martes, 10 de agosto de 2010

CÁRCELES


CÁRCELES PARA LA REINSERCIÓN SOCIAL DE LOS DELINCUENTES

Por el Dr. Francisco Bérnard

La Constitución Nacional de Argentina establece que "las cárceles deben ser limpias y cumplir una buena tarea para la reinserción social de quienes han delinquido en la sociedad" ¿Ello ocurre en la realidad? Todos conocemos , ya que ex- vox populi , que el sistema carcelario deja mucho que desear en la mayoría de las provincias argentinas.

Recordemos que´la situación llego a ser tan grave en las cárceles de Mendoza que debió intervenir la Corte Suprema de la Nación , pero a instancia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, por el grado de hacinamiento en las cárceles mendocinas, aunque eso se da en muchas provincias. Tenemos además el problema de los presos en las Comisarías que están también hacinados.Hay constantes fugas de las mismas.

La decisión del Organismo Internacional - para hacer un poco de memoria, porque después vienen los olvidos- ordenó al Estado Argentino el dictado de medidas cautelares, para que cese la violación de los derechos de integridad física, vida y dignidad de los detenidos. No escapa la atención de la opinión pública las numerosas revueltas en las cárceles, las fugas de presos y la mala alimentación que reciben en muchos casos.

Es necesario destinar en el presupuesto del dinero suficiente para construir cárceles en las que se pueda albergar más dignamente a los reos, es urgente pensar en un plan de educación o capacitación para que el día de mañana estos puedan reinsertarse en la sociedad, lo que no es un tema fácil, por la reticencia de los empleadores en muchos casos.Son personas humanas y generalmente producto de la pobreza y de la falta de trabajo, que por sobre todas las cosas , deben ser educados ya que en la mayoría de los casos no tuvieron acceso u oportunidades a hacerlo.

Las cárceles son para que los reos cumplan con la pena impuesta por los jueces, pero fundamentalmente para que en esos momentos se aproveche y puedan reinsertarse en la sociedad nuevamente como todo el mundo. No es solo castigar a los culpables de ciertos delitos sino que hay que "dignificarlos" como seres humanos para que tomen conciencia de su posible rol en la sociedad.

De mejorarse el servicio carcelario sin lugar a dudas esto influirá de manera muy positiva en la reeducación del condenado a cumplir una pena y tendrá un efecto positivo en los índices de criminalidad y de inseguridad reinantes en el país.

El delito se combate con educación y hoy por hoy las cárceles no cumplen en general con el objetivo que establece la Carta Magna.No hay que esperar que intervengan organismos internacionales de derechos humanos para que la Corte Suprema tenga que intervenir y darle consejos al Poder Ejecutivo que es el responsable de construir cárceles que cumplan con los objetivos que marca la Constitución Nacional. Diría que ello es lamentable.No se puede aceptar lo que comunmente se dice que las cárceles son verdaderas "escuelas del delito".

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