Horacio:
Puedo imaginar la tristeza que te embargaba. El lacerante cerrojo impuesto a tu silencio.
Entiendo que eras un amigo y muy querido. Yo solo te conocì a travès de tus letras, y lleguè a tenerte un alto aprecio por tu compromiso y valentìa.
No puede verte el alma. Lo siento. Ignoro las circunstancias en las que optaste por la muerte; me apena profundamente y no puedo menos que lagrimear
al imaginar el caudal de tu padecimiento.
Resulta muy triste que nuevamente hayan sido pocas las voces que se alzan publicamente en tu memoria.
Los juicios de los hombres en la tierra ya han dejado demasiadas vìctimas de injusticias. En estos casos, la moral, la fe y el honor, solo puede dar lugar a la
comprensiòn y la indulgencia. Estas son cuestiones que exeden nuestra incumbencia.
Mi abrazo en el afecto espera encontrarte algùn dìa.
Alejandra
PS:Lloro por el dolor y la desesperaciòn de este hombre y me pongo a disposiciòn para ayudar a transitar el duelo por su ausencia a quienes lo necesiten.
Clr.Mª Alejandra Canale
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1 comentario:
alaloro al saber que no estas, nos dejaste desprotejidos.Tus pedidos de ayuda como dicen, dudo que ayan sido por otra cosa que no sea, amenazas, contra tu familia, o optaste por salvarlos.No moriste,te mataron, si te suicidaron, ellos lo sabem y TODO VUELVE, COMO ES ARRIBA ES ABAJO,
estaas con nosotros, marcas un camino, QUE QUEDE CONSTANCIA NO VA A VER MAS SUICIDADOS, QUE SE MUERAM ELLOS. BESOS DONDE ESTES, Y QUE DIOS TE GUARDE,AMIGO, GENIO, DECIDOR DE VERDADES QUE JODIAN.
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