lunes, 31 de enero de 2011

ENCUESTAS REALES


CONTRATADA POR DUHALDE

Una encuestadora brasileña le da a CFK sólo el 26% de intención de voto

Por Guillermo Cherashny

En notas anteriores señalamos que, ante la creciente falta de confiabilidad de muchos encuestadores locales, varios políticos de primera línea estarían recurriendo a empresas extranjeras. Un ejemplo es Ricardo Alfonsín, que contrató una consultora uruguaya, y Eduardo Duhalde hizo lo propio con una brasileña. Esta firma, una de las primeras en el mercado paulista, midió recientemente la intención de voto a CFK y le dio un 26%, un número muy lejano a lo que marcan los encuestadores oficialistas, que la siguen ubicando entre 38 y el 44%. Esta diferencia entre la realidad y la propaganda oficial sería un motivo central en la demora de la presidente por definir su candidatura. La existencia de estos números reservados también habilitaría el enorme despliegue en la costa de Daniel Scioli, que no deja pasar oportunidad para marcar que está dispuesto a ir por más. El gobernador advertiría que las dudas presidenciales van en aumento y que sus chances automáticamente crecen a medida que las de Cristina parecen declinar.

Clamor y mafias

En cuanto al operativo clamor, está claro que lo agitan los que no pueden sobrevivir en política sin ella. Sin embargo, esta realidad tiene cada vez más matices. Hay grupos que militan en el progresismo K, como el Movimiento Evita liderado por Emilio Pérsico y el “Chino” Navarro, que ya negocian con Scioli bastante indisimuladamente y en conversaciones privadas admiten que pueden llegar a prescindir de CFK si ésta decide dar el paso al costado. Sobre todo ahora que la crisis en el mundo islámico muestra que las dinastías políticas están en problemas.

Así es que Duhalde, asesorado por Eliseo Verón y los brasileños, ha decidido poner en la primera línea de fuego a Hugo Moyano, al cual calificó como desbocado, por los bloqueos a los diarios y los enfrentamientos con los empleados de comercio. El ex presidente no quiere perder espacio frente a Ernesto Sanz y Elisa Carrió, quienes centran sus ataques en Moyano por su impopularidad e intentan dejar a Cristina como una pobre viuda que no puede domar al belicoso dirigente sindical y sus hijos que van por más en todas sus actividades. Y que, además, son los generadores de la incipiente violencia que se está gestando en el país -con el resultado de varios muertos en los últimos meses- y que tiene todas las condiciones para seguir aumentando.

Las actividades comerciales de los Moyano se expanden a toda marcha, con eje en la empresa de recolección de basura Covelia, en la que figura como dueño Ricardo Depresbiteris, estrechamente vinculado al líder de la CGT, que se propone completar el circuito de la ecomafia calabresa, es decir, recolectar basura y luego reciclarla con una planta en el Gran Buenos Aires. Esta “ecomafia autóctona” estaría integrada por las “famiglias” Moyano, Mussi, Depresbiteris, más los Recalde, Piumato y Viviani. Algo semejante a las cinco familias mafiosas de Nueva York, que recientemente recibieron un fuerte golpe del FBI. La diferencia con nuestro país es que aquí son protegidas desde la máxima magistratura y por su ejecutor, Carlos Tomada, llamado el “gangoso” en el ambiente gremial.

El ministro de Trabajo viene legalizando los bloqueos, actos de violencia que comete el sindicalismo moyanista en la denominada “cultura del apriete”, como la calificó el politólogo Guillermo O’Donnell, describiendo el avance pandillero que sobrepasa a la presidente.

No hay comentarios: