EL EVANGELIO Y KIRCHNER

Nuestro presidente, no cabe duda alguna que vive aferrado al pasado. No es una posición autentica, sino una postura propia de su pragmatismo, que le permitió conquistar el electorado de la extrema izquierda en particular y de la izquierda en general.

También conquistó el electorado de facciones absolutamente irracionales y antidemocráticas, como por ejemplo las organizaciones radicalizadas de los terroristas de la década del 70.

No es una posición genuina, sino es una mascarada, como toda su personalidad y toda su gestión. Todo es falso, no verdadero.

En función de esa postura de la cual ahora le resulta difícil despegarse y desprenderse, convirtió este tema en uno de los ejes de su gestión política, con un revisionismo del pasado, bajo la óptica exclusiva de los terroristas de aquel entonces. Una visión absolutamente parcial y por ello intrínseca y totalmente injusta.

En función de ello se han gastado millones de pesos en adquirir los inmuebles para los museos de la memoria, entre ellos el enorme predio que ocupaba la ESMA, millones de pesos en ayuda a los grupos de “Derechos Humanos” relacionados con esta cuestión, en publicidad oficial sobre este tema y una gran parte de la justicia, decenas de jueces, que buscan publicitarse y en ganarse el favor gubernamental, abocados a escarbar en hechos ocurridos hace treinta años y reabrir heridas que fueron cerradas por anteriores gestiones gubernamentales.

Jueces que en vez de dedicarse a juzgar los miles de casos de delitos de toda especie, que la sociedad argentina aguanta pacientemente en estos momentos, pierden el tiempo en hurgar en ese ya lejano pasado, contrariando leyes elementales aceptadas universalmente.

En el día de ayer, en la misa dominical el sacerdote en su homilía, se explayó sobre el Evangelio según San Lucas (9, 51- 62) precisamente sobre ese punto: “Y Jesús le dijo: Ninguno que poniendo las manos en el arado mira hacia atrás, es apto para el Reino de Diós.” Instó a mirar el futuro y no mirar atrás.

Creo que ese párrafo del Evangelio es perfectamente aplicable al gobierno de Kirchner y muy particularmente a este. Su mirada al pasado lo hace olvidar el presente y el futuro.

Kirchner hace justamente lo contrario de lo que dice la Biblia. ¿Pero que le podemos pedir a un ateo?

Además en el caso de Kirchner es como pedirle peras a un olmo

Pero realmente lo más importante es que de las erróneas decisiones de Kirchner dependen, y ya lo estamos sufriendo ya en carne propia, el presente y futuro de todos los argentinos.



02-Jul-07

Dr. ALFREDO RAÚL WEINSTABL

alfredo@weinstabl. com.ar