente de la campaña en mi provincia".
Estos tres mandatarios se sumaron así a los reclamos formulados antes por el senador Reutemann, el ex gobernador y titular del PJ entrerriano Jorge Busti y el gobernador Juan Manuel Urtubey (Salta), de “provincializar” la elección de octubre ante la pérdida de imagen positiva del gobierno nacional, tras el largo conflicto con el campo. En política, se sabe, esto huele a mensaje encubierto.
Operaciones “Chueco”
“Ni Falo, ni Vaca Narvaja”, dicen que lo interrumpió Schiaretti a Kirchner cuando hablaban de las listas. “Falta mucho. Recién en mayo o junio –agregó– empezaremos a armar la lista”. El patagónico, según cuenta hoy el diario cordobés La Voz del Interior, le había deslizado el nombre de la kirchnerista vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Patricia Vaca Narvaja, para la lista de candidatos por el justicialismo de Córdoba a las legislativas de octubre. Marcelo Falo es, a su vez, el vocero de José Manuel de la Sota.
Su rechazo a la diputada, última pieza de confianza que los Kirchner tienen en Córdoba aunque con nulo peso territorial, podría verse como un paralelismo al bloqueo que Reutemann intenta con Rossi.
Por esto, es que no descartan que en la provincia Mediterránea el kirchnerismo lleve a cabo algo que sabe hacer a la perfección: el juego doble. Así, mientras apoya las listas de Schiaretti, también buscaría fogonear otra del intendente de Córdoba, Daniel Giacomino, quien hace rato se distanció de su ex líder político, Luís Juez.
En la provincia creen que sólo un juego bien aceitado podrá frenar la victoria del ex mandatario capitalino, hoy alineado a la Coalición Cívica de Elisa Carrió.
A su vez, el matutino La Capital, de Rosario, destaca otro punto clave que genera rechazo entre los dirigentes provinciales: la presencia del operador K, Juan Carlos Mazzón. “Sucede que nosotros le pedimos a Kirchner que no se meta y apenas nos vamos, Mazzón toma el teléfono y le cuenta a los periodistas amigos otra historia
"La semana pasada se mandó ese invento de que van a sostener la candidatura de Reutemann con obra pública en Santa Fe. Como si el Lole los necesitara", añadió la fuente, enfurecida con el “Chueco”.
TOTAL NEWS
miércoles, 28 de enero de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario