jueves, 16 de junio de 2011

EL MISTERIO


EL ENIGMA DE CRISTINA 2/8
A 7 días del 23/06: Amagan con Zannini pero levantan apuestas por Zamora

En un par de programas de TV deslizaron que Carlos Zannini sería el compañero de fórmula de Cristina pero... eso supondría un frágil binomio por estar restringido a Santa Cruz (ambos tienen su origen político patagónico aunque no hayan nacido ahí), provincia que transita la deriva política.
"No, no puede ser. ¿Te parece (Carlos) Zannini, quien es más de Santa Cruz que de Córdoba así como ella (Cristina Fernández) es más de Santa Cruz que de Buenos Aires? No habría representación territorial del resto del país. Y se encapsularían en un territorio que ni siquiera pueden administrar bien, ¿o no ven que está ardiendo?", explicó el peronólogo consultado.

Y él avanzó: "Buscando un integrante para el binomio Cristina padece los problemas que tiene con su gabinete: le falta gente, por eso tiene un equipo agotado pero que no puede cambiar ni ahora ni si gana. Y esa es la consecuencia del gran problema del momento: la falta de gestión. ¿O no se dieron cuenta que no hay gestión?"

Y remató: "Sin ir muy lejos: necesitaba designar a alguien que con su presencia ayudara a superar la crisis en el INADI (el Instituto Nacional de Antidiscriminación) pero terminó designando a uno que estaba en la línea sucesoria. Que no le suma nada para superar el escándalo. No tienen gente. Esa limitación aparecerá en el binomio".

Más allá de las especulaciones, 4 recortes interesantes.

> Carlos Pagni en el diario La Nación, de Ciudad de Buenos Aires, ofreciendo argumentos de lo más importante: confirmar que ella sí será candidata a su reelección, y formando la posibilidad de que Gerardo Zamora, gobernador UCR K de Santiago del Estero, sea el acompañante.

"(...) Es verdad que está más replegada en su familia y sus colaboradores domésticos. Pero sus ministros y secretarios se han acostumbrado a recibir llamados más temprano o más tarde de lo que era habitual. Los momentos más difíciles ocurren los fines de semana. Más allá de sus altibajos cardiológicos, por lo que se sabe triviales (aunque la llevan a controlar la presión a cada rato), la señora de Kirchner trabaja más que antes. Sus invitados la escuchan hablar de lo que piensa hacer en los próximos dos años. Y no da la impresión de haber perdido el gusto por la figuración, los discursos, los viajes. Es decir, el gusto por continuar en la función pública, en la que ingresó hace más de 20 años.

Las evidencias

Puede suceder que Cristina Kirchner haga, respecto de su reelección, lo contrario de lo que aconseja la razón. Pero las evidencias indican otra cosa. Ella está dejando en claro a dónde se dirige.

¿Para qué candidato presidencial habilitó la colectora de Martín Sabbatella si no es para ella?

¿Por qué razón reclamó a los gobernadores el derecho a armar la lista de diputados nacionales de sus provincias, si no es porque serán los nombres que irán ligados al de ella en octubre?

La Presidenta puede, y acaso debe, seguir jugueteando con la incertidumbre de los que se hicieron los rulos.

Ella sospecha que, el día que se convierta en candidata, es decir, en alguien que pide el voto, será más vulnerable.

Es posible que también experimente cierto goce monárquico en hacer notar que a su voluntad es la última instancia de la política. Se nota en los cabildeos por la selección del vice, que saldrá de su dedo -ahora circula también la idea de un radical: el santiagueño Gerardo Zamora-.

Por el momento el único costo que Cristina Kirchner ha pagado por sus incógnitas es el de hacer imaginar, por la reacción de los mercados ante la versión de su salida, la euforia inversora que ganaría a la Argentina con un cambio de gobierno. Pero tal vez ella interprete ese rechazo como un beneficio.

Con independencia de la táctica, el desfiladero de la señora de Kirchner es mucho más estrecho de lo que quiere hacer creer. Ausente su marido, ella no se ha preparado para heredarse en otro. Es una restricción que el kirchnerismo comparte con el menemismo o el duhaldismo. Ese déficit deviene de la baja vocación institucionalizante que registran los liderazgos en la Argentina, y condena al grupo a una sola candidatura, a una sola persona. Curioso límite para un ensayo progresista."


> Horacio Serafin, en La Voz del Interior, de la ciudad de Córdoba, deslizando la posibilidad de Carlos Zannini como Nº2 (en América 24, de Vila-Manzano, también Mauro Viale anduvo con el tema). El comentario obliga a una reflexión: ¿Cristina busca solo un líder para el Senado o su carencia de gestión requiere de algo más, en especial cuando hay días complicados por delante en el 2012 macroeconómico?

"(...) “Será un seguro (de extrema confianza)”, apostó la fuente, consultada por este diario. Tras cartón, puso fichas por el secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zannini.

Según esa fuente, Zannini, en quien ha terminado refugiándose Cristina desde la muerte de su esposo, tiene la suficiente capacidad política, además de técnica, para cubrirle las espaldas desde el Senado. El hombre que “guarda” la firma presidencial sorprendió anoche con su ausencia en el acto: es que en ese momento estaba dándole las puntadas finales a las alianzas cuyo registro cerró anoche.

Pero en lo que nadie parece dudar es en que la Presidenta irá por la reelección. El aliado bonaerense del oficialismo y candidato a gobernador bonaerense, el diputado Martín Sabbatella, dijo ayer que “no hay dudas de que Cristina será la candidata”, después de reunirse anteanoche con Zannini. “No hay plan B si no se presenta”, insistió a su vez el sindicalista de judiciales Julio Piumato. (...").


> Arnaldo Paganetti en el diario Río Negro, de General Roca, Río Negro, coincidió en que Gerardo Zamora es el posible compañero, aunque también regresó a Jorge Capitanich, gobernador del Chaco, al juego de los enigmas:

"(...) ¿Será un peronista, como se fue de boca Carlos Kunkel, o se insistirá con un radical K? Cuando ya se está en tiempo de descuento para que se conozca la fórmula del kirchnerismo –una fuente de la Rosada le dijo a "Río Negro que el misterio de develará el próximo martes–, la presidenta Cristina Fernández, subrayó ayer que "la concertación no fracasó".

"Fracasaron algunos (en obvia referencia a Julio Cobos), pero no la idea de poder hacer cosas juntos", le dijo a través de una videoconferencia al intendente de la localidad cordobesa de Villa Dolores, Juan Manuel Pereyra, del radicalismo alineado con el oficialismo que, en respuesta, elogió al desaparecido Néstor Kirchner y le pidió públicamente que "nos acompañe 4 años más".

De inmediato, las miradas convergieron en dos gobernadores con pertenencia a la UCR que se mantuvieron fieles a las políticas nacionales. El rionegrino Miguel Saiz y el santiagueño Gerardo Zamora. Las fuentes consultadas por este diario admitieron que en las últimas horas hubo consultas, aunque tanto el secretario de Comunicación, Juan Manuel Abal Medina, como el secretario general de la presidencia, Oscar Parrilli, no dieron crédito a los trascendidos e insistieron, para evitar retos, que la decisión es privativa de Cristina.

"A la Concertación hay que reavivarla nacionalmente y Saiz es una alternativa", confiaron fuentes de la Gobernación de Río Negro. Aseguraron que no tiene impedimentos legales porque si bien nació en Uruguay sus padres son argentinos.

Sin embargo, también desde Santiago del Estero se barajó con insistencia el nombre de Zamora.

Por el lado del peronismo, hubo significativas definiciones del secretario Legal y Técnico, Carlos Zannini, armador personal de la presidenta. Diez días atrás, señaló que "el modelo" tiene "una profunda raíz en el justicialismo", tras lo cual y luego de insistir que "vamos por más, vamos por el buen camino", dijo que "con el peronismo solo no alcanzar para mirar el futuro y la modernidad" y exhortó a "ampliar las fronteras".

El propio Zannini fue citado como posible compañero de binomio, aunque su pertenencia a Santa Cruz tornaría inconveniente la nominación.

Anoche, fuentes oficiales apuntaron hacia el gobernador de Chaco, Jorge Capitanich. "La única que decide es la presidenta y si ella me convoca estoy disponible", confesó esta semana a varios de sus íntimos."

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