Señor Director:
Hace tiempo que no rezaba. Decididamente había perdido el hábito de rezar. Pero gracias a este gobierno al que algunos acusan de combatir a la iglesia he vuelto a orar. Dada la situación que estamos viviendo, rezo para que no me asalten en la calle, para que pueda tomar un taxi cuándo voy al trabajo ya que como no pueden cargar GNC muchos no circulan, para que no corten la luz en el lugar donde trabajo y en mi domicilio, que no falte el gas y cuando prenda el tiro balanceado este mitigue la baja temperatura, para que la inflación deje de subir y para que los pobres sean tenidos en cuenta.
¡Gracias señor presidente por haberme devuelto la costumbre de rezar!
Cómo usted dice, en octubre voy a tener memoria y votaré ejerciéndola.
Alejandro Olmedo Zumarán.
olmedozumaran@hotmail.com
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